LIMA - PERÚ LUNES 25 DE JULIO DEL 2016
COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE PABLO A LOS ROMANOS
Romanos 6:12-14.
"No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como instrumentos de justicia. Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia".
*** Introducción.- Las perspectivas de la vida y la muerte adjudicadas por el sacrifico y muerte del Señor Jesús, y su resurrección de entre los muertos; han de ser el pensamiento regente en la vida de los creyentes a nivel general, y en un sentido particular también; ya que de ello depende nuestro avance y prosperidad en el ámbito neocreacional en el que fuimos incluidos. Mientras que el pensar nos puede llevar a soñar y fabular; el saber, nos ubica en el contexto ideal sin auxilio de la imaginación o la fantasía, haciéndonos uno con la realidad vivencial que nos insta a ir en pos de nuestra herencia, VIVIENDO PARA DIOS.
*** (Ro.6:12) Al insistir el apóstol en que el pecado no debe reinar (gobernar, comandar, dirigir, tener vigencia presencial y autoral en nosotros) en nuestro cuerpo mortal, nos pide erradicar la nefasta influencia de la naturaleza pecaminosa intrínseca; porque si la misma reina; es porque nuestra voluntad se ha rendido a su influjo y dominio, cediendo voluntariamente a hacer lo malo, denigrarnos como seres creados, y afrentar al Dios vivo; algo de lo que el Señor en su gracia nos redimiera por su divina misericordia. Las concupiscencias o deseos desordenados que pululan en nuestro pensar, son el producto de no haber renovado nuestro entendimiento, y aquel espacio que le dejamos al plano ideal de la antigua creación, hace que se reconquisten los "territorios liberados" por los antiguos dominadores. Recordemos que todas las naciones que no fueron vencidas y ultimadas en la tierra de promisión, coexistieron con Israel, contaminando la tierra, siendo tropiezo para los judios, y facilitando que fueran expulsados de la misma por el juicio divino, hasta una total dispersión.
***(Ro.6:13) Del pensamiento contaminante citado en el párrafo anterior, pasamos a la insana actitud de quienes se rinden pasivamente a la maligna influencia, cediéndose porcentualmente a las cosas de la carne, hasta que ésta alcanza un dominio total, intoxicando nuestro ser integral, y haciendo que nuestros miembros ejecuten su inicuo designio con una insana aquiescencia. Mientras que nuestro corazón no defina radicalmente darle forata al pecado de nuestras vidas; viviremos en continuas zozobras. La instrumentalidad de antaño (nuestros miembros cedidos al pecado y su fluir repetitivo, que se transformara en maldad); deben constituirse en instrumentos de justicia. Pero, ¿cómo podremos hacer eso? Llevando nuestra integridad orgánica hasta la misma presencia del Dios vivo, para rededicársela, aceptando su Señorío, y disponiendo que aquellos instrumentos que antes sirvieran a la iniquidad, limpios y liberados de su proclividad maligna, se rindan al control del Espíritu Santo en bendito holocausto, trayendo gloria al Padre. ¡Haz de nuestros miembros, Señor, instrumentos de tu justicia!
*** (Ro.6:14) Este versículo, en especial, nos da la pauta necesaria para pensar que ser instrumentos del Señor no es la quimera de algunos alucinados; sino la certeza de la esperanza que el apóstol asienta en nuestros corazones (así como Moisés puso las tablas de la ley en el arca del pacto), diciéndonos: "EL PECADO NO SE ENSEÑOREARÁ DE VOSOTROS", haciendo referencia a todos los santos, y no a un grupo selecto. Sí, creyente, EL SEÑORÍO DEL PECADO TERMINÓ. Ya no podemos hacer uso de la excusa del Chavo del Ocho: "Fue sin querer, queriendo" ¡Tamaña excusa contradictoria! Mientras el hombre viejo vivía, la vigencia condenatoria de la ley seguía señalándonos con su dedo acusador; pero cuando morimos para ella (juntamente con Cristo), su interés para con nosotros caducó, y una lápida allá afuera daba fe de nuestra nueva posición: A.L.C.M. - A.E.C.V.E. Y la ley no visita los cementerios para condenar a ningún muerto, no teniendo autoridad más allá del deceso del referente. ¿Me preguntas que significan aquellas siglas que mencionamos? Te respondo: A LA CARNE MURIÓ - AHORA EN CRISTO VIVE ETERNAMENTE. Y así, bajo la consigna de la Gracia, fluimos en libertad en esta esfera paralela que nos hace ciudadanos del reino viviendo en dos campamentos, afectando ambos, como nuestro espíritu humano hace con nuestra alma y nuestro cuerpo, llevándolos cautivos a la obediencia a Cristo Jesús.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 25/07/2016
LAS PAUTAS APOSTÓLICAS NO DEBEN CAER EN EL VACÍO, DEBIENDO SER ASIMILADAS POR CADA CREYENTE, PARA QUE NUESTRO TRIUNFO LE DÉ A DIOS LA GLORIA. LA IMPORTANCIA DE SER UN VASO ÚTIL, Y CÓMO LOGRARLO, LLENANDO LA MEDIDA DE LO QUE DIOS APAREJÓ PARA NOSOTROS EN CALIDAD DE HEREDEROS.
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