LIMA - PERÚ LUNES 12 DE FEBRERO DEL 2018 MENSAJE # 2301.
PRIMERA DE CORINTIOS 1:4-8. (VERSIÓN REINA-VALERA CONTEMPORÁNEA).
"Siempre doy gracias a mi Dios por ustedes y por la gracia que él les ha dado en Cristo Jesús. Porque en él ustedes fueron enriquecidos en todas las cosas, tanto en palabra como en conocimiento. Así se ha confirmado el testimonio acerca de Cristo, de tal manera que nada les falta en ningún don, mientras esperan la manifestación de nuestro Señor Jesucristo, el cual también los confirmará hasta el fin, para que sean irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es Dios, quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor".
=== Después de saludar a la comunidad, revelándoles lo que poseen en Cristo en calidad de pueblo santo; Pablo los abriga con la bendición apostólica clásica, buscando el que sean inundados de la gracia y de la paz que el Padre y el Hijo nos traen al rodearnos con su escudo, de modo que disfrutemos de la gracia derramada al estar premunidos de la paz, introduciendo a los destinatarios en el paradisíaco hábitat de quienes viven en la presencia de Dios. La gracia les es entregada a los santos en la medida en que ellos se disponen a recibirla, siendo por ello que algunos la disfrutan plenamente (y no necesariamente en la forma más sabia y conveniente) o la gozan a plazos, vale decir de a pocos, conforme su corazón se vaya ensanchando a las realidades espirituales. De allí que haya cristianos raquíticos, opacos, apáticos, y sumamente carnales, como solemos verlos en las visitas itinerantes a las congregaciones hermanas, que nos hacen recordar tanto la propia. Así como en la fiesta de la pascua, allá en Egipto, el Cordero fue seleccionado según el comer de cada hombre; de modo análogo las porciones divinas que el Espíritu nos sirve generosamente, pueden ser o no aprovechadas por cada uno de los comensales.
=== Nótese que el apóstol arguye que se siente agradecido para con el Señor por la gracia derramada sobre los componentes del pueblo corintio, implicando que había sido excelente y llena de gloria. Recordemos que la gracia se supedita o subordina a la persona de Cristo Jesús operando en nosotros como una expresión cabal de la vida divina. Vale decir que cuando él está "sobre nosotros", operamos bajo su jefatura; cuando está "con nosotros", él nos ministra su autoridad, fortaleza y poder poniéndonos el yugo que hace fácil todo, y aligera nuestras cargas; y cuando está "en nosotros", nos ubica en la posición bicampamentaria (del cielo y de la tierra), que nos hace actuar bajo los auspicios de la celeste esfera (Mt.6:10). La riqueza espiritual (Fil.4:19), nos son compartidas de dos maneras: (1) En palabra; (2) En conocimiento. Lo primero, es para la operatividad permanente, para que entendamos el poder del Verbo divino que enuncia el principio sobre el cual se habrá de operar, la forma en que se hará, y los resultados que han de conseguirse. Lo segundo, habla de la sabiduría guardada para ser aplicada a su sazón como una realidad inalterable. Es la revelación divinamente entregada para que caminemos en ella vez tras vez. Y así, cuando aplicamos las pautas divinas, se obtienen resultados conforme a su plan y propósito, obteniendo su beneplácito. Nuestro éxito en Cristo, obedece al fiel cumplimiento de su voluntad, siendo nosotros sus agentes humanos, o sus intérpretes en la tercera dimensión.
=== Las dotaciones espirituales, habían sido completadas en los miembros de la comunidad corintia, y decimos esto porque ya el Padre había hecho provisión de ello; la instrucción acerca de su uso (para evitar los yerros o el abuso), es lo que veremos más adelante, porque la falla no estaba en el don y su ejercicio; sino en la captación respecto al servicio utilitario para toda la grey. Si lo queremos ver de otro modo, el reparto de utilidades, que haría de la iglesia la entidad corporativa que es, haría de cada unidad celular (cada creyente dotado), una parte del todo que Dios se agradaría de usar; como ocurriera allá en Edén, cuando el Señor tomara cada partícula de arcilla para moldear o darle forma a lo que sería un ser humano, con los cientos de miles de células de los que está constituido. La manifestación del Señor Jesucristo, indicando así su parousía (su presencia entre nosotros en la esfera regia), nos muestro como el apóstol se proyecta a lo que vendrá, dando por sentado que las realidades espirituales habrían de ejecutarse de la mano del Paracleto, quien no sólo nos orientaría al principio de nuestra peregrinación a la gloria, sino que nos entregaría LITERALMENTE al Padre, como individuos perfeccionados y aceptos en el Amado. Me gusta esta frase paulina: "FIEL ES DIOS, quien nos llamó para tener COMUNIÓN CON SU HIJO JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR". Sí, es una caminata de largo aliento, de allí nuestra necesidad de afiatarnos al divino fluir durante toda nuestra marcha a la gloria.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 12/02/2018 MENSAJE # 2301
"Siempre doy gracias a mi Dios por ustedes y por la gracia que él les ha dado en Cristo Jesús. Porque en él ustedes fueron enriquecidos en todas las cosas, tanto en palabra como en conocimiento. Así se ha confirmado el testimonio acerca de Cristo, de tal manera que nada les falta en ningún don, mientras esperan la manifestación de nuestro Señor Jesucristo, el cual también los confirmará hasta el fin, para que sean irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es Dios, quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor".
=== Después de saludar a la comunidad, revelándoles lo que poseen en Cristo en calidad de pueblo santo; Pablo los abriga con la bendición apostólica clásica, buscando el que sean inundados de la gracia y de la paz que el Padre y el Hijo nos traen al rodearnos con su escudo, de modo que disfrutemos de la gracia derramada al estar premunidos de la paz, introduciendo a los destinatarios en el paradisíaco hábitat de quienes viven en la presencia de Dios. La gracia les es entregada a los santos en la medida en que ellos se disponen a recibirla, siendo por ello que algunos la disfrutan plenamente (y no necesariamente en la forma más sabia y conveniente) o la gozan a plazos, vale decir de a pocos, conforme su corazón se vaya ensanchando a las realidades espirituales. De allí que haya cristianos raquíticos, opacos, apáticos, y sumamente carnales, como solemos verlos en las visitas itinerantes a las congregaciones hermanas, que nos hacen recordar tanto la propia. Así como en la fiesta de la pascua, allá en Egipto, el Cordero fue seleccionado según el comer de cada hombre; de modo análogo las porciones divinas que el Espíritu nos sirve generosamente, pueden ser o no aprovechadas por cada uno de los comensales.
=== Nótese que el apóstol arguye que se siente agradecido para con el Señor por la gracia derramada sobre los componentes del pueblo corintio, implicando que había sido excelente y llena de gloria. Recordemos que la gracia se supedita o subordina a la persona de Cristo Jesús operando en nosotros como una expresión cabal de la vida divina. Vale decir que cuando él está "sobre nosotros", operamos bajo su jefatura; cuando está "con nosotros", él nos ministra su autoridad, fortaleza y poder poniéndonos el yugo que hace fácil todo, y aligera nuestras cargas; y cuando está "en nosotros", nos ubica en la posición bicampamentaria (del cielo y de la tierra), que nos hace actuar bajo los auspicios de la celeste esfera (Mt.6:10). La riqueza espiritual (Fil.4:19), nos son compartidas de dos maneras: (1) En palabra; (2) En conocimiento. Lo primero, es para la operatividad permanente, para que entendamos el poder del Verbo divino que enuncia el principio sobre el cual se habrá de operar, la forma en que se hará, y los resultados que han de conseguirse. Lo segundo, habla de la sabiduría guardada para ser aplicada a su sazón como una realidad inalterable. Es la revelación divinamente entregada para que caminemos en ella vez tras vez. Y así, cuando aplicamos las pautas divinas, se obtienen resultados conforme a su plan y propósito, obteniendo su beneplácito. Nuestro éxito en Cristo, obedece al fiel cumplimiento de su voluntad, siendo nosotros sus agentes humanos, o sus intérpretes en la tercera dimensión.
=== Las dotaciones espirituales, habían sido completadas en los miembros de la comunidad corintia, y decimos esto porque ya el Padre había hecho provisión de ello; la instrucción acerca de su uso (para evitar los yerros o el abuso), es lo que veremos más adelante, porque la falla no estaba en el don y su ejercicio; sino en la captación respecto al servicio utilitario para toda la grey. Si lo queremos ver de otro modo, el reparto de utilidades, que haría de la iglesia la entidad corporativa que es, haría de cada unidad celular (cada creyente dotado), una parte del todo que Dios se agradaría de usar; como ocurriera allá en Edén, cuando el Señor tomara cada partícula de arcilla para moldear o darle forma a lo que sería un ser humano, con los cientos de miles de células de los que está constituido. La manifestación del Señor Jesucristo, indicando así su parousía (su presencia entre nosotros en la esfera regia), nos muestro como el apóstol se proyecta a lo que vendrá, dando por sentado que las realidades espirituales habrían de ejecutarse de la mano del Paracleto, quien no sólo nos orientaría al principio de nuestra peregrinación a la gloria, sino que nos entregaría LITERALMENTE al Padre, como individuos perfeccionados y aceptos en el Amado. Me gusta esta frase paulina: "FIEL ES DIOS, quien nos llamó para tener COMUNIÓN CON SU HIJO JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR". Sí, es una caminata de largo aliento, de allí nuestra necesidad de afiatarnos al divino fluir durante toda nuestra marcha a la gloria.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 12/02/2018 MENSAJE # 2301
LA HISTORIA CONJUNTA, ACERCA DEL DIVINO OBRAR, Y DE NUESTRA PARTICIPACIÓN CON ÉL, NO DEBE SER VISTA CON EXTRAÑEZA, SINO CON FAMILIARIDAD, PORQUE SEPARADOS DE ÉL NO PODEMOS HACER NADA.
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