miércoles, 8 de enero de 2020

EL MODO DE PENSAR DEL CREYENTE GENUINO VINO POR UN PROCESO DE CONVICCIÓN ESPIRITUAL DIVINA, DETERMINANDO UNA POSICIÓN IRREVERSIBLE, INALTERABLE Y FINAL, ¡QUÉDATE SEGURO EN ELLO!

LIMA - PERÚ   MARTES 24 DE SETIEMBRE DEL 2019   MENSAJE # 3276

SEGUNDA DE TESALONICENSES 2:1-3a.

"Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera ... ". 

=== Esta pregunta de los hermanos tesalonicenses nos pone en antecedentes sobre cosas que son básicas para una adecuada comprensión sobre la segunda venida del Señor, y los eventos que han de cumplirse antes de la misma. Y Dios nos concede saber a través de la inspirada pluma paulina cada uno de ellos pormenorizadamente. Será útil que estemos muy atentos. Aunque Pablo ya había tratado estas cosas con anterioridad (1Ts.4), en esta ocasión nos concede una perspectiva más específica, por la cual quiere  mantener incólume la certeza de la palabra predicada, fijando una posición que debe mantener a cada creyente dentro de su convicción espiritual correcta, habiendo dispuesto sus corazones con una sola y sólida perspectiva: El recogimiento del cuerpo de Cristo, la familia de Dios, para estar presentes en las bodas del Cordero con su novia elegida. La posición de la Iglesia no es la de temor o la de una insana expectativa; sino la de una novia enamorada que espera por quien la desposara para unirse con él finalmente y confirmar su desposorio. El pecado, la culpa, la indiferencia, la irreverencia, el desechar su esperanza, el buscar otros brazos; tienen que ver con un temor, el de ser desechados; y a esto apuntaban las falsas ministraciones de los siervos de Satán. Sintiéndose rechazados y desechados, todo carecía de valor, y el hundirse en el cieno del pecado, o el desbocarse hacia el abismo; surgían como grandes opciones. Este pueblo debía ser devuelto a su realidad en/con Dios, y esta fue la carga apostólica que reubicó a Tesalónica, y a nosotros por extensión.

=== Todos los descalabros del pensamiento humano, por las fuentes que Pablo refiere aquí: 
(1) Un espíritu o viento de doctrina; 
(2) Una palabra de revelación; 
(3) Una supuesta carta paulina que refrendaba este absurdo. 
Nótese que todo entra en los parámetros de lo revelacional; para sorprenderlos con algo nuevo o más actualizado. El diablo toma un punto de referencia que luego será torcido, cortado o ampliado, dando un panorama más amplio e incierto, que permita suponer que lo afirmado es real aunque venga sin refrendos escriturales, y los haga navegar en océanos de incertidumbre. La palabra de revelación puede impulsar a lo más alto, o a sumergirlos en profundidades que los haga ver cosas extrañas de significaciones varias; y aquella "carta paulina" sin firma, pero bien parecida a la letra de Pablo (al parecer) en la que nunca se habían fijado; todo parece tan real, que las convicciones se tornan en nubosidades, en neblinas que se difuminan, en sombras que se desvanecen ... en ¿mentiras? A esto quiere llegar el enemigo; mientras que Pablo propone una fijación espiritual, mental, y acorde con la sana enseñanza apostólica como un hecho inalterable; y no una frase siempre cambiante, el diablo creará un movimiento oscilatorio que haga inestable la visión o perspectiva que el pueblo de Dios posee como una certeza divinal invariable que nos llevará de la mano a donde anhelamos ir.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   24/09/2019   MENSAJE # 3276

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