LIMA - PERÚ MARTES 20 DE AGOSTO DEL 2019 MENSAJE # 3241.
HAGEO 1:7-13.
"Äsí ha dicho Yahweh de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos. Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Yahweh. Buscáis mucho, y recogéis poco; y encerráis en casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice Yahweh de los ejércitos. Porque mi casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia casa. Por eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos. Y llamé la sequía sobre esta tierra, y sobre los montes, sobre el trigo, sobre el vino, sobre el aceite, sobre todo lo que la tierra produce, sobre los hombres y sobre las bestias, y sobre todo trabajo de manos. Y oyó Zorobabel hijo de Salatiel, y Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el resto del pueblo, la voz de Yahweh su Dios, y las palabras del profeta Hageo, como le había enviado Yahweh su Dios; y temió el pueblo delante de Yahweh".
=== Desde que el pueblo judío volviera de la cautividad, enviados por el rey Ciro a edificar el templo de Dios y la ciudad de Jerusalén, y habiendo empezado con entusiasmo; se vieron impedidos por los nuevos habitantes de la zona, y el desánimo cundió entre ellos, hasta entrar en un reposo de tres lustros, abandonando su labor reconstructiva, y dedicándose cada quien a lo suyo, construyéndose casas lujosas, y dedicándose a sus negocios; hasta hacer de la ciudad un lugar agradable para vivir y lleno de bienestar para sus habitantes. Cuando las consignas son olvidadas, y nos dedicamos enteramente a nosotros mismos, podemos hacer surgir lo mejor de nuestros deseos, nuestros sueños, y hasta nuestros delirios; omitiendo pensar en lo que nos rodea, ignorando los actos divinos que el profeta describe, llamando a todos a reflexionar sobre todo aquello que está pasando ante sus narices, sin que ellos se den por enterados. Cuando la vida se hace hueca, vana y sin propósito; todas las cosas se subordinan al placer hedonista, al orgullo personal, y a las apariencias; ¿Por qué? Porque se ha perdido la perspectiva, el sentido real de las cosas, y nos hemos hundido en el cieno de una vida sin propósito, sin compromiso con la Deidad, morando en el vacío existencial, en el que todo se reduce al momentáneo disfrute, y a la intoxicación y la embriaguez de los cuerpos, los goces anímicos, y el gradual amortecimiento que nos separa de Dios y su propósito soberano, de su beneplácito, y de nuestra relación bicampamentaria (del cielo y de la tierra), bajándolo todo hasta el plano superficial de quien vive para saciar sus sentidos ... y punto.
=== Si meditáramos sobre nuestros caminos (lo que venimos haciendo sin ton ni son, sin una perspectiva hacia nuestra fusión con el Dios que nos redimió, nos llamó y nos dio una consigna), nos despertaríamos al panorama de la realidad en la que fuimos llamados a vivir; sacudiéndonos de esa horrible modorra que nos aletargara, hasta detenernos en un trágico anquilosamiento que nos llegara a anular, y que el enemigo no nos atacara, por habernos constituido en sujetos inocuos, en gente nula e insensible. Cuando nos damos cuenta que ya no somos atacados, vemos el olvido de Dios y de su casa, y de su instrucción, como una fácil solución; y nos hamacamos con ese pensamiento; hasta dormir 'el sueño de los justos', que solamente es despertado por la trompeta final en el día de resurrección; siendo por ello que Hageo nos refiere el cómo Dios HIZO DESPERTAR EL ESPÍRITU del jefe político de la nación, y del sumo sacerdote que los guiara en el ámbito religioso; y luego, de la nación entera, para proceder a hacer lo que hacía quince años estaba paralizado. ¡Cuánto de los divinos intereses duerme en nuestro ser, sin esperanza de ser devueltos a la realidad de nuestro compromiso con la Deidad cual si fuéramos 'bellos durmientes'! ¿Podremos despertar? ¿querremos hacerlo?
=== El Padre hizo que los dormidos restauradores despertaran de su narcosis, y que se sacudieran de la misma, y volvieran a su actividad personal que los trajera de vuelta a su patria, después de reaccionar a las sucesivas desgracias y mermas de su provisión ordinaria, las cuales recién fueron vistas como actos divinos de reconvención, para que se volvieran a la razón de estar allí, y esto era el RENOVAR EL CONTACTO CON LA DEIDAD PARA QUE LA GLORIA EMERGIERA NUEVAMENTE, y que el Padre fuera loado como se merecía, haciendo que la comunión entre el cielo y la tierra se viera restituida al máximo nivel, devolviéndole a la nación israelita el brillo y el esplendor que los caracterizara en su plano relacional con la Deidad. La casa de Dios volvería a ser el centro de gravedad en el que la nación judía se gozara y alegrara por siempre. ¡Aleluya!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 10/08/2019 MENSAJE # 3241
"Äsí ha dicho Yahweh de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos. Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Yahweh. Buscáis mucho, y recogéis poco; y encerráis en casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice Yahweh de los ejércitos. Porque mi casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia casa. Por eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos. Y llamé la sequía sobre esta tierra, y sobre los montes, sobre el trigo, sobre el vino, sobre el aceite, sobre todo lo que la tierra produce, sobre los hombres y sobre las bestias, y sobre todo trabajo de manos. Y oyó Zorobabel hijo de Salatiel, y Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el resto del pueblo, la voz de Yahweh su Dios, y las palabras del profeta Hageo, como le había enviado Yahweh su Dios; y temió el pueblo delante de Yahweh".
=== Desde que el pueblo judío volviera de la cautividad, enviados por el rey Ciro a edificar el templo de Dios y la ciudad de Jerusalén, y habiendo empezado con entusiasmo; se vieron impedidos por los nuevos habitantes de la zona, y el desánimo cundió entre ellos, hasta entrar en un reposo de tres lustros, abandonando su labor reconstructiva, y dedicándose cada quien a lo suyo, construyéndose casas lujosas, y dedicándose a sus negocios; hasta hacer de la ciudad un lugar agradable para vivir y lleno de bienestar para sus habitantes. Cuando las consignas son olvidadas, y nos dedicamos enteramente a nosotros mismos, podemos hacer surgir lo mejor de nuestros deseos, nuestros sueños, y hasta nuestros delirios; omitiendo pensar en lo que nos rodea, ignorando los actos divinos que el profeta describe, llamando a todos a reflexionar sobre todo aquello que está pasando ante sus narices, sin que ellos se den por enterados. Cuando la vida se hace hueca, vana y sin propósito; todas las cosas se subordinan al placer hedonista, al orgullo personal, y a las apariencias; ¿Por qué? Porque se ha perdido la perspectiva, el sentido real de las cosas, y nos hemos hundido en el cieno de una vida sin propósito, sin compromiso con la Deidad, morando en el vacío existencial, en el que todo se reduce al momentáneo disfrute, y a la intoxicación y la embriaguez de los cuerpos, los goces anímicos, y el gradual amortecimiento que nos separa de Dios y su propósito soberano, de su beneplácito, y de nuestra relación bicampamentaria (del cielo y de la tierra), bajándolo todo hasta el plano superficial de quien vive para saciar sus sentidos ... y punto.
=== Si meditáramos sobre nuestros caminos (lo que venimos haciendo sin ton ni son, sin una perspectiva hacia nuestra fusión con el Dios que nos redimió, nos llamó y nos dio una consigna), nos despertaríamos al panorama de la realidad en la que fuimos llamados a vivir; sacudiéndonos de esa horrible modorra que nos aletargara, hasta detenernos en un trágico anquilosamiento que nos llegara a anular, y que el enemigo no nos atacara, por habernos constituido en sujetos inocuos, en gente nula e insensible. Cuando nos damos cuenta que ya no somos atacados, vemos el olvido de Dios y de su casa, y de su instrucción, como una fácil solución; y nos hamacamos con ese pensamiento; hasta dormir 'el sueño de los justos', que solamente es despertado por la trompeta final en el día de resurrección; siendo por ello que Hageo nos refiere el cómo Dios HIZO DESPERTAR EL ESPÍRITU del jefe político de la nación, y del sumo sacerdote que los guiara en el ámbito religioso; y luego, de la nación entera, para proceder a hacer lo que hacía quince años estaba paralizado. ¡Cuánto de los divinos intereses duerme en nuestro ser, sin esperanza de ser devueltos a la realidad de nuestro compromiso con la Deidad cual si fuéramos 'bellos durmientes'! ¿Podremos despertar? ¿querremos hacerlo?
=== El Padre hizo que los dormidos restauradores despertaran de su narcosis, y que se sacudieran de la misma, y volvieran a su actividad personal que los trajera de vuelta a su patria, después de reaccionar a las sucesivas desgracias y mermas de su provisión ordinaria, las cuales recién fueron vistas como actos divinos de reconvención, para que se volvieran a la razón de estar allí, y esto era el RENOVAR EL CONTACTO CON LA DEIDAD PARA QUE LA GLORIA EMERGIERA NUEVAMENTE, y que el Padre fuera loado como se merecía, haciendo que la comunión entre el cielo y la tierra se viera restituida al máximo nivel, devolviéndole a la nación israelita el brillo y el esplendor que los caracterizara en su plano relacional con la Deidad. La casa de Dios volvería a ser el centro de gravedad en el que la nación judía se gozara y alegrara por siempre. ¡Aleluya!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 10/08/2019 MENSAJE # 3241
CUANDO NOS ADORMECEMOS EN NUESTRO FLUIR COMO GENTE RESTAURADORA, EL ENEMIGO SE APROPIA DE NUESTROS ARRESTOS Y ÁNIMO, LLEVÁNDONOS AL OLVIDO PROGRESIVO DE NUESTRAS CONSIGNAS. ¡CUIDADO!
ResponderEliminarAmén hermano ��
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