miércoles, 13 de noviembre de 2019

PONER LAS COSAS EN SU LUGAR, Y DARLE A DIOS Y A NUESTRAS REUNIONES DE AMOR O ÁGAPES LA SOLEMNIDAD QUE SE MERECEN, DEBE SER NUESTRA PREOCUPACIÓN. VOLVAMOS AL ORDEN QUE HONRA A DIOS Y NOS ENNOBLECE COMO SANTOS DEL ALTÍSIMO.

LIMA  - PERÚ    DOMINGO 25 DE AGOSTO DEL 2019   MENSAJE # 3246

JUDAS 1-4.      (VERSIÓN REINA VALERA CONTEMPORÁNEA).

"Yo, Judas, que soy siervo de Jesucristo, y hermano de Jacobo, saludo a los llamados, amados por Dios Padre y resguardados por Jesucristo. Que la misericordia, la paz y el amor abunden en ustedes. Amados hermanos, yo he tenido un gran deseo de escribirles acerca de la salvación que tenemos en común, pero ahora me encuentro en la necesidad de escribirles para rogarles que luchen ardientemente por la fe que una vez fue dada a los santos, pues por medio de engaños se han infiltrado entre ustedes algunos malvados. Ésto que desde antes habían sido destinados a la condenación, convierten la gracia de nuestro Dios en libertinaje y niegan a Jesucristo, nuestro único Soberano y Señor"

=== Por las referencias dadas en la salutación, asumimos que este Judas es el hermano del Señor y de Jacobo; y por sus analíticas inferencias y su aguda observación del fluir local de la grey a la que le escribe, entendemos que toma su cargo como sobreveedor muy en serio, y no meramente como un formulismo o como una posición de la cual quisiera blasonar, mostrándonos con ello la naturaleza acuciosa de quien ostenta un plano de autoridad cuyo valor es elevado al máximo; y no para enseñorearse de la grey; sino para cuidar de ella y de la sana doctrina, manteniendo la comunión con la Deidad en el nivel correspondiente. No debemos dejar que nuestro celo sirva tan solo para criticar, censurar o condenar; sino para que el buen orden y la fidelidad al Padre se mantenga en línea con lo que Dios solicita de nosotros como pueblo suyo. La función ministerial aquí, equivale a la de un atalaya o centinela que cautela la seguridad de toda la ciudad, y por la vida de sus habitantes. Estemos atentos al sonido de la trompeta que nos alerta del peligro; así del externo como del interno, haciéndonos conscientes de todo lo que implica el interés divinal de modo que alcancemos plenitud y agrademos a Dios.

=== Aunque Judas hubiera querido tocar el asunto de nuestra común salvación, un sentido de urgencia le hizo notar las grietas que ya se advertían en el plano de la asociación (refiriéndose a la comunión de los santos), donde la naturaleza profana de los malvados hacía gala de su irreverencia y de su naturaleza infame, la cual no sabían disimular, mostrando su grosería y su procacidad en la forma más descarada, escandalizando a los demás, que no sabían cómo personas tan estimadas podían comportarse de un modo tan bochornoso, vergonzoso y blasfemo, preguntándose si tal vez eran ellos los 'legalistas o quisquillosos' que exageraban en sus prejuicios. Y no, no era el ser pudorosos o ridículos en su sentir; sino que era legítimo el sentirse escandalizado y asombrado de la inconducta de aquellos que se suponían eran personas muy estimadas entre los hermanos de la grey, de quienes jamás se esperaba tal desdoro. Judas vaticinaba una lucha ardorosa contra estos detractores de la gracia divina, quienes habiendo comenzado su campaña de demolición con sutiles expresiones y grotescas actitudes, fueron 'soltándose', hasta tornarse réprobos y profanos, contagiando su vulgaridad y descaro a los demás, quienes iban perdiendo la propiedad en el trato, los modales, y la probidad que eran la norma en sus fiestas de amor o ágapes. Tal relajamiento era incompatible con la sobriedad que caracterizara antaño la santidad de las reuniones de comunión, adoración y alabanza.

=== Los creyentes habían sido advertidos sobre este género de individuos, y sobre sus proclividades típicamente tóxicas y contaminantes, que cortaban la reverencia al Padre y la santidad de la comunión de los santos, relajando los usos, las sanas costumbres y el recogimiento que antes eran la norma congregacional. ¿Dónde había quedado todo ello? Y al ir perdiendo progresivamente la correcta actitud eclesial, la  gracia perdió sus castas formas, y la chabacanería y la vulgaridad invitaron al libertinaje, y la gracia vino vestida de licencia para pecar y para obrar descaradamente, descartándose la virtud, la decencia, el buen gusto y la etiqueta que antes distinguiera al pueblo de Dios, desdibujándose en los corazones de todos el señorío y la soberanía que distinguiera a Jesús como nuestro Señor y absoluto Soberano. ¿Habremos perdido el tripartito balance que nos llamara a santificarnos en espíritu, alma y cuerpo? ¡Es tiempo de recomponer la probidad y la decencia en cada una de nuestras fiestas de amor!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA    25/08/2019   MENSAJE # 3246

1 comentario:

  1. LOS SANTOS TENEMOS UNA LÍNEA DE ACCIÓN COHERENTE CON NUESTRAS FUNCIONES Y NUESTRA RELACIÓN CON LA DEIDAD. MANTENGÁMONOS EN ELLO DURANTE TODA NUESTRA PEREGRINACIÓN A LA GLORIA.

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