LIMA - PERÚ LUNES 05 DE AGOSTO DEL 2019 MENSAJE # 3226
SEGUNDA DE TESALONICENSES 2:1-2, 13-17.
"Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestra manera de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca ... Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia, conforte vuestros corazones, y os confirme en toda palabra buena y obra".
=== Esta porción de la palabra de Dios es de importancia vital para fijar una posición madura respecto a lo que refiere el apóstol en los versos 1 y 2, es decir: "NUESTRA MANERA DE PENSAR". La solidez de nuestro fluir depende de nuestros principios y del grado de compromiso adquirido al solidificarlos e identificarnos con ellos, componiendo nuestro credo, nuestro firme cimiento, nuestra certeza y esperanza; el eje alrededor del cual girará toda nuestra carga operativa, confirmando con nuestros hechos los pensamientos y directivas que nos guiarán en el plano eternal. Un espíritu comprometido con la verdad evangelística y la certeza regia, no se dejará mover por las estrategias malignas, afirmando sus rostros para ir a Jerusalén por la ruta apostólica que ha llegado a ser nuestro norte. Los luchadores de sumo japonés, dentro de un círculo que les sirve como ring, buscan desequilibrar al contendor para arrojarlo fuera del tal, obteniendo así su victoria. De modo análogo, el diablo buscará sacarnos de la certeza de nuestra confesión, aprovechando el más ligero desbalance para inclinarnos fuera del panorama espiritual pertinente, y alejarnos de nuestra meta en Cristo Jesús. Si recordamos el pasaje de Zacarías 2:18-21, sobre los cuernos y los carpinteros, nos daremos cuenta de la estrategia que sigue el querubín caído para hacer temblar y para derribar nuestra fortaleza en el Señor. Medítalo.
=== Nótese cómo al iniciarse el verso 13, el apóstol nos llena de seguridad espiritual al recordarnos como parte del programa divinal para salvación, plantando en nuestras memorias el aspecto de LA ELECCIÓN, señalando así el soberano accionar de la Deidad que deja fuera todo lo demás: logros, méritos, castas, preferencias o glorias personales, siendo todo por gracia; y puntualizando LA SANTIFICACIÓN POR EL ESPÍRITU Y LA FE EN LA VERDAD, a lo que todos fuéramos llamados para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo. A eso se agrega el imperativo: ESTAD FIRMES Y RETENED LA DOCTRINA QUE HABÉIS APRENDIDO, sea por palabra o por carta nuestra. Y es entonces que el mismo Señor Jesucristo, y Dios el Padre, quien nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia confortará nuestros corazones, confirmándonos en toda palabra y obra. Me encantan los apóstoles cuando nos llenan de santo y sano entendimiento acerca de nuestra salvación.
=== El apóstol no nos dejó una referencia misteriosa o un enigma indescifrable, sino que hizo una referencia exacta sobre el contenido de nuestra forma de pensar, de lo que nos ubica en el centro de nuestra realidad espiritual, describiéndola de un modo que no deje lugar a dudas. Así deben ser nuestras ministraciones, y así de sólida nuestra posición en el Señor.
EFRAÍN ARTURO CHAVEZ ESPARTA 05/08/2019 MENSAJE # 3226.
"Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestra manera de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca ... Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra. Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia, conforte vuestros corazones, y os confirme en toda palabra buena y obra".
=== Esta porción de la palabra de Dios es de importancia vital para fijar una posición madura respecto a lo que refiere el apóstol en los versos 1 y 2, es decir: "NUESTRA MANERA DE PENSAR". La solidez de nuestro fluir depende de nuestros principios y del grado de compromiso adquirido al solidificarlos e identificarnos con ellos, componiendo nuestro credo, nuestro firme cimiento, nuestra certeza y esperanza; el eje alrededor del cual girará toda nuestra carga operativa, confirmando con nuestros hechos los pensamientos y directivas que nos guiarán en el plano eternal. Un espíritu comprometido con la verdad evangelística y la certeza regia, no se dejará mover por las estrategias malignas, afirmando sus rostros para ir a Jerusalén por la ruta apostólica que ha llegado a ser nuestro norte. Los luchadores de sumo japonés, dentro de un círculo que les sirve como ring, buscan desequilibrar al contendor para arrojarlo fuera del tal, obteniendo así su victoria. De modo análogo, el diablo buscará sacarnos de la certeza de nuestra confesión, aprovechando el más ligero desbalance para inclinarnos fuera del panorama espiritual pertinente, y alejarnos de nuestra meta en Cristo Jesús. Si recordamos el pasaje de Zacarías 2:18-21, sobre los cuernos y los carpinteros, nos daremos cuenta de la estrategia que sigue el querubín caído para hacer temblar y para derribar nuestra fortaleza en el Señor. Medítalo.
=== Nótese cómo al iniciarse el verso 13, el apóstol nos llena de seguridad espiritual al recordarnos como parte del programa divinal para salvación, plantando en nuestras memorias el aspecto de LA ELECCIÓN, señalando así el soberano accionar de la Deidad que deja fuera todo lo demás: logros, méritos, castas, preferencias o glorias personales, siendo todo por gracia; y puntualizando LA SANTIFICACIÓN POR EL ESPÍRITU Y LA FE EN LA VERDAD, a lo que todos fuéramos llamados para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo. A eso se agrega el imperativo: ESTAD FIRMES Y RETENED LA DOCTRINA QUE HABÉIS APRENDIDO, sea por palabra o por carta nuestra. Y es entonces que el mismo Señor Jesucristo, y Dios el Padre, quien nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia confortará nuestros corazones, confirmándonos en toda palabra y obra. Me encantan los apóstoles cuando nos llenan de santo y sano entendimiento acerca de nuestra salvación.
=== El apóstol no nos dejó una referencia misteriosa o un enigma indescifrable, sino que hizo una referencia exacta sobre el contenido de nuestra forma de pensar, de lo que nos ubica en el centro de nuestra realidad espiritual, describiéndola de un modo que no deje lugar a dudas. Así deben ser nuestras ministraciones, y así de sólida nuestra posición en el Señor.
EFRAÍN ARTURO CHAVEZ ESPARTA 05/08/2019 MENSAJE # 3226.
LA IGLESIA EN GENERAL, Y CADA MIEMBRO EN PARTICULAR, HAN DE ESTAR DEBIDAMENTE CAPACITADOS PARA MANTENERSE FIRME Y SIN FLUCTUAR EN LA PROFESIÓN DE SU ESPERANZA.
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