viernes, 12 de abril de 2019

LA REUNIÓN CON JOSUÉ, ANTES DE SU PARTIDA A LA GLORIA, FUE ESENCIAL PARA DETERMINAR LA FIDELIDAD Y EL COMPROMISO DE TODA LA NACIÓN HEBREA. Y TODOS, EN ALGUNA OCASIÓN, NOS VEREMOS CONFRONTADOS SOBRE EL PARTICULAR.

LIMA - PERÚ    MARTES 02 DE ABRIL DEL 2019    MENSAJE # 3100

JOSUÉ 24:12-18, 22.

"Y os di la tierra por la cual nada trabajasteis, y las ciudades que no edificasteis, en las cuales moráis; y de las viñas y olivares que no plantasteis, coméis. Ahora, pues, temed a Yahweh, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Yahweh. Y si mal os parece servir a Yahweh, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Yahweh. Entonces el pueblo respondió y dijo: Nunca tal acontezca, que dejemos a Yahweh para servir a otros dioses; porque Yahweh nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre; el que ha hecho grandes señales, y nos ha guardado por todo el camino por donde hemos andado, y en todos los pueblos por entre los cuales pasamos. Y Yahweh arrojó de delante de nosotros a todos los pueblos, y al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, pues, también serviremos a Yahweh, porque él es nuestro Dios ... YJosué respondió al pueblo: Vosotros sois testigos contra vosotros mismos, de que habéis elegido a Yahweh para servirlo. Y ellos respondieron: Testigos somos".

=== Esta porción de la palabra es de gran solemnidad, para el caudillo y el pueblo hebreo, quienes habrían de sellar su compromiso con la Deidad en lo concerniente al plano relacional a futuro, constituyéndose en obradores fieles como representantes de la casta escogida por la Deidad, para poseer todo el territorio catalogado como la tierra prometida, y mantenerse del lado del Señor por sus generaciones. Los momentos más gloriosos en las vidas de los caudillos y de los mentores del pueblo hebreo es cuando éstos están a punto de partir, esto es de trasponer el velo, y quieren dejar un legado a la nación que guiaron en pos de la promesa, instándolos en una forma final a continuar su rol histórico-profético para que la voluntad divina en lo tocante a su propósito se ejecute, cubriendo su panorama generacional en el concierto de las edades, y proclamando la soberanía divina en su nivel más alto. Lo primero que hace el caudillo es magnificar la gracia divinal, la cual se expresa en el verso 12, proclamando a la divina providencia como la autora de los beneficios que disfrutarían al ingresar a la tierra prometida, viéndose saciados y cubiertos en todas sus necesidades: Sustento, abrigo, alimentación, etc.; en una dichosa participación corporativa que los hiciera verse como la familia de Dios, gozándose en los valores trascendentes de la promesa hecha a Abraham, Isaac y Jacob.


=== Por eso, el caudillo hace ciertas peticiones directas e ineludibles a sus elegidos: 

(1) Temer a Dios (esto es honrarle, respetarle, exaltarle y tenerle como preeminente); 

(2) Servirle con integridad y en verdad (esto apunta a la sinceridad y al apego por conservar los valores espirituales que revelen a otros la certidumbre de nuestra esperanza, manteniéndonos en línea con el panorama relacional correspondiente);

(3) La renuncia formal a la idolatría (esto por la forma en la que se había enquistado de modo tradicional el servicio abierto o sesgado que se hiciera a otros dioses; algo que referirá Esteban ante el Sanedrín allá en Hechos 7:39-43, recordando a Amós 5:25-27. ¡Josué sabía de lo que estaba hablando!).

Y aquí es donde viene la solemne amonestación a ELEGIR A QUIÉN SE VA A SERVIR;  si a los dioses egipcios, o a los dioses cananeos en cuya tierra habitaban; pero Josué y sus descendientes servirían a YAHWEH por todas sus generaciones. Esta reunión era para dirimir la posición, la condición y la proyección de la nación toda, demandando de ellos una respuesta conjunta, directa, concluyente y final, acerca de su fidelidad y su servicio para con  el Dios vivo; algo a lo cual el pueblo respondió con suma claridad en los versos 16 al 18 de nuestro estudio, confirmando que no abandonarían la adoración a Yahweh, que reconocían cada una de sus intervenciones a su favor, sus luchas, sus victorias, y su cuidado en llevarlos hasta el territorio que heredarían; refrendando su vocación y su servicio a la Deidad.


=== El corazón y la mente del caudillo, y de sus consiervos allí presentes, se llenó de gozo ante estas palabras; pero Josué fue más allá, y les recordó la naturaleza santa y justa de la Deidad, y de la pertinencia de sus demandas; así como de las dificultades e imposibilidades que podrían afectar la decisión de ese momento, debido a las clásicas falencias del pueblo hebreo en lo tocante a sus rebeliones y sus pecados, lo que podría provocar la ira del Dios santo, justo y bueno, y facultarlo para que los castigara por persistir en hacer lo malo o resistirlo. Y el pueblo ratificó sus dichos y sus compromisos, aduciendo que servirían a Yahweh con todas las fuerzas de su ser y con perfecta integridad. Es aquí donde Josué les conmina a percatarse de lo básico y fundamental de sus afirmaciones, del valor de sus compromisos, y de la lealtad que debía permanecer inalterable por sus generaciones, sirviendo dicho compromiso como un testimonio que obraría en contra suya si fuera desobedecido o alterado. Esta Escritura nos debe hablar al corazón, llevándonos a un análisis concienzudo sobre nuestra participación como hijos y siervos del Dios vivo.


EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA    02/04/2019   MENSAJE # 3100.

1 comentario:

  1. NUESTRA FIDELIDAD AL DIVINO ORDEN ESTABLECIDO HABRÁ DE SER REFRENDADA, CONFIRMADA Y REAFIRMADA VEZ TRAS VEZ, SEÑALANDO EL VALOR DE NUESTRO COMPROMISO. QUE TU FIDELIDAD AL PADRE SEA TAN AMPLIA COMO LOS DÍAS DE TU VIDA.

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