viernes, 17 de mayo de 2019

UNA PLENA CONVICCIÓN DE FE, ES IMPRESCINDIBLE PARA QUE LA VICTORIA Y EL TRIUNFO SEAN NUESTRO CONTINUO HOMENAJE A DIOS, ¡EL TODOPODEROSO SE LO MERECE!

LIMA - PERÚ   DOMINGO 28 DE ABRIL DEL 2019   MENSAJE # 3127

SALMO 118:5-14.

"Desde la angustia invoqué a Jah, y me respondió Jah, poniéndome en lugar espacioso. Yahweh está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Yahweh está entre los que me ayudan; por tanto yo veré mi deseo en los que me aborrecen. Mejor es confiar en Yahweh que confiar en el hombre. Mejor es confiar en Yahweh que confiar en príncipes. Todas las naciones me rodearon; mas en el nombre de Yahweh yo las destruiré. Me rodearon y me asediaron; mas en el nombre de Yahweh yo las destruiré. Me rodearon como abejas; se enardecieron como fuego de espinos, mas en el nombre de Yahweh yo las destruiré. Me empujaste con violencia para que cayese, pero me ayudó Yahweh. Mi fortaleza y mi cántico es Jah, y él me ha sido por salvación".


=== Los salmos son cánticos, poemas y acciones de gracias (con una descripción muy gráfica y breve al mismo tiempo) que marcan y definen una relación célico-pedestre entre Dios y sus ungidos, habiendo hecho de dos esferas una sola, en la que sus escogidos se hallan incursos, disfrutando de su favor, recibiendo sus bendiciones, y estableciendo su propósito según su deseo soberano, haciendo que su voluntad sea ejecutada en la manera más simple, o en una forma sobrenatural que sorprende a las mentes profanas, y asombra a los neófitos. Es preciso recordar que usted es un espíritu, tiene un alma, y habita en un cuerpo. Cuando su naturaleza tripartita está ubicada a su sazón (me refiero al hecho de que Dios lo ha ordenado todo en su fuero interno, y que usted ha entrado a una plena integración tripartita, en la que coincide con él en planes y propósitos, actuando de consuno en su beneplácito, esa bendita relación se hace tangible con resultados tridimensionales, algo de lo que usted y otros son plenamente conscientes por los resultados (Jn.10:37-38).


=== El salmista nos comunica su estado angustioso, y el cómo esa situación lo llevó a comunicarse con el Padre; hallando respuesta al crear el Padre un panorama de amplitud, saliendo del sufrimiento y la preocupación, y trasladándose a un lugar holgado en su conciencia, tornando a un estado de quietud, fortaleza y seguridad, estabilizando su ser integral, trayendo el esperado y solicitado sosiego para el alma, paz para el corazón, y una inusitada confianza para su espíritu, entrando en un reposo de singulares características. Esto creó una consciencia de estar bajo su cuidado, percibiendo aquel escudo de energía que lo rodeara, refrescando su corazón, y haciéndole esbozar una sonrisa de absoluta placidez y confianza. Esto es algo que solamente entiende aquel que lo recibe. Él no imagina nada, no alucina ni se engaña; él sabe, y sale de su inconsciencia e intrascendencia, pasando de la angustia a la quietud; de la zozobra a la calma; de la insuficiencia, a una estable plenitud que le hace vivir confiado en medio de la adversidad; tornando a un estado plácido que se nota al cambiar de actitud, y al conectarse con la celeste esfera que ya deja de ser intangible para el ungido (He.11:27).


=== Aquel terrible gigante de casi tres metros que saliera en la mañana y en la tarde a desafiar a las huestes del Señor (me refiero a Goliat frente al campamento israelita), se regocijaba al ver el temor de los hebreos frente a él como paladín filisteo; hasta que la respuesta llegó desde Belén con la forma de un pastor adolescente que traía una encomienda para sus hermanos, ungido hacía poquito por el profeta Samuel allá en la casa de Isaí, en una forma secreta como el futuro rey de Israel. Sí, es aquel que los cristianos llevamos dentro nuestro como un huésped ignorado a veces; y que se levanta airado frente a la amenaza y la insolencia del irreverente y profano filisteo, el cual había de morir lapidado por su blasfemia. El manto del temor, que el gigante pusiera sobre el ejército israelí, perdería su eficacia al verlo caer por el impacto de una pedrada en su frente, tras lo cual fuera decapitado por la espada que pasó a las manos de David, el ungido de Yahweh; el que estuviera exento de temor ante las amenazas del coloso filisteo, enfrentándolo con su consciencia pactual, persuadido del amparo divinal que nunca le fue esquivo ... ¿Estamos allí? Desde el verso 7 hasta el 14, hay una declaración de fe de la que debemos apropiarnos. ¡Hagámosla nuestra!



EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA    28/04/2019   MENSAJE # 3127

1 comentario:

  1. LOS MOMENTOS MÁS DIFÍCILES, LAS ETAPAS MÁS CRÍTICAS, Y LOS LANCES MÁS TERRIBLES; DEBEN SER ENFRENTADOS CON EL VALOR QUE NOS TRANSMITE EL SABER QUE ESTAMOS SIENDO PROTEGIDOS POR YAHWEH, Y QUE CONTAMOS CON UNA VICTORIA ANTICIPADA.

    ResponderEliminar