LIMA - PERÚ MARTES 19 DE MARZO DEL 2019 MENSAJE # 3087
SEGUNDA DE PEDRO 2:1-3. (VERSIÓN REINA VALERA CONTEMPORÁNEA)
"Yo, Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, envío un saludo a ustedes, que por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo han alcanzado una fe tan preciosa como la nuestra. Que la gracia y la paz les sea multiplicada por medio del conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús. Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia".
"Yo, Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, envío un saludo a ustedes, que por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo han alcanzado una fe tan preciosa como la nuestra. Que la gracia y la paz les sea multiplicada por medio del conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús. Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia".
=== Los siervos de Dios del siglo primero estaban plenamente conscientes de su posición como tales, y era norma que al identificarse lo hicieran como colaboradores de Dios en un servicio voluntario y definido para con él, entendiendo su mayordomía. A ello se agregaba su función eclesial y corporativa, que era el sello de su autoridad, y su función orgánica, implicando que eran portadores de un mensaje que debía ser comunicado a todo el cuerpo de Cristo, para asumir su rol como miembros de la familia de Dios, al compartir la fe en un sentido global y práctico que a todos afectara para la gloria de Dios. En el cuero no habían seres superiores o jerarquías; si no células que al integrarse componían un todo con igualdad de participaciones, beneficiándose como una entidad corporativa que representara a la Deidad en la pluralidad de la unidad. Aquella fe que le era común a todos debía participar activamente de todo lo que la Deidad aparejara para ellos. Al mencionar aquí LA JUSTICIA, se refería a la que por la gracia divina se nos había impartido, la cual era la causa de nuestra paz con Dios, y el gobierno del señorío de Cristo sobre nosotros lo cual nos hace mirar el futuro con esperanza, gozandonos anticipadamente de la gloria que vendrá. (Ro.5:1-2).
=== Aquí JESÚS es proclamado DIOS Y SALVADOR, haciendo notoria su naturaleza creativa y redentiva en su relación con nosotros. Lo primero, indica procedencia u origen; y lo segundo, plena restitución apuntando al plano eternal e inalterable de nuestro destino al lado de él. Si estamos atentos, el apóstol postula que esta fe ha sido alcanzada, llegando a un nivel que el Padre habría requerido de cada uno de sus santos para que corresponda a la sagrada herencia que él dispuso en su gracia para cada uno de nosotros, sin acepción de personas. Aquella gracia (toda la bondad divina a nuestra disposición), y la paz que nos fuera adjudicada (dándonos absoluta serenidad en nuestra peregrinación a la gloria, sabiendo que el Padre cumpliría cada una de sus promesas), son el sagrado revestimiento que otorga a los santos la dulce capacidad de entender y conocer lo que el padre y el Hijo componen para nosotros en la esfera célico-pedestre en la que caminamos, nos movemos y somos.
=== Y aquí es donde surge la visión que embarga, envuelve y convence a los renacidos sobre los valores eternales asignados, para que estemos conscientes de lo que hemos de desarrollar para captar y entender nuestro panorama trascendente. Y cuando Pedro diserta sobre LAS COSAS QUE PERTENECEN A LA VIDA Y LA PIEDAD que nos han sido impartidas, miramos en la pantalla la cantidad de micropixeles que deben llegar a saturar nuestra línea de entendimiento, entendemos que hay muchas cosas que debemos llegar a conocer plenamente; y no sólo en forma referencial, y que Oseas plantea así: "Venid ... a Yahweh ...Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará, y viviremos delante de él. Y conoceremos, y proseguiremos en conocer a Yahweh..." (6>1a-3a). Cuando nuestro espíritu es despertado, aquietado e introducido a la esfera que nos corresponde, entendemos que hay muchas cosas que aprender, entender y conocer, y que nuestra vida está ligada a los valores eternos, y es cuando dejamos lo pueril que nos interesamos por lo maduro y permanente, entendiendo que, mientras más lo conozcamos, mayor ser;a nuestro entendimiento y compromiso con él, haciendo de la gloria y la excelencia nuestra meta.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 19/03/2019 MENSA
JE # 3087.
SIEMPRE ES UN DELEITE PARA EL CORAZÓN RECIBIR LA CELESTE IMPARTICIÓN DE UN ILUMINADO APÓSTOL DE DIOS, Y ESTA ES MARAVILLOSA.
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