LA NATURALEZA DIVINA, LLENA DE BONDAD Y DE AMOR, PUEDE CAMBIAR FRENTE A LAS PROVOCACIONES DE LOS PERVERSOS, QUIENES PRETENDEN ESTANDARIZAR A DIOS, POLARIZARLO Y NINGUNEARLO. DESCUBRIRÁN QUE DIOS ES JUSTO ,,, Y SIN ANESTESIA.

LIMA - PERÚ   DOMINGO 10 DE MARZO DEL 2019   MENSAJE # 3078

NAHUM 1:1-3, 7-8.

"Profecía sobre Nínive. Libro de la visión de Nahum de Elcos. Yahweh es celoso y vengador; Yahweh es vengador y lleno de indignación; se venga de sus adversarios, y guarda enojo para sus enemigos. Yahweh es tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al culpable. Yahweh marcha en la tempestad y el torbellino, y las nubes son el polvo de sus pies... Yahweh es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían. Mas con inundación impetuosa consumirá a sus adversarios, y tinieblas perseguirán a sus enemigos".

=== Los siervos de Dios que fueran llamados al ministerio profético, normalmente estaban destinados a profetizar a Israel o a Judá, y en algunas ocasiones a otras naciones. Y así como Jonás fuera enviado a Nínive, para advertirles sobre el castigo que se cerniera sobre ellos, hallando perdón por medio del arrepentimiento cien años atrás; apesadumbrando al hijo de Amitai hasta la médula; quien se sintiera un traidor por haber sido el promotor de otros cien años de aflicción para Judá y sus vecinos, al no haber entendido la naturaleza compasiva del Dios vivo, quien no pensara como Jonás: que había ciento veinte mil personas para eliminar; mientras que para Yahweh habían ciento veinte mil personas por salvar ... y muchos animales. Los considerandos humanos difieren de uno a otro; mas la perspectiva divina sólo llega hasta nosotros por revelación, habiendo de entender si la medida es terapéutica, o es punitiva; de modo que interactuemos con él dentro de su proyección para las edades.

=== Y Yahweh, nuestro Dios, a quien conocemos como bueno, justo y magnánimo, nos muestra aquí una extraña faceta, desconocida por el plano extremo en que la revela, haciendo notorio su celo, y la justa vindicación, contra los que se habían comprometido con él para reintegrarse al plano pacífico y solidario que le cambiara al pueblo asirio esa naturaleza fiera, brutal, sádica, sanguinaria y perversa que lo caracterizara. y que los constituyera en un jurado enemigo de todos los que le rodearan. Pero las decisiones humanas, por más radicales que luzcan, pueden cambiar, y tornarse a lo que eran antes, y hasta algo peor. Y esto fue lo que pasó con ellos al arrepentirse de su arrepentimiento, levantándose profanamente contra el Dios de toda carne, procurando ver el otro lado del carácter divinal; ¡y no les gustaría lo que iban a ver! Y el Dios CELOSO (guardador de todo lo suyo para su gloria y honor) y VENGADOR ( La venganza divina busca la retribución cuando su bondad se ve burlada y rechazada, buscando su reivindicación). Con Dios no hay represalias, sino justa retribución, guardando la ley de la proporcinalidad/ Él nunca se sobrepasará o se excederá al disciplinar o castigar, haciendo juicio y justicia.

=== Él califica (v.2) a sus opositores como enemigos y adversarios, y su ira e indignación se manifiesta en contra de ellos. Y Nahum describe para nosotros este aspecto que es tan crucial e importante: Yahweh es tardo para la ira (su reacción  no es un acto súbito e irracional; sino una meditada y concreta manifestación de su naturaleza ofendida por la insolencia humana, la irreverencia y la profanidad de quienes pretenden mirar a Dios como miran a sus ídolos o a sus dioses, haciendo odiosas comparaciones entre la obra hecha por manos de hombres, y el Dios vivo y verdadero. Dios no hace jirones con su propia ley, y JAMÁS TIENE POR INOCENTE AL CULPABLE. Y cuando la maldad y la perversión de obras hace su aparición, Dios se apresura a tratar con ella, y la tempestad y el torbellino representan su ira y su enojo, así como las nubes son identificadas como el polvo de sus pies. Y si bien él es bueno... y conoce a los que son suyos, sabe utilizar una inundación impetuosa. El río Tigris se desbordó y se rompieron trescientos sesenta metros del muro que protegía a la capital asiria, siendo devastada por la furia del río, y entregando en bandeja a los caldeos y los medos la ciudad ninivita, despojando a los asirios a manos llenas. Esto no fue una casualidad, sino un acto divino para destruir a la nación perversa que quiso burlarse del Dios vivo, siendo arrasada hasta sus cimientos.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   10/03/2019   MENSAJE # 3078