martes, 24 de noviembre de 2015

EL LÍO CON LOS PLATEROS Y CON DEMETRIO PUDO HABER LLEGADO A MAYORES AL MEZCLAR SUS INTERESES PECUNIARIOS CON EL PLANO RELIGIOSO EFESINO. LA DESTREZA POLÍTICA, JURÍDICA, LEGAL Y RELIGIOSA DE UN ESCRIBANO ANÓNIMO (LUCAS NO NOS DA SU NOMBRE), LLEGÓ EN EL MOMENTO OPORTUNO PARA SALVAR LA INTEGRIDAD DE GAYO, ARISTARCO, ALEJANDRO Y PABLO, ALGO POR LO CUAL LA IGLESIA RECIBIÓ UN ALIVIO, Y PODEROSO CONSUELO.

LIMA - PERÚ  MARTES 24 DE NOVIEMBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 19:30-41.

"Y queriendo Pablo salir al pueblo, los discípulos no lo dejaron. También algunas de las autoridades de Asia, que eran sus amigos, le enviaron recado, rogándole que no se presentase en el teatro. Unos, pues, gritaban una cosa, y otros otra; porque la concurrencia estaba confusa, y los más no sabían por qué se habían reunido. Y sacaron de entre la multitud a Alejandro, empujándole los judíos. Entonces Alejandro, pedido silencio con la mano, quería hablar en su defensa ante el pueblo. Pero cuando le conocieron que era judío, todos a una gritaron casi por dos horas: ¡Grande es Diana de los efesios! Entonces el escribano, cuando había apaciguado a la multitud, dijo: Varones efesios, ¿y quién es el hombre que no sabe que la ciudad de los efesios es guardiana del templo de la gran diosa Diana, y de la imagen venida de Júpiter? Puesto que esto no puede contradecirse, es necesario que os apacigüéis, y que nada hagáis precipitadamente. Porque habéis traído a estos hombres, sin ser sacrílegos ni blasfemadores de nuestra diosa. Que si Demetrio y los artífices que trabajan con él tienen pleito contra alguno, audiendias se conceden, y procónsules hay; acúsense los unos a los otros. Y si demandáis alguna cosa; en legítima asamblea se puede decidir. Porque peligro hay de que seamos acusados de sedición por esto de hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este concurso. Y habiendo dicho esto, despidió la asamblea".

*** La naturaleza temperamental de Pablo hubo de ser disuadida por el sentido común de quienes lo rodeaban, impidiéndole salir al pueblo; y unos amigos, autoridades en Asia, le rogaron que no se presentara en el teatro. El caos era total, haciéndonos ver que la masa carece de percepción y sentido, dejándose llevar por la incertidumbre multitudinaria, o por el fluir de la corriente. La barra de Artemisa, no tenía otro eslogan que gritar, repitiendo sin cesar que "la diosa madre" era grande; hasta que la afonía le fue ganando el duelo a las bocas, y demandaba luz a sus cerebros, que no sabían qué contestarle a la razón. No sé si notan cómo esto se parece mucho a una democracia acéfala, que acepta el tumulto como razón, y la ola masiva como su fuerza opresiva, para conseguir...¿qué? Esa es la capacidad operativa del poder judío-masón para la conquista de la tierra, siguiendo la premisa de Macchiavello: "El fin justifica los medios".

*** Cuando vieron que el entusiasmo se apagaba, y que la razón podía abrirse paso en medio de la sin razón efesina; los astutos judíos manipuladores e intrigantes, empujaron a Alejandro, el cual intentó hablar a la multitud; pero cuando se percataron que era judío, le dieron un concierto de ciento veinte minutos del último hit parade efesino: "Grande es Diana de los efesios". Fue en ese interín que el escribano de la ciudad indagó entre los que sabían algo al respecto, y por orden, los nombres de los causantes de todo el griterío, y el formular una posible acusación contra los azuzadores en su momento.

*** Agotadas las voces del tumulto, el escribano (conocido por todos en la ciudad, e impío como ellos, y premunido de la autoridad conferida por su cargo), apacigüó a la multitud para dirigir su atención a lo que referiría a renglón seguido. Y hombre de conciertos como era, hace la pregunta de rigor, arguyendo que no hay quién ignore que Éfeso era guardiana del meteoro que había venido desde Júpiter (no podemos negar que la fantasía efesina guardaba cierta lógica aplicable a su mitología pagana). Así pues, Júpiter, el dios padre; envió a Diana, la diosa madre; para darle a Éfeso el privilegio de guardar ese tesoro relacional, que los hacía guardas de la diosa de la fertilidad; honor olímpico que nadie más poseía, y que hiciera a Éfeso la ciudad más singular en la provincia asiática. Me comunicaron que hasta hoy en el Olimpo no se sabe si Júpiter le dio carta de repudio a Diana; o si ese fue un viaje de placer con macabros planes; juzgue el lector del siglo XXI.

*** No habiendo lugar a contradicciones de ningún tipo al respecto, el escribano solicitó el total apaciguamiento de la "solemne asamblea", para que en la inefable quietud de la razón se viera el asunto en su exacta dimensión. Acto seguido, se refirió al abuso del derecho de aquellos ciudadanos judíos sobre quienes no pesaba cargo alguno de tipo religioso, ni penal, y que estaban injustamente detenidos, y que no debían ser maltratados, conforme a ley, apartándose la multitud de los tales. La diosa Diana no había sido blasfemada, ni se había cometido sacrilegio alguno contra ella; y esa no era la razón de la presencia de la multitud allí. La prudencia apostólica evitó una confrontación directa con la autoridad demoníaca representada por Diana Artemisa, alcanzando victoria sobre ella por el peso mismo de la palabra del reino, y sus manifestaciones de poder, evitando pérdidas innecesarias.


*** Siguiendo con su discurso el escribano, hizo más precisiones, con nombres propios y con los componentes de un gremio, que haciendo uso y abuso de la ingenuidad de la multitud, intentó mezclar sus asuntos particulares de orden pecuniario con el religioso devenir histórico de la ciudad guardiana de Éfeso. Los pleitos tenían un lugar donde dirimirse según la justicia y el orden instituido. Las audiencias son concedidas a los litigantes, y en legítima asamblea pueden proceder las acusaciones, ante la presencia del procónsul, como la autoridad provincial que el imperio delegara, señalando el consejo, la conciliación o el castigo que las causas merecieran. Las cosas habían de realizarse por la vía legal, y en las ubicaciones oportunas.


*** Haciendo uso de un sentido común privilegiado, el escribano puso en antecedentes a todos los allí reunidos, haciendo notorio que algo como eso podía ser interpretado como sedición por el imperio romano, atrayendo a las legiones que sabían cómo imponer la paz romana en sumarias incursiones. Tras su soberbia intervención jurídico-legal, el escribano ordenó el desbande general, despidiendo la asamblea. Espero que los lectores hayan notado cómo, progresivamente, la reciedumbre inicial del judaísmo recalcitrante, y de la maligna oposición, iban perdiendo sus roles protagónicos a nivel regional.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   24/11/2015

1 comentario:

  1. EL CONFLICTO CON DEMETRIO Y CON LOS ARTÍFICES PLATEROS DE ÉFESO, PUSO A PRUEBA AL MINISTERIO APOSTÓLICO, VIENDO CÓMO LA POTENCIA IDOLÁTRICA REGIONAL SE LEVANTABA CONTRA EL EVANGELIO DEL REINO, Y CONTRA TODO EL TRABAJO DE AMOR QUE SE HABÍA REALIZADO EN AQUELLA CIUDAD POR MÁS DE DOS AÑOS. AL FINAL, HUBO PAZ.

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