miércoles, 25 de noviembre de 2015

LAS REUNIONES DE CONFIRMACIÓN Y CONSOLIDACIÓN, SERVÍAN PARA FIJAR EN LOS CORAZONES DE LOS SANTOS LAS CONSIGNAS Y PRINCIPIOS A SEGUIR. CADA NUEVA ENSEÑANZA, CADA TIEMPO EN ESTAS CONVENCIONES APOSTÓLICAS, TRAÍAN NUEVAS RIQUEZAS ESPIRITUALES Y UNA MÁS AMPLIA VISIÓN DEL PANORAMA QUE ERA PROPIO A LAS LOCALIDADES, LAS CUALES, COMO VEMOS, HACÍAN SUS APORTES TAMBIÉN CON MINISTROS, ENGROSANDO EL NÚMERO DEL EQUIPO MINISTERIAL, Y HACIENDO MÁS VALIOSA SU LABOR COMO MINISTROS ITINERANTES.

LIMA - PERÚ  MIÉRCOLES 25 DE NOVIEMBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 20:1-7.

"Después que cesó el alboroto, llamó Pablo a los discípulos, y habiéndolos exhortado y abrazado, se despidió y salió para ir a Macedonia. Y después de recorrer aquellas regiones, y de exhortarles con abundancia de palabras, llegó a Grecia. Después de haber estado allí tres meses, y siéndole puestas asechanzas por los judíos para cuando se embarcase para Siria, tomó la decisión de volver por Macedonia. Y le acompañaron hasta Asia, Sópater de Berea, Aristarco y Segundo de Tesalónica, Gayo de Derbe, y Timoteo; y de Asia, Tíquico y Trófimo. Éstos, habiéndose adelantado, nos esperaron en Troas. Y nosotros, pasados los días de los panes sin levadura, navegamos de Filipos, y en cinco días nos reunimos con ellos en Troas, donde nos quedamos siete días. El primer día de la semana, reunidos los discípulos para partir el pan, Pablo les enseñaba, habiendo de salir al día siguiente; y alargó el discurso hasta la medianoche".

*** El tumulto de Éfeso fue una crisis muy dura para quienes acompañaban a Pablo. Su paternal abrazo a sus compañeros de milicia buscaba confortarlos en tal situación, haciéndoles percibir la tibia calidez del Padre para con él en todas sus vicisitudes. Ello dejó indelebles marcas en sus corazones, pero también les hizo experimentar el cuidado divinal en medio de todo. Cuando los riesgos pasan, surgen dentro del corazón de los cuitados dos cosas: O una sazón que los hace cuajarse en circunstancias críticas; o un trauma que los acobarda y anonada frente al costo ministerial de andar en medio de la oposición, surgiendo de ello el temple en los valientes; o el deseo de huir en quienes no lo son. Nuestro nivel de compromiso se evidenciará en ese trance.

*** Tal como fuera el sentir apostólico un tiempo atrás (Hch.19:21): Pablo se aprestó para ir a Macedonia. Ya en la región, se dedicó a su labor ministerial. Su fluir de consolidación y enseñanza por aquellos lares, se lo pasó exhortándoles siempre a mantener en alto su fidelidad en cada localidad, que era lo fundamental para la solvencia espiritual de las iglesias en general, y así, Pablo llegó a Grecia. Esos tres meses en Grecia, con el ritmo que él le imprimía a su fluir a nivel de las sinagogas y lugares de reunión; le ganó el enconamiento de los judíos, quienes le mostraron su odio poniéndole una emboscada para cuando intentara viajar por mar hacia Siria La religión judaica, como ya lo hemos descrito, no estaba libre del fanatismo religioso que asumiera la persecución y el asesinato aleve, no como un pecado; sino como un acto de justicia y vindicación que alegraría a sus correligionarios y a Dios. ¡También tenían sus ninjas!


*** En tales circunstancias, el apóstol decidió viajar por tierra hasta Macedonia, acompañándose de otros siete hermanos más, quienes se le juntaron para su protección; y los que se adelantaron a él, y le esperaron en Troas, donde estuvieron hasta la fiesta de los panes sin levadura, probablemente en una convención que sirviera de bendición a los santos durante su viaje de retorno. Después de la fiesta, viajaron los que estaban con Pablo (Lucas entre ellos), y llegaron a Troas como punto de encuentro. Dentro de esos momentos de agradable koinonía con la iglesia del sector, Pablo se dedicó a enseñarles la palabra, convirtiendo en vigilia aquella reunión, ya que el equipo ministerial había de salir al día siguiente, el apóstol alargó el discurso hasta la madianoche.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   25/11/2015.

1 comentario:

  1. LA TAREA DE PABLO, CONSOLIDANDO LAS IGLESIAS, Y LLENANDO DE CONOCIMIENTO LAS MISMAS EN LO TOCANTE A LA PALABRA, SIGNIFICARON PARA ÉL UNA GRAN CARGA. DE TODO ELLO, SURGIRÍA LA PALABRA QUE HOY MINISTRAMOS A NIVEL DE LAS IGLESIAS LOCALES, PROCURANDO LA AFIRMACIÓN DE LOS FUNDAMENTOS, Y CONFIRMANDO LOS PRINCIPIOS QUE ACTIVAN LAS MISMAS PARA LA GLORIA DE DIOS.

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