SIGUIENDO EL MÁS PURO ESTILO PROFÉTICO (AL IGUAL QUE MOISÉS Y SAMUEL EN SU MOMENTO), PABLO EXPONE SU LABOR, Y LA EFICACIA DE LA MISMA, A PESAR DE TODA LA OPOSICIÓN QUE HUBO DE ENFRENTAR (E INCLUIMOS AQUÍ DECEPCIONES, DÉFICITS, AFRENTAS Y TRAICIONES, Y DESERCIONES EN TIEMPOS CRÍTICOS) QUE NO LLEGARON A VENCER SU DETERMINACIÓN EN LO CONCERNIENTE A SU COMPROMISO CON LA DEIDAD. EL APÓSTOL HACE AQUÍ UNA APRETADA SÍNTESIS DE SU TRABAJO EN EL SEÑOR, Y DE SU FIDELIDAD INCUESTIONABLE COMO SIERVO DE DIOS.

LIMA - PERÚ  SÁBADO 28 DE NOVIEMBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 20:25-32.

"Y ahora, he aquí yo sé que ninguno de vosotros, entre quienes he pasado predicando el reino de Dios, verá más mi rostro. Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos; porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios. Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto como obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre. Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño, y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos. Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno. Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios, y a la palabra de su gracia, que tiene poder para sobreedificaros y daros herencia con todos los santificados".

*** Habiendo declarado firmemente que él no abandonaría su carrera ministerial, sino que la cumpliría a cabalidad; pasa a compartir la palabra profética acerca del sino eclesial para todos los presentes (como Moisés lo hiciera en Deuteronomio 31:24-32:47); revelándoles que es la última vez que lo verán, queriendo descargar su corazón plenamente para tener clara consciencia de que su obra en el Señor se cubrió totalmente, que hizo su parte como mensajero divino, y que si partiera, no lo haría con una conciencia culpable, más con un corazón contento y satisfecho, como debe presentarse un obrero del Señor ante él.

*** El tema básico del fluir apostólico fue: EL REINO DE DIOS. El mismo, fue entregado de modo fragmentario, y en la medida en la que Dios adelantaba la información al apóstol, éste la entregaba a la iglesia con el fervor y la determinación que le eran características. Y es por ello que les dice que está limpio de la sangre de todos (implicando su misión como centinela o atalaya de la iglesia de Dios; como lo fuera Ezequiel para con Israel). Así fue su labor y servicio a cada lugar donde llegara con su ministerio itinerante, anunciando TODO EL CONSEJO DE DIOS.

*** Ahora, Pablo delega las responsabilidades en una forma final a los elegidos por el Espíritu Santo, y ¡no por él! Él aduce que a partir de este momento les toca a ellos tomar la batuta, y asumir un responsable rol personal: "Mirad por vosotros", y ministerial "Y por todo el rebaño en que el ESPÍRITU SANTO OS HA PUESTO POR OBISPOS"; para gobernar o apacentar la grey de Dios (él es el propietario), la cual él ganara por su sacrificio cruento en la cruz (implica aquí el sentido claro de nuestra mayordomía como siervos de Dios, y no como propietarios).

*** Pablo les exhorta a meditar a que, después de su partida, muchas ambiciones escondidas saldrán, y se manifestarán con aviesos propósitos. La rapacidad no se esconderá, pues se sentirán libres sin la presencia de Pablo (que al presente los detenía), aduciendo la existencia de un vacío espiritual que necesita ser llenado por un liderazgo visible: y los Absalones y Adonías: los Joabes y Abiatares y Ahitofeles, se manifestarán, desenmascarando sus intenciones regias, y su anhelo de perpetuarse en el poder. Eso, en cuanto a los advenedizos; ¡pero no termina todo allí!, porque de entre ellos mismos se levantarían aquellos seudo ungidos (tan populares hoy como siempre), con perversas perspectivas que, como una corriente poderosa arrastrarían a los discípulos (obsérvese el nivel espiritual de los engañados); ¿adónde? ¡Tras de sí!

*** La vida ministerial apostólica, no estuvo a salvo de defecciones y traiciones de los más allegados, y a Pablo le tocó tolerar, soportar, amonestar, reprender y juzgar una serie de cosas que sería ocioso citar; siendo sus lágrimas las que puso Dios en su redoma para sobrellevar los serios déficits que hubieran derrumbado o demolido congregaciones, aprendiendo con mucho dolor la labor de intercesión de mosaico cuño.

*** El apóstol les hace saber que ya no contarán con él, y que el proceso de maduración ministerial había de manifestarse en plenitud entre ellos. Un confiado apóstol, entrega en las manos del Padre el destino eclesial, asegurando que la palabra de su gracia, largamente compartida entre ellos por él y el equipo que lo acompañara, para su crecimiento espiritual sostenido, y el alcance de su derecho hereditario, sería suficiente para llevarlos a buen puerto. ¡Cuán importante es la fidelidad a la doctrina escritural!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  28/11/2015