LIMA - PERÚ DOMINGO 01 DE NOVIEMBRE DEL 2015
COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS
Hechos 15:7-13.
"Y después de mucha discusión, Pedro se levantó y les dijo: Varones hermanos, vosotros sabéis cómo ya hace algún tiempo que Dios escogió que los gentiles oyesen por mi boca la palabra del evangelio y creyesen. Y Dios que conoce los corazones, les dio testimonio, dándoles el Espíritu Santo lo mismo que a nosotros; y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones. Ahora, pues, ¿por qué tentáis a Dios, poniendo sobre la cerviz de los discípulos un yugo que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido llevar? Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de igual modo que ellos. Entonces toda la multitud calló, y oyeron a Bernabé y a Pablo, que contaban cuán grandes señales y maravillas había hecho Dios por medio de ellos entre los gentiles. Y cuando ellos callaron, Jacobo respondió diciendo: Varones hermanos, oídme".
*** Lucas nos refiere que la discusión en aquella ocasión fue mucha; no considerando el asunto desde la perspectiva doctrinal de divino refrendo. Las ponencias no estaban documentadas en lo que el pueblo de Dios había experimentado en el contexto del divino obrar, y el desconocimiento de la gracia en su sentido funcional; haciendo que los que tenían ataduras en el sentido legal (o por decisiones rabínicas, o por suposiciones o inferencias de dudosa catadura, o de adiciones que Dios, definitivamente, no propone); se mantuvieran en una actitud beligerante e inamistosa; y aquel lugar que había servido para la edificación, exhortación y consolación de todos los santos; hubo de tomarse su tiempo para escuchar a todos los contenciosos, y analizar concienzudamente cada postulado sobre sus bases específicas; no habiendo lugar para absurdas especulaciones, o intrincadas hipótesis.
*** La naturaleza contenciosa típica del judaísmo a ultranza, engrendraba duras polémicas no asociadas al fluir eclesial en sí, PRETENDIENDO AÑADIR a la ministración evangélica todos los considerandos que son típicos de la justicia propia: LA CIRCUNCISIÓN EN LA CARNE, Y EL GUARDAR LA LEY, como premisas que implican que la gracia no es suficiente; a pesar de que todos ellos hubieron de aceptar la gracia divina para ser salvos; y es desde aquí que los apóstoles comenzarán a explicar el valor de la gracia que implica la salvación por la fe en Jesús, el Hijo de Dios, y Dios manifestado en carne.
*** A la sazón, Pedro, como un participante más de aquella reunión conciliar, habrá de señalar los hechos divinos como aquello que Dios aprueba, ejecuta y establece; y a quien nadie puede enmendarle la plana. Fue así que el apóstol, haciendo historia, refirió su elección para que los gentiles recibiesen la palabra, y la creyesen, y Dios, que conoce los corazones, dio testimonio, dándoles el Espíritu Santo como a ellos antes, no haciendo ditingos de ninguna clase PURIFICANDO POR LA FE SUS CORAZONES. Y sobre la base de lo expuesto, la idea farisaica aquí considerada equivalía a UNA TENTACIÓN A DIOS al imponer a los discípulos una carga que NI LOS PADRES NI LOS JUDÍOS HABÍAN PODIDO LLEVAR, acotando a continuación: "ANTES CREEMOS QUE POR LA GRACIA DEL SEÑOR JESÚS SEREMOS SALVOS, DE IGUAL MODO QUE ELLOS".
*** Un silencio sepulcral, cual silencio que otorga toda la razón a lo compartido, selló aquella declaración, y Pablo y Bernabé, cada uno en su turno, confirmaron plenamente lo dicho por el apóstol Pedro, contando todas las maravillas que Dios había hecho con ellos durante su jira por tierras extranjeras, corroborando todo lo antedicho como una verdad cuya radicalidad no podía ser discutida, revelando lo hecho por Dios entre los gentiles como un estándar celestial. Y Jacobo se incorporó, solicitando el uso de la palabra...algo que veremos mañana.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 01/11/2015
*** La naturaleza contenciosa típica del judaísmo a ultranza, engrendraba duras polémicas no asociadas al fluir eclesial en sí, PRETENDIENDO AÑADIR a la ministración evangélica todos los considerandos que son típicos de la justicia propia: LA CIRCUNCISIÓN EN LA CARNE, Y EL GUARDAR LA LEY, como premisas que implican que la gracia no es suficiente; a pesar de que todos ellos hubieron de aceptar la gracia divina para ser salvos; y es desde aquí que los apóstoles comenzarán a explicar el valor de la gracia que implica la salvación por la fe en Jesús, el Hijo de Dios, y Dios manifestado en carne.
*** A la sazón, Pedro, como un participante más de aquella reunión conciliar, habrá de señalar los hechos divinos como aquello que Dios aprueba, ejecuta y establece; y a quien nadie puede enmendarle la plana. Fue así que el apóstol, haciendo historia, refirió su elección para que los gentiles recibiesen la palabra, y la creyesen, y Dios, que conoce los corazones, dio testimonio, dándoles el Espíritu Santo como a ellos antes, no haciendo ditingos de ninguna clase PURIFICANDO POR LA FE SUS CORAZONES. Y sobre la base de lo expuesto, la idea farisaica aquí considerada equivalía a UNA TENTACIÓN A DIOS al imponer a los discípulos una carga que NI LOS PADRES NI LOS JUDÍOS HABÍAN PODIDO LLEVAR, acotando a continuación: "ANTES CREEMOS QUE POR LA GRACIA DEL SEÑOR JESÚS SEREMOS SALVOS, DE IGUAL MODO QUE ELLOS".
*** Un silencio sepulcral, cual silencio que otorga toda la razón a lo compartido, selló aquella declaración, y Pablo y Bernabé, cada uno en su turno, confirmaron plenamente lo dicho por el apóstol Pedro, contando todas las maravillas que Dios había hecho con ellos durante su jira por tierras extranjeras, corroborando todo lo antedicho como una verdad cuya radicalidad no podía ser discutida, revelando lo hecho por Dios entre los gentiles como un estándar celestial. Y Jacobo se incorporó, solicitando el uso de la palabra...algo que veremos mañana.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 01/11/2015
AQUELLOS QUE PRETENDÍAN ADICIONAR A LA GRACIA CIERTAS CARACTERÍSTICAS DEL JUDAÍSMO CONVENCIONAL, TUVIERON QUE SER CONVENCIDOS QUE ÉSTA OPERA SIN AYUDAS DE NINGÚN TIPO (ABRAHAM NO ESTABA CIRCUNDIDADO CUANDO FUE JUSTIFICADO POR GRACIA), Y NADA SE PUEDE AGREGAR AL VALOR ABSOLUTO DEL SACRIFICIO DE JESÚS EN LA CRUZ DEL CALVARIO, Y LA JUSTICIA QUE POR ELLO NOS ES IMPARTIDA.
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