LA CERTEZA DE LA INSTRUMENTALIDAD PAULINA ES REVELADA AQUÍ A LOS HERMANOS DE ACAYA CON LAS MÁS CONTUNDENTES AFIRMACIONES SOBRE EL LLAMAMIENTO, EL FLUIR, EL CONTACTO CON EL SEÑOR PARA SU COMISIÓN APOSTÓLICA, Y SUS FRUTOS EN AQUELLA REGIÓN PARA LA GLORIA DE DIOS.

LIMA - PERÚ  SÁBADO 16 DE MAYO DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA  DEL APÓSTOL PABLO A LOS CORINTIOS.

Primera de Corintios 9:1-2

"¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús, el Señor nuestro? ¿No sois vosotros mi obra en el Señor? Si para otros no soy apóstol, para vosotros ciertamente lo soy; porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor".

*** Cuando Pablo penetra en esta sección de su epístola a los Corintios, y antes de proponer escrituralmente los derechos que le asisten a un apóstol (enviado) del Señor, asume su defensa ante sus detractores de la zona de Acaya, haciendo cuatro interrogantes que hemos de considerar como vitales para entender todo llamamiento apostólico.

*** Cuando pregunta si es apóstol; no está negando su llamamiento ni su habilidad o dotación de orden divinal, sino confirmándola. Y desde la salutación con la que iniciara esta carta, hace hincapié en el hecho, mostrando la certeza de su llamamiento, y de estar libre de la esclavitud de su religión judaica en su plano ceremonial, y por estar plenamente identificado con el conocimiento de la verdad acerca de Jesús, nuestro Señor y Salvador. La libertad que él tenía en Cristo Jesús, nunca la comprometió ante nadie, ministrando la verdad escritural respecto al Salvador en todo tiempo (Gá.2:4-5).

*** Su testimonio (algo que Lucas menciona en tres oportunidades en el libro de los Hechos (9:1-6;22:6-16;26:12-18), es una firme declaración de cómo se le apareció el Señor, revelándose a él y comisionándolo para que fuera el apóstol a los gentiles, para que luego, obediente al Señorío de Jesús, hiciera la obra que se le había encomendado, de la que los Corintios serían una directa consecuencia, como lo referirá a continuación.

*** Cuando asegura que los Corintios son su obra en el Señor, no lo hace por ufanarse, sino con el afán de demostrar que su trabajo en el Señor no fue en vano, y que el resultado de su obrar en fe, produjo el rédito glorioso que todos podían apreciar; no pudiendo negar la certeza de su llamamiento, unción y equipamiento, cerrando las bocas de sus detractores, y trayendo confianza a los integrantes de aquella región que fueran consolidados en la fe por su ministerial fluir.

*** Aunque las dudas pudieran albergarse entre los hermanos que no conocían a Pablo como discípulo directo del Señor, o que no entendieran el obrar secreto del Señor en sus asignaciones y conforme a su soberanía, podían confirmar la verdad de su testimonio por la Palabra y el Poder que exhibiera el hombre de Tarso tras haber sido ungido para ello por el mismo Señor al ir rumbo a Damasco, en su activa y destructiva campaña contra los santos del Altísimo. Los hermanos Corintios no podían negar lo evidente, siendo la realidad de lo afirmado su continuidad en el panorama redentivo, la dádiva de las dotaciones, ministerios y operaciones que ellos habían gustado por la instrumentalidad de Pablo.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   16/05/2015