LIMA - PERÚ DOMINGO 19 DE MAYO DEL 2019 MENSAJE # 3148
MATEO 5:38-39, 43-45, 48.
"Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha. vuélvele también la otra ... Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced el bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos ... Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto".
=== Esta es una porción muy peculiar del Sermón del Monte, en la que los oyentes son llamados a identificarse con la Deidad en lo concerniente a su perfección en el área de brindar amor a todos de un modo indistinto; porque ello es una característica peculiar del Padre, componiendo parte de su testimonio relacional célico-pedestre. El amor parental, paternal, maternal, fraterno, matrimonial, etc.; abarcan un sentimiento que nos resulta natural, dado el parentesco consanguíneo, afín o político; pero el manifestar esa calidad de afecto a quienes nos son opuestos, nos rechazan, nos agreden, insultan o denigran, nos persiguen o quieren dañarnos; es una petición insólita, absurda y denigrante, la cual desechamos de plano, por carecer de arraigo en nuestras entrañas, en nuestras costumbres, y en nuestra línea de pensamiento. Y es que una ordenanza de este género es incompatible con lo que ya era una premisa prevaleciente en nuestras mentes, y ajena a la justicia retributiva de la llamada ley del talión: Ojo por ojo, y diente por diente; la cual facultaba al hombre a desquitarse; pero limitándose a un pago idéntico al daño inferido, no más; descargando su ira o su rencor en una forma proporcional. Las almas pequeñas, veían esto con aprobación, tanto para el amor propio, como para el familiar, conyugal o parental; mas omitían la grandiosidad del perdón, creador de un espacio para la compasión y la misericordia, que eran las características más relevantes y resaltantes de nuestro Dios y Redentor; una dimensión que nuestras almas heridas estaban lejos de alcanzar por no haber sido introducidas en ella oportunamente. Pero el reino precisa de su uso y presencia como una constante que permitiría la comunión entre Dios y sus seres creados, asumiendo el pasivo que crearan la decepción, el dolor y el total desencanto por la inconducta de los renuentes; siempre engreídos y sublimados en su pensar y su sentir, alucinándose por encima de la ley, e infalibles o perfectos en su fluir natural y carnal, fruto de su soberbia y su ignorancia en cuanto a su propia fragilidad.
=== La no resistencia al malo, NO ES EL CONSENTIR EN SUS ABUSOS, como si ello no ocurriera o no supusiera un daño para el justo en su fluir natural; si no el permitir que el Padre aplique su justicia mientras nos sometemos a sus tratativas; NO SIENDO COMO NUESTROS ENEMIGOS EN SU NATURALEZA, PENSAR Y OBRAR. Un día el Señor refirió: "Vosotros hacéis las obras de vuestro padre ... Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso y padre de mentira" (Jn.8:41, 44). Un carácter no tratado por la Deidad reaccionará del modo usual, como cualquier impío, demostrando así que no ha renovado su entendimiento, y que 'no está disponible para el Padre', y que puede estar conectado religiosamente, pero no espiritualmente; dejando que su pensar, hablar y obrar actúen sin considerar su condición de hijos de Dios, no permitiendo que el escultor o el orfebre concluyan su trabajo en él, dando un espectáculo deplorable, denigrante y decepcionante. Nuestro lenguaje y nuestra actitud han de ser modificados y reformados, y para ellos, nuestro corazón debe cambiar primero. No. no somos gente sin reacción, ni seres pétreos. Es Dios, y nuestra relación con él la que nos mueve para hacer lo que él hace. y aprender a fluir por emulación, comprobando los resultados de un amor sin fronteras. ante las ajenas provocaciones.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 19/05/2019 MENSAJE # 3148
"Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha. vuélvele también la otra ... Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced el bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos ... Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto".
=== Esta es una porción muy peculiar del Sermón del Monte, en la que los oyentes son llamados a identificarse con la Deidad en lo concerniente a su perfección en el área de brindar amor a todos de un modo indistinto; porque ello es una característica peculiar del Padre, componiendo parte de su testimonio relacional célico-pedestre. El amor parental, paternal, maternal, fraterno, matrimonial, etc.; abarcan un sentimiento que nos resulta natural, dado el parentesco consanguíneo, afín o político; pero el manifestar esa calidad de afecto a quienes nos son opuestos, nos rechazan, nos agreden, insultan o denigran, nos persiguen o quieren dañarnos; es una petición insólita, absurda y denigrante, la cual desechamos de plano, por carecer de arraigo en nuestras entrañas, en nuestras costumbres, y en nuestra línea de pensamiento. Y es que una ordenanza de este género es incompatible con lo que ya era una premisa prevaleciente en nuestras mentes, y ajena a la justicia retributiva de la llamada ley del talión: Ojo por ojo, y diente por diente; la cual facultaba al hombre a desquitarse; pero limitándose a un pago idéntico al daño inferido, no más; descargando su ira o su rencor en una forma proporcional. Las almas pequeñas, veían esto con aprobación, tanto para el amor propio, como para el familiar, conyugal o parental; mas omitían la grandiosidad del perdón, creador de un espacio para la compasión y la misericordia, que eran las características más relevantes y resaltantes de nuestro Dios y Redentor; una dimensión que nuestras almas heridas estaban lejos de alcanzar por no haber sido introducidas en ella oportunamente. Pero el reino precisa de su uso y presencia como una constante que permitiría la comunión entre Dios y sus seres creados, asumiendo el pasivo que crearan la decepción, el dolor y el total desencanto por la inconducta de los renuentes; siempre engreídos y sublimados en su pensar y su sentir, alucinándose por encima de la ley, e infalibles o perfectos en su fluir natural y carnal, fruto de su soberbia y su ignorancia en cuanto a su propia fragilidad.
=== La no resistencia al malo, NO ES EL CONSENTIR EN SUS ABUSOS, como si ello no ocurriera o no supusiera un daño para el justo en su fluir natural; si no el permitir que el Padre aplique su justicia mientras nos sometemos a sus tratativas; NO SIENDO COMO NUESTROS ENEMIGOS EN SU NATURALEZA, PENSAR Y OBRAR. Un día el Señor refirió: "Vosotros hacéis las obras de vuestro padre ... Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso y padre de mentira" (Jn.8:41, 44). Un carácter no tratado por la Deidad reaccionará del modo usual, como cualquier impío, demostrando así que no ha renovado su entendimiento, y que 'no está disponible para el Padre', y que puede estar conectado religiosamente, pero no espiritualmente; dejando que su pensar, hablar y obrar actúen sin considerar su condición de hijos de Dios, no permitiendo que el escultor o el orfebre concluyan su trabajo en él, dando un espectáculo deplorable, denigrante y decepcionante. Nuestro lenguaje y nuestra actitud han de ser modificados y reformados, y para ellos, nuestro corazón debe cambiar primero. No. no somos gente sin reacción, ni seres pétreos. Es Dios, y nuestra relación con él la que nos mueve para hacer lo que él hace. y aprender a fluir por emulación, comprobando los resultados de un amor sin fronteras. ante las ajenas provocaciones.
=== Cuando amamos a nuestros antagonistas, el diablo y sus demonios pierden su protagonismo en sus dominios particulares, y se quedan solos en el ring, a luchar contra nadie en la batalla. Y cuando la bendición de nuestros labios cae sobre sus víctimas (los seres humanos bajo su dominio), el mal se ve minimizado y avergonzado como esencia maligna; y así como la luz prevalece sobre la oscuridad, la bendición triunfa sobre la maldición. La naturaleza bondadosa de nuestro Padre domina sobre nuestras reacciones ante las ajenas provocaciones, las cuales no nos tocan por no estar dispuestos a las pugnas gratuitas o a las inducciones o presiones grupales; y sentimos las cálidas manos del Padre puestas sobre nuestros hombros y manifestando su grado de aceptación entre los que reconoce como hijos suyos; no sólo por sus decisiones de fe, sino por sus obras de amor fraternal que los identifica con quienes no se avergüenza de llamarlos hijos.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 19/05/2019 MENSAJE # 3148
ES IMPERATIVO ALCANZAR LOS EXTREMOS DEL DIVINO FLUIR, APRENDIENDO QUE EL AMOR CUBRE MULTITUD DE PECADOS, Y EL PRIMERO QUE DEBE DESAPARECER DE NOSOTROS ES LA DISCRIMINACIÓN, DE MODO QUE SU CAPACIDAD CUBRITIVA LO ABARQUE TODO, SIENDO SEMEJANTE AL AMOR DIVINO EN NUESTROS CORAZONES.
ResponderEliminar¡WOW! Tremenda enseñanza. Muchas gracias pastor Efraín.
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