sábado, 13 de julio de 2019

AL MOMENTO QUE SE EMIGRA DE EGIPTO, SE SUELEN TRAER COSAS Y GENTES EXTRAÑAS QUE, AL NO ESTAR CONTENIDOS EN EL PLANO DE LA PROMESA, PUEDEN CONTAMINAR, MANCHAR E IMPEDIR NUESTRA HERENCIA. HAY QUE DESHACERSE DE TODO LO QUE EL VIEJO HOMBRE LLEVA CONSIGO.

LIMA - PERÚ   VIERNES 14 DE JUNIO DEL 2019   MENSAJE # 3174

NÚMEROS 10:35- 11:6.

"cuando el arca se movía, Moisés decía: Levántate, oh Yahweh, y sean dispersados tus enemigos, y huyan de tu presencia los que te aborrecen. Y cuando ella se detenía, decía: Vuelve, oh Yahweh, a los millares de millares de Israel. Aconteció que el pueblo se quejó a oídos de Yahweh, y lo oyó Yahweh, y ardió su ira, y se encendió en ellos fuego de Yahweh, y consumió uno de los extremos del campamento. Entonces el pueblo clamó a Moisés. y Moisés oró a Yahweh, y el fuego se extinguió. Y llamó aquel lugar Tabera, porque el fuego de Yahweh se encendió en ellos. Y la gente extranjera que se mezcló con ellos tuvo un vivo deseo, y los hijos de Israel también volvieron a llorar y dijeron: ¡Quién nos diera a comer carne! Nos acordamos del pescado que comíamos en Egipto de balde, de los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos; y ahora nuestra alma se seca; pues nada sino este maná ven nuestros ojos".



=== La marcha por el desierto, implicaba el hecho de que hubiera una segura guianza hacia el lugar que compondría su herencia; y mientras que Moisés rogara a Hobab que les sirviera en esa área, prometiendo recompensarlo con todo aquello que Israel consiguiera tras la toma de posesión de su heredad; Dios suplía dicha necesidad con la columna de nube presente diurnamente, para darles frescor, sombra y aire acondicionado; y con la columna de fuego que les diera calor y protección durante la noche, revelando luego el cómo se mantenía el contacto con la Deidad, mediante la invocación mosaica para que el Espíritu divino se expandiera y ahuyentara a sus enemigos, cercándolos con su presencia y atemorizando a cualquier fuerza enemiga que buscara atacarlos e impedir su avance; y así hasta que el arca se detenía, y el caudillo solicitaba que el Señor los cubriera con su manto protector cuando acamparan. Mediante esta práctica, Moisés nos enseñaba la necesidad de mantener nuestro contacto con la Deidad como una realidad vigente, constante y tangible, para que el amparo y la comunión bicampamentaria fueran tan vivas que la nación judía se mantuviera consciente de su relación pactual; y el respeto y el honor para con el Padre permaneciera como una realidad ininterrumpida.



=== Recordemos que un grueso contingente de gente extranjera, que no entendiera el tipo de comunión que Dios tenía con el pueblo hebreo, y que probablemente vieran a Moisés como un gran mago o un 'favorito de los dioses', decidió contaminar a la raza hebraica planteándole sus quejas y reclamos, demandando una clase de alimentación que fuera más acorde con su dieta allá en la tierra de Mizraím. Y así Israel. haciendo eco de esas voces ajenas, SE QUEJÓ A OÍDOS DE YAHWEH, y pidió un menú a la carta, declarando que aborrecían el pan del cielo, y que querían carne. La inmediata reacción del Señor, fue la de incendiar un extremo del campamento (es de imaginarse que de esa ubicación proviniera la queja), mostrando su ira contra la irreverencia, y la naturaleza profana de tal reclamo. Ya la gracia divina había hecho provisión desde el cielo con una fuente de nutrición que asegurara su alimentación y su sustento; pero los fabricantes de ladrillos y ex-constructores, se mostraban ahora como exquisitos gourmets que desearan darle el gusto a sus paladares; y Dios les daría ese gusto por un mes entero, hasta que se asquearan de la carne de codorniz.


=== Pero Dios atendió lo primero, castigando la irreverencia; y haciendo caso al ruego de Moisés para apagar el incendio; enseñándoles de paso cómo debían comunicarse con él a través de su autoridad delegada. Una cosa es hacer una petición por todo lo alto; y otra muy diferente, el hacer un gimoteante reclamo que acusara a Dios de pésimo proveedor, y de mal sustentador; todo esto subyace  en sus reclamos, castigando Dios el espíritu con el que se hacían las quejas. El pueblo, pues, clamó a Moisés; y éste a Yahweh, hasta que el fuego se extinguió. Y Dios le puso a aquel ligar el nombre de Tabera (arder, incendio), para mantener el recuerdo vivo entre todos los peregrinos en cuanto a las tratativas con el Señor. La gente extranjera que se mezclara con ellos a la salida de Egipto, no conocía ni respetaba al Dios de Israel, ni poseía derechos igualitarios con ellos, ni tenía derechos a la tierra de promisión; ¿Qué hacían allí? Representaban todo aquello que era extraño a la promesa, y que fuera aquel peso extra que los mantuviera lejos de la provisión divina y que significara un lastre para el avance sustantivo del pueblo de Dios respecto a su herencia: "Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción" (1Co.15:50).



EFRAIN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA     14/06/2019    MENSAJE # 3174

1 comentario:

  1. EL ORDEN DIVINO HA DE PREVALECER, Y NUESTRO RESPETO Y HONRA PARA CON LA DEIDAD NUNCA DEBEN SER TENIDOS EN POCO, PORQUE SU DESEO SOBERANO ES DARNOS UNA HERENCIA, Y NO UN PASEO POR EL DESIERTO. MANTENGAMOS FIRME Y SIN FLUCTUAR LA PROFESIÓN DE NUESTRA ESPERANZA.

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