miércoles, 17 de julio de 2019

LAS REALIDADES NEOCREACIONALES HAN DE SER UNA CERTEZA EN LOS CORAZONES DE LOS SIERVOS UNGIDOS, Y NO UNA LUZ PARPADEANTE QUE FULGE EN NUESTRO CORAZÓN. ES PRECISO INCORPORARSE Y REACTIVAR NUESTRO FLUIR DIVINAL COMO SIERVOS DE DIOS.

LIMA - PERÚ   LUNES 17 DE JUNIO DEL 2019   MENSAJE # 3177

SEGUNDA DE TIMOTEO 1:6-11.

"Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según le poder de Dios, quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos, pero que ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y la inmortalidad por el evangelio, del cual yo fui constituido predicador, apóstol y maestro de los gentiles".


=== Timoteo, el apreciado colaborador de Pablo desde su tierna juventud, se halla pasando una profunda y tremenda crisis. Y esta carta postrera del apóstol va a él dirigida, trayendo a la memoria los albores de su llamado, y de su instrucción en la fe por parte de su abuela y su madre, buscando reubicar al aún joven ministro en su posición como varón de Dios, y en su glorioso llamamiento y ordenación. Y aunque la situación de Pablo, preso por su dedicación al ministerio, no era algo aleccionador para su discípulo, quien añadía a sus dilemas y temores la posibilidad de encontrarse en una situación semejante, mantenía su temor in crescendo; mientras que Pablo echaba tras sus espaldas su horno de aflicción, y confiaba en la gracia del Padre, e inducía a Timoteo a reflexionar sobre su elección, llamamiento y vocación, y la virtud de sus capacidades en el Señor, las cuales no incluían la timidez o el retroceso. Su dotación era una de las más gloriosas y estimadas en el campo de la fe, fungiendo como evangelista; y también le es recordado la imposición de manos para su ordenación, y el investimiento divino para una efectiva labor que nunca le fue esquiva. El esconderse y el temer no eran dables. El levantarse y confrontar lo que viniera, sí. No por lo que sintiera él, sino por la investidura (semejante al nombramiento sacerdotal y la unción correspondiente), que actuaran como resortes que impulsaran al elegido a cubrir su ministerio con la eficacia que correspondía al mismo.

=== Y de pronto, esa forma de pensar que lo detenía, fue atacada por tres frentes, y el poder de Dios sacó a relucir su filosa espada, y cortó las ataduras que desactivaran al joven predicador; y el amor, que lo hacía esforzarse por los demás, se irguió para aborrecer a su desidia; y el dominio propio, puso a Timoteo en posición de firmes, y enhiesto y dispuesto se puso la armadura de Dios, y se dispuso para la guerra. Fue allí que sintió o percibió que el manto oscuro de la vergüenza se deslizó de sus hombros y cayó al piso, y su dorada armadura de caballero de Dios despedía centelleantes luces que hicieron huir a los espíritus que lo asediaban y rodeaban por todos lados. Y un ¿qué hago aquí, escondido y cabizbajo? lo despertó súbitamente, y recordó que el teatro de la guerra, y la línea de batalla, estaban allá a la distancia, y se fue raudo y ansioso a luchar con las aflicciones, divisando de lejos al apóstol Pablo en su lucha contra principados y potestades, y un renovado cruzado se hizo presente para gritar: ¡Aquí, la legión!


=== Y el llamamiento santo, no conforme a nuestro obrar, sino según el propósito suyo, y la gracia impartida desde antes que los tiempos fueran forjados, se tornaron poderosos al conjuro de la presencia del Salvador, para impartirnos la vida espiritual y trascendente que deja a la muerte como elemento de desecho, mientras que percibe la presencia del género vital que no puede más morir, y que va dejando el campo de batalla lleno de enemigos fenecidos, pisoteados, derrotados y vencidos por la gloria de la vida nueva que el evangelio del reino nos comunicara con aquellas características neocreacionales que nos identificara en un sentido trifásico: 


(1) Como predicadores o heraldos de las realidades de los valores eternales; 

(2) Como enviados para comunicarlas con poder y gloria; 
(3) Como aquellos que aprendieron de Dios para enseñar también a otros quiénes eran, qué tenían, y qué podían lograr.

1 comentario:

  1. LA RESTAURACIÓN DE UN MINISTRO A SU PARTICIPACIÓN ESPIRITUAL PUEDE SER UNA LABOR HARTO DIFÍCIL, Y SE REQUERIRÁ MUCHO TINO PARA HACERLO, APRENDAMOS DE PABLO Y SUS PRECISIONES QUIRÚRGICAS.

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