EL VALOR ETERNAL DE DIOS MISMO, Y EL VALOR TRANSITORIO DE SUS RECURSOS, HASTA QUE SE ALCANCE LA PLENITUD POR ÉL REVELADA. NO TENGAMOS TEMOR, PORQUE LA DESAPARICIÓN DE ALGUIEN, IMPLICA QUE FUE INCLUIDO EN EL EDIFICIO DE DIOS PARA FUNCIONES ETERNALES (2CO.5:1).

LIMA - PERÚ  SÁBADO 20 DE JUNIO DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PABLO A LOS CORINTIOS

Primera de Corintios 13:8-10.

"El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará. Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos; mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará".

*** Al referirse Pablo al amor ágape, no señala algo que Dios tiene, o posee como un tesoro personal; sino a LO QUE DIOS ES. Si nuestro bendito Señor no fuera eterno, el amor tendría final. o pudiera inhibirse, acortarse o alargarse, o ser manejado al antojo personal de cada quien; pero no es esa su naturaleza. Dios es AMOR, no sólo tiene amor en él, sino que esa es su naturaleza. Dios es luz; no es que él tenga una linterna con la que se alumbra, sino que él mismo es LA LUZ, y es por eso que las tinieblas no prevalecen contra él.

*** Dado que las profecías, en su naturaleza trifásica (exhortación, edificación, consolación) son emanaciones del divino poder para sustentar la marcha del pueblo elegido hacia su tierra de promisión, haciendo viable el mismo, y conduciéndolos serena y seguramente a su heredad, tiene el efecto de lo temporal hasta la cobertura de su propósito. Esto me hace recordar las palabras del himno "Dulce Oración", cuando dice al final que al ver ya francas (abiertas) las puertas de Sion, se despide de la oración, que le sirviera como aya durante su peregrinación a la gloria. ¡me encanta ese himno precioso! Aprendamos a no menospreciar las profecías (1Ts.5:20).

*** Las lenguas, aquellas que edifican particularmente a quien las habla; como aquellas que al ser interpretadas equivalen al panorama profético pertinente; poseen también su valor en el ámbito de lo itinerante, rumbo a la gloria, sirviendo como señales informativas, reguladoras, etc. para los transeúntes. La objetividad divina no es la confusión, ni el aturdimiento; sino el afán de advertirnos que lo que pasó en Babel fue rebelión y desacuerdo con Dios en su plan y propósito, y que lo que él precisa de nosotros a nivel corporativo es que le prestemos atención y atendamos a sus directivas celosamente, haciendo su voluntad en todo (1Co.14:39-40).

*** La ciencia, solamente llegará hasta donde Dios quiera que lleguemos para entender que las cosas que él preparó, tengan su adecuado cumplimiento en base a su sazón profética, guardando los tiempos y las ocasiones pertinentes. Solemos decir que la ciencia avanza ¿hacia qué, hacia dónde, para qué? Hacia Dios, hacia su perspectiva y al cumplimiento de su propósito conociendo todo a plenitud (1Co.13:12).

*** El panorama profético, que nos afectara parcialmente, según la revelación progresiva del Padre, para que supiéramos las cosas que debíamos saber generacionalmente, nos ha ido conduciendo procesalmente, llevandonos de menos a más, manteniéndonos en el margen generacional correspondiente, y cautivándonos dentro de una línea convergente que nos conduce hasta la plenitud (Dt.29:29).

*** Así, pues, todo lo parcial llega a su término, habiendo servido a su generación hasta que lo profetizado alcanzó su cumplimiento, y la profecía, la ciencia, las lenguas y toda dotación espiritual serían útiles como punteros que señalan la realidad, haciendo mutis al haber alcanzado su propósito generacional: "...Así pues, este mi gozo está cumplido. Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe" (Jn.3:29c-30). El vaso es útil hasta que su contenido es vertido para el cubrimiento de un propósito; realizado el mismo...vase. ¡Toda la gloria es para Dios!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  20/06/2015