domingo, 4 de septiembre de 2016

ESTAS SON LAS PAUTAS POSTRERAS DEL CAPÍTULO 13, INDICÁNDONOS EL MODO EN QUE HEMOS DE MOVERNOS DENTRO DEL PANORAMA CORPORATIVO, Y EN NUESTRA RELACIÓN CON NUESTRO ENTORNO ECLESIÁSTICO Y SOCIAL, APLICANDO EL CONJUNTO DE VALORES QUE HEMOS APRENDIDO, PARA UTILIZARLOS DE MODO CONSTANTE, OBTENIENDO RESULTADOS ÓPTIMOS A NIVEL CORPORATIVO, Y ANTE LOS HOMBRES

LIMA - PERÚ   DOMINGO 04 DE SETIEMBRE DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE PABLO A LOS ROMANOS

Romanos 13:7-14.

"Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra. No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace daño al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor. Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias ni lascivias, no en contiendas y envidia, sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne".

*** Introducción.- Hemos sido enseñados por el apóstol a someternos voluntariamente a toda autoridad constituida, pues las que existen han sido por él establecidas para el mantenimiento del orden constitucional y para el logro de sus propósitos. La resistencia a la autoridad que opera según la voluntad divina nos acarreará condenación. La autoridad, como principio, es un recurso divino para que todo se avenga a la perspectiva que él planificara desde el inicio de todas las cosas, y es su regulación lo que hace que todo funcione según su parecer. El orden y las jerarquías, aunque puedan parecernos odiosas, mantienen todas las cosas funcionando según la voluntad de Dios. El desorden y la rebelión contra los principios instituidos por la Deidad, han de ser sofocados, pues el simple sentido común nos hace ver cuando todo se desordena, el caos aflora y todo va camino a la destrucción.

*** (Ro.13:7-8) Nuestras contribuciones al estado, al gobierno municipal, a nuestros maestros y a nuestros guías espirituales, son realidades que no podemos rehuir, y según nuestra relación con ellos, hemos de retribuir su labor según corresponda, ya que ello es lo que mantiene el balance social, económico, político y espiritual a todas luces conveniente para el común bienestar. El Dios vivo es enemigo de que nos endeudemos (y no hablamos aquí solamente de dinero, sino también del honor, el respeto, la obediencia, la lealtad, etc.), y hay una deuda que debe ser pagada diariamente, la del amor fraternal, dándonos a entender con ello que el honor y cariño filiales debe ser la norma en los que hemos sido integrados al plano corporativo eclesial, el social, el familiar, etc. El apóstol postula el plano relacional desde la perspectiva de la segunda tabla de la ley, donde las interrelaciones emergen desde la consciencia de formar parte de un todo integral en el que todos somos confortados mutuamente, edificándonos, exhortándonos y consolándonos; respetándonos, honrándonos e impulsándonos al amor y a las buenas obras. El amor al prójimo nos alejará de cualquier falla en esa área específica, manteniendo inalterable nuestra relación fraternal, gozándonos en el Señor, y con nuestros hermanos.

*** (Ro.13:9) Aquí, Pablo nos hace ver que el respeto a la unión matrimonial, a la vida y a la integridad, a la propiedad ajena; al honor que cada ciudadano se merezca para no verse cuestionado o condenado; el evitar la envidia por las posesiones ajenas; o cualquiera de estas cosas que puedan romper los vínculos del amor fraterno son abrigadas o sintetizadas por guardar el amor al prójimo. Y así como el amor al Padre nos libra de toda idolatría; del mismo modo el amor al prójimo nos hará omitir cualquier forma de pecado contra nuestra interrelación como santos e hijos de Dios.

*** (Ro.13:10-11) Al llenar nuestros corazones con el amor a Dios, y el amor fraternal, nuestro intento se revestirá con el vínculo perfecto, armonizando en principios y prácticas, dando gloria a Dios en nuestra confesión y en nuestro andar. Cuando se llega a esta etapa de madurez espiritual, nos despertamos del letargo religioso que nos mantenía amodorrados en sólo irla pasando, convirtiéndose nuestra marcha en un paso vivo, en virtud santificante, en continuidad sin pausa, entendiendo que nuestra salvación no era un recuerdo histórico, sino un avance a la gloria que no conoce de resignaciones, viendo sus corazones espoleados por un sentido de urgencia que nos lleva a avivar el fuego del don de Dios que está en nosotros. ¡Despierten vírgenes dormidas! ¡He aquí viene el Esposo!

*** (Ro.13:12) Al declarar que la noche está avanzada, recibimos un aviso madrugador que nos pone en alerta por el nuevo amanecer, porque cada día  nuevo nos acerca a la cita con el Señor, a sacudirnos del sueño anestésico que el enemigo suele poner en las tradiciones religiosas, y nuestro apego por la distracción, que no rima con nuestra condición de centinelas, permaneciendo alertas, y disponiéndonos para la lucha diaria llenándonos de la luz gloriosa del pronto retorno de nuestro Señor y Dios.

*** (Ro.13:13) La naturaleza relapsa de los prevaricadores, de los que tienen amortecidas sus esperanzas, los lleva a participar de las obras infructuosas de las tinieblas, del amortecimiento que nos torna vulnerables, flojos y "blandengues", siendo fácil presa para un enemigo siempre acechador. La honestidad (con nosotros mismos, con los demás) debe ser nuestra consigna. Los que han dejado de ser prisioneros de esperanza, suelen relajarse, y la buena mesa (glotonerías) y el alcoholismo, vuelven a cerrar sus fauces sobre los relapsos; y las bajas pasiones los retornan a sus antiguas prácticas, casi inconscientes de su propia maldad.

*** (Ro.13:14) Vestirse del Señor Jesucristo, es ceñirse la armadura de Dios con todos sus implementos; defendiéndonos del ataque alevoso del enemigo de afuera,  y encerrando al que desde adentro pugnara por salir con su antigua hediondez. La naturaleza adámica percibe el peso de la armadura que la ciñe y la anula, y cada una de las partes que componen la panoplia, debidamente aceitada y limpiada, ponen en nuestro ánimo nuestra consciencia guerrera, y así como el caballo se encabrita, escarba la tierra y bufa su cálido aliento; así, con la espada en la mano golpeamos nuestros escudos anhelando el combate...y la carne quejumbrosa dice: ¡Ya se le salió el guerrero a éste!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  04/09/2016.

1 comentario:

  1. LA ENSEÑANZA PAULINA ES INTEGRAL, Y EL SENTIDO PRÁCTICO DE MOVERSE EN AUTORIDAD, YA SEA COMO QUIEN LA INTEPRETA Y REPRESENTA, O COMO AQUEL QUE LA ACATA DÓCILMENTE, NOS HA SIDO IMPARTIDA PARA NUESTRA AMONESTACIÓN Y PARA SU APLICACIÓN SEGÚN LO REVELADO, SEAMOS OBEDIENTES A LA AUTORIDAD QUE DIOS HA PUESTO DONDEQUIERA QUE ESTEMOS. ESA ES LA INSTANCIA. ESO NOS CONVIENE.

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