miércoles, 14 de octubre de 2015

LOS ROLES PROTAGÓNICOS PODÍAN CAMBIAR DE UN INSTRUMENTO A OTRO; EL MENSAJE, NO. LOS HERMANOS QUE FUERON ESPARCIDOS, NO CONSIDERARON SU SALIDA DE JERUSALÉN COMO UNA HUIDA, SINO COMO UNA INSTANCIA A CUMPLIR LA GRAN COMISIÓN. NUESTRA ACTITUD, FRENTE A LAS COSAS QUE NOS ACONTECEN; O NOS IMPARTEN TEMOR, O NOS LLENAN DE ALIENTO PARA HACER NUESTRA PARTE COMO PREDICADORES DEL EVANGELIO DEL REINO.

LIMA - PERÚ  MIÉRCOLES 14 DE OCTUBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 11:19-24.

"Ahora bien, los que habían sido esparcidos a causa de la persecución que hubo con motivo de Esteban, pasaron hasta Fenicia, Chipre y Antioquía, no hablando a nadie la palabra, sino sólo a los judíos. Pero había entre ellos unos varones de Chipre y de Cirene, los cuales, cuando entraron en Antioquía, hablaron también a los griegos, anunciando el evangelio del Señor Jesús. Y la mano del Señor estaba con ellos, y gran número creyó y se convirtieron al Señor. Llegó la noticia de estas cosas a oídos de la iglesia que estaba en Jerusalén; y enviaron a Bernabé que fuese hasta Antioquía. Éste, cuando llegó, y vio la gracia de Dios, se regocijó, y exhortó a todos a que con propósito de corazón permaneciesen fieles al Señor. Porque era varón bueno, y lleno del Espíritu Santo y de fe. Y una gran multitud fue agregada al Señor".

*** Ahora, el protagonismo retorna al tema de la persecución que hubo por lo del diácono Esteban, y aquellos de los hermanos que fueran esparcidos (devolviéndonos al capítulo 8) buscaron refugio en otros países colindantes: Fenicia, Siria y la isla de Chipre; y por donde pasaban, anunciaban el evangelio; aunque se cuidaban de hacerlo solamente a los judíos dispersos, en sus sinagogas, probablemente. Sin embargo, algunos hermanos anónimos, chipriotas y cireneos, al entrar en Antioquía, osaron hablar del evangelio a los griegos, es decir, a los no judíos. 

*** Dicha gestión no fue un desliz aventurero, sino la dirección divina impulsando al grupo de hermanos para compartir su fe entre los no judíos; y sería el eco de aquella gestión el ver las conversiones masivas entre los gentiles, las cuales llamarían poderosamente la atención de los hermanos y de los apóstoles en Jerusalén, viéndose consternados y sorprendidos por la noticia. 

*** Ya lo hemos dicho, el protagonismo fue pasando, de un ministro apostólico, a otro de ayudas; y luego, a otro diácono con el don evangelístico; luego a Saulo, luego a Pedro; y ahora a un grupo de hermanos anónimos; pero sensibles al fluir del Espíritu Santo; que comenzaran a romper los esquemas, encontrándose que Abraham tenía más hijos de fe por todas partes. El Señor fue abriendo las puertas por todos lados. Más adelante, el Señor le dirá a Pablo: "No temas. sino habla, y no calles; porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, PORQUE YO TENGO MUCHO PUEBLO EN ESTA CIUDAD" (Hch.18:9-10).

*** Cuando tal información llegó hasta la iglesia jerosolimitana, ellos enviaron al siguiente protagonista hasta Antioquía, es decir, a Bernabé, para que supervisara allá lo acontecido, y les llevara un informe fidedigno sobre lo que Dios estaba haciendo sin su directa intervención, para confirmar lo actuado, y asumirlo como LO QUE HA HECHO DIOS ¡Te adoro, Papá!

*** La llegada del apóstol Bernabé (aunque le duela a muchos, lo era, según Hch.14:4), le imprimía a lo actuado el sello de aprobación apostólica. ¿Qué hizo Bernabé?: "Cuando llegó, Y VIO LA GRACIA DE DIOS, SE REGOCIJÓ...". El corazón de Bernabé poseía la peculiaridad de fluir con el sentir del Espíritu Santo. Él no era un judío fanático; ni tampoco un observador indiferente, sino un sensible hombre de Dios que intuyera la mano del Señor, del divino fluir que todo lo tiñera con su amor y misericordia, pintándolo todo con el rojo carmesí de su gracia, llenando el corazón de los que le sirven como ministros de una gratitud, un gozo exultante y una satisfacción que sumergía al siervo de Dios en una felicidad ilimitada, que la imaginación no alcanzara a comprender. 

*** La explosión del gozo, que lo asombrara de inicio, y lo hiciera contemplar silencioso y solemne la obra divina, se desbordó en una exhortación que conminara a todos a la permanencia en la fe, y al crecimiento espiritual sustantivo que los llevara a la herencia. Y Lucas, el romántico médico amado, describe a Bernabé como UN VARÓN BUENO, Y LLENO DEL ESPÍRITU SANTO Y DE FE. Tales características, hacían de Bernabé alguien que podía mostrar el divino amor sin egoísmos; el abrigarlos a todos sin distingos patrios o étnicos, viendo en esta nueva hornada de creyentes la gloria de Dios magnificada más allá de las fronteras israelitas; presintiendo a la par que la gloria de Dios crecería todavía más a futuro. "Y una gran multitud fue agregada al Señor". Que esta última mención se convierta en una constante en nuestras experiencias es mi oración.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   14/10/2015

1 comentario:

  1. LUCAS HIZO BIEN AL DENOMINAR ESTE TEXTO LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES; PORQUE DE ALGUNA MANERA CADA UNO DE LOS QUE CIRCUNSTANCIALMENTE DIVULGARA EL EVANGELIO POR DONDE FUERAN, FUNGÍAN COMO ENVIADOS DEL SEÑOR; OFICIALES LOS DOCE PRIMEROS; Y CIRCUNSTANCIALES LOS OTROS, PORTANDO IDÉNTICAMENTE EL MISMO MENSAJE EVANGELÍSTICO.

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