LOS BENDITOS RESULTADOS DE LA JUSTIFICACIÓN, SON AQUÍ ENUMERADOS; Y VEMOS CÓMO EN ESTE PROCESO FUIMOS AFECTADOS DE PRINCIPIO A FIN PARA QUE PODAMOS IDENTIFICARNOS CON NUESTRO SEÑOR Y DIOS, Y QUE LA COMUNIÓN CON ÉL SE PUDIERA MENTENER DURANTE EL TRÁMITE DE NUESTRA PEREGRINACIÓN A LA GLORIA.

LIMA - PERÚ  DOMINGO 17 DE JULIO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE PABLO A LOS ROMANOS

Romanos 5:1-5.

"Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíriutu Santo que nos fue dado".

*** (Ro.5:1) La realidad objetiva de la resurrección ha de transformarse en la subjetiva confianza que nos permite con el Señor una espiritual asociación, un sentido claro de filiación, y una vital consciencia del Señorío de Jesús actuando para el alcance de una plena santificación para la herencia pertinente. Por eso, Pablo inicia esta porción con el apelativo de "JUSTIFICADOS, pues, por la fe", refiriéndose a nuestra condición y posición delante de Dios como el estándar que se nos solicitara para tener acceso a su presencia, la que definimos aquí como PLENA CONSCIENCIA DEL HECHO DIVINO OBRANDO EN NOSOTROS; siendo la fe que se nos impartiera el testigo fiel que certifica el hecho en sí. Cuando la consciencia de nuestra posición ante Dios se esfuma en el ambiente, el diablo nos mantiene en jaque, haciéndonos sentir indignos con culpas imaginarias o reales, o conciencias de impureza que imposibilitan el contacto; y el tiempo que dure esa lucha interior en nuestras mentes, será por él aprovechado para disuadirnos de nuestro intento, o cortar nuestro positivo fluir para Dios. Sin esta consciencia de justicia adjudicada por el Padre, las puertas del etéreo seguirán cerradas ante nosotros. Es imperativa una CONSCIENCIA DE JUSTIFICACIÓN EN DIOS POR LA FE  para el acceso a la celeste esfera, y la comunión célico-pedestre que opere para el contacto oportuno.

*** (Ro.5:2) La misma FE QUE NOS JUSTIFICÓ, es la que nos abre las puertas a esta GRACIA en la que nos afirmamos (recordemos que es por fe y para fe), y que es dentro de la misma que nos gloriamos o ufanamos de la gloria de Dios como una realidad tangible para nuestras tripartitas esencias. La plena consciencia equivale a la realidad existencial y vigente en la que los santos caminan: "Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos" (Hch.17:28a). Esta fe esencial que comunica la esperanza viva es el punto de contacto célico-pedestre en el que somos llamados a vivir como personas de dos campamentos (del cielo y de la tierra). Mantenga este pensamiento en su mente como una certeza de su filiación, e interactúe con el Espíritu para hacer su peregrinación a la gloria un viaje en primera clase. Los celestes fulgores que alumbran nuestro periplo espiritual, nos permiten saber que vamos avanzando "de gloria en gloria" (2Co.3:18).

*** (Ro.5:3) Pablo, como nuestro Cicerone espiritual, sigue llamando nuestra atención a todos nuestros valores en la esfera neocreacional, y nos muestra cómo es que habremos de asumir los mismos, enseñándonos que el duro trato que experimentaremos en nuestro entrenamiento es para adquirir el temple oportuno para sostenernos en este avance a la gloria, y que todas las inclemencias e incomodidades que nos toque soportar, nos capacitarán para el aguante o resistencia que nos tornarán operativos en aquello que nos vendrá, hallándonos "curtidos para el caso". Cuando se nos dice que la paciencia es producida por la tribulación, esto implica un grado de aflicciones sorprendentes, como las del hierro convirtiéndose en acero, y el proceso por el que los siervos, se constituyen en amigos; los amigos, en discípulos; y éstos, en hijos de Dios certificados. No siempre es el diablo quien nos quiere impedir en el avance espiritual; muchas veces nuestra cobardía nos basta para arredrarnos hasta el extremo de la incredulidad que nos arrebata la herencia, haciendo un giro de 180 grados, devolviéndonos a donde estábamos antes (2Ti.1:7a).

*** (Ro.5:4-5) Este verso es para los que continuaron en  la brega, y envueltos en ella, se han visto fortalecidos más allá de lo que se imaginaban; y es aquí donde la ingeniería llega con su "control de calidad", y la prueba de lo que se ha hecho en nosotros resulta en aprobación ante quien nos pareciera un descastado enemigo, aunque el mismo no luciera como tal, dejándonos un OK dentro de un círculo...¿serán las iniciales de su nombre y apellido para que no lo olvide nuestro corazón? Entonces, desde lo alto, un haz de luz verde nos envuelve, y nos lleva en aquella banda continua donde vemos a otros semejantes a nosotros que nos saludan y sonríen, y hasta nos aplauden y hacen barra cuando pasamos junto a ellos ¿Quiénes son estos personajes vestidos de verde también...¡Triunfadores, como nosotros, sólo que nos anticiparon! Y es aquí donde comprendemos por qué esa "masa líquida", que se hiciera uno con nosotros; y nos impregnara hasta transfundirnos haciéndonos partícipes de cosas que eran extrañas a nuestra esfera anterior, pero que nos llenaban de dicha interior con un gozo desconocido de etérea esencia; nos hiciera sentirnos afines con aquellos "marcianos" que parecían gozarse en nuestra compañía. Más tarde me enteré que ese atuendo verde se llamaba ESPERANZA; y que el proceso que nos convirtiera en sujetos verde-esmeralda era el deleitoso compartir del Señor su Espíritu con nosotros... ¡Y yo que pensaba que estaba en el mundo de los Linternas Verdes! ¡Cuántos misterios resueltos!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   17/07/2016