ENTRE LO DEMOCRÁTICO Y LO TEOCRÁTICO HAY ENORMES DIFERENCIAS. EN EL SENTIDO CRISTIANO, EL QUE PONE LAS REGLAS ES EL MISMO SEÑOR, Y AUNQUE SINTAMOS QUE TAL O CUAL PERSONA ES LA IDÓNEA PARA UN CARGO ESPECÍFICO, ES DIOS QUIEN ELIGE Y PONE: "Y A UNOS PUSO DIOS EN LA IGLESIA" (1CO.12:28); ¡RESPETEMOS ESO!

LIMA - PERÚ  JUEVES 30 DE JULIO DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 1:24-26.

"Y orando, dijeron: Tú, Señor, que conoces los corazones de todos, muestra cuál de estos dos has elegido, para que tome la parte de este ministerio y apostolado, de que cayó Judas por transgresión, para irse a su propio lugar. Y les echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías; y fue contado con los once apóstoles".

*** Tras el reconocimiento de la grey allí reunida de los dos postores que podían ser candidatos a la divina elección, se dejó esta en las manos del Señor. Esto no fue un acto democrático, porque los hermanos no eligieron al ganador de una pugna política o religiosa; sino que entendieron que los hermanos seleccionados para ocupar un lugar en el apostolado, eran los únicos que se hallaban dentro de la requisitoria ministerial oportuna (nótese que este mismo procedimiento será seguido en el nombramiento de los diáconos en el capítulo 6:1-6); luego, se dejó la elección en las manos de Dios.

*** La oración apostólica y eclesial fue el abandonarse a la voluntad divinal, dado que la Deidad era la única entidad capaz de discernir lo que había en los corazones de todos, y suyo era el derecho para elegir o descartar la proposición de la congregación (de paso que servía para corroborar que lo que se hacía se ejecutaba en su nombre y según su parecer. aunque no lo entiendan así muchos). La participación del candidato elegido tenía dos funciones básicas, según lo que aquí refería Pedro: 1) Un ministerio; 2) Un apostolado. Lo primero, se refiere al servicio de los santos a nivel locatario, de inicio; y lo segundo, a la actividad itinerante para la que Dios lo destinara hacia otras latitudes. Así, pues, nuestra fidelidad a nivel local será testigo fiel de nuestro servicio útil al pueblo de Dios; y ello hará que nos sean entregadas otras órdenes de índole mayor: "...Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré..." (Mt.25:21).

*** El ministerio apostólico en el que Judas fuera incluido, fue perdido por transgresión; y así como Lucero fuera desechado como el dirigente y regente espiritual de la creación primigenia; así también Judas, fue desechado de su posición, y otro tomó su corona (Is.14:12; 2Jn.8; Ap.3:11). Cuando Pedro arguye que Judas se fue a su propio lugar, resalta el hecho de que cada quien elige su destino eternal; y cuando decides darte a la maldad, y abandonas tu llamamiento y desechas tu elección voluntariamente, has definido tu suerte y tu sino. La de Judas fue la eterna condenación; la de Matías y José; la posibilidad de una asignatura a la que su fidelidad apuntara. ¿A qué le apuntamos?

*** Al echarle suertes al estilo judaico antiguo, esta cayó sobre Matías, quien a partir de entonces fue incluido entre la docena apostólica que el Señor estableciera para su labor, habiendo de manifestar el evangelio del reino. "Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor, PORQUE ME TUVO POR FIEL, PONIÉNDOME EN EL MINISTERIO" (1Ti.1:12). Si nuestra fidelidad no es premiada aquí, no te dé cuidado, lo será en la gloria, y como un hecho trascendente, y no meramente histórico. Paz a ti, elegido del Señor.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  30/07/2015