LIMA - PERÚ VIERNES 03 DE JULIO DEL 2015
COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PABLO A LOS CORINTIOS.
Primera de Corintios 15:1-2.
"Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano".
*** Pablo penetra aquí al aspecto histórico-profético (inicial y escatológico) de aquellos que han sido introducidos en una vida genérica trascendente, y que son directamente responables ante la Deidad sobre la vigencia de la misma en sus corazones, sus ministraciones, y su herencia para las nuevas generaciones.
*** Cuando Pablo hace una apretada síntesis sobre todo lo dicho, es porque quiere estar seguro de que se han sentado bien las bases para afirmar lo que viene a continuación. Observemos esta declaración de importancia vital para los creyentes neogeneracionales:
(I) "El evangelio que os he predicado", aquí Pablo refiere el aspecto histórico del panorama relacional del pueblo corintio con la Deidad, por la anunciación de las buenas nuevas entre ellos tiempo atrás.
(II) "El cual también recibisteis", implicando que no solamente se escucharon las declaraciones inspiradas por Dios, sino que también fueron recepcionadas y asimiladas, para componer la estructura orgánica que imparte vida y sustancia a los que creen al mensaje del cielo.
(III) "En el cual también perseveráis", esta es una prioridad que jamás puede ser soslayada por ningún creyente, pues se refiere a la solidez del compromiso y su vigencia. La relación con Dios no es imaginaria ni eventual (cada vez que te acuerdas), sino que es algo tan vivo como tu respirar, tu circulación sanguínea y los latidos de tu corazón.
(IV) "Si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos", la realidad espiritual no se limita a un recuerdo mental, a una dulce sensación, o a una eventual compostura conductual. Ella no es algo olvidado en el desván, sino la corriente continua que mantiene activo tu contacto célico-pedestre. El mismo universo es sustentado o mantenido con la palabra de su poder; y ello no es diferente en nuestro caso. el fluir de la corriente en un manantial; los movimientos continuos del viento de un lado a otro; el día y la noche; el frío y el calor; el verano y el invierno; la sementera y la siega, y todo lo cíclico delante de nosotros, son una fiel demostración de la realidad de esta aserción apostólica (He.1:3b; Jn.3:8; Gn.8:22; Ec.1:6-7).
(V) "Si no creísteis en vano", el Señor nos concede la fe como una fuente de contacto perenne con él, como la simiente que ha de ser forjada en nuestro fuero interno para producir salvación como un género de vida que no puede ya más morir. Fue el soplo de vida en Adán lo que nos hizo surgir, su intervención quirúrgica a la zona intercostal lo que nos dio una madre, y la suministración de la simiente en él, y del óvulo en ella, y del dulce amor que los impulsara a generarnos, lo que trajo a este conglomerado de siete mil millones de individuos que hoy colmamos el planeta. Sí, esa fe fue por y para las edades, de lo cual surge también esta premisa: "Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá" (Ro.1:17).
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 03/07/2015
CUÁN IMPORTANTE ES QUE NOS AFERREMOS GOZOSAMENTE A LAS COSAS QUE DIOS NOS HA OTORGADO POR MEDIO DEL EVANGELIO DE JESUCRISTO. ESA NUEVA VIDA GENÉRICA ES LA QUE UBICA EN NUESTROS CORAZONES NUESTRO SENTIDO PRÁCTICO DE ETERNIDAD, LLEVÁNDONOS DE UN MODO PREVALENTE A EXPERIMENTAR TODOS LOS RECURSOS QUE LE SON PROPIOS A LOS QUE HAN NACIDO DE NUEVO, Y VIVEN UNA VIDA TRASCENDENTE.
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