LIMA - PERÚ MIÉRCOLES 26 DE AGOSTO DEL 2015
COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS
Hechos 5:7-11.
"Pasado un lapso como de tres horas, sucedió que entró su mujer, no sabiendo lo que había acontecido. Entonces Pedro le dijo: Dime, ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella dijo: Sí, en tanto. Y Pedro le dijo: ¿Por qué convinisteis en tentar al Espíritu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti. Al instante cayó a los pies de él, y expiró; y cuando entraron los jóvenes, la hallaron muerta; y la sacaron, y la sepultaron junto a su marido. Y vino gran temor sobre toda la iglesia, y sobre todos los que oyeron estas cosas".
*** El episodio respecto a la pareja confabulada no había concluido aún. Y fue así que Safira se presentó en el lugar donde la iglesia se reunía, y llamada por el apóstol Pedro, la mujer se hizo presente ante el tal, quien directamente inquirió respecto al precio de venta de la heredad. ¿Era común que el apostolado se interesara en preguntar por separado a los cónyuges sobre estas cosas? ¿Se dudaba sobre la sinceridad de los ofrendadores? ¿Se les interrogaba como a reos? ¡No, para nada! ¿De dónde, pues, la pregunta de Pedro a Safira? Porque la confabulación era un asunto de los dos, ¡y Dios se lo había referido a Pedro desde esa perspectiva! La iglesia no tenía una Gestapo o una Inquisición; pero esta situación demandaba un trato peculiar porque así lo imponía el Espíritu Santo en el corazón del apóstol.
*** La distraida Safira, la singular benefactora del cuerpo de Cristo, se hizo presente tres horas más tarde con el previo acuerdo puesto en la mente y en el corazón; y cuando fuera interrogada por el ex pescador de Galilea, no se inmutó, no se extrañó; y respondió serenamente según lo pactado con su esposo, confirmando que este engaño era un acuerdo bilateral. Por eso Pedro le refiere a Safira: ¿Por qué convinisteis EN TENTAR AL ESPÍRITU DEL SEÑOR? Aquí tenemos definido y cualificado el problema y el pecado en sí. Ellos no engañaban a un grupo humano inconsciente; lo que podía lucir inocente y divertido para las mentes naturales; sino que establecieron una afrenta que el Espíritu del Señor no podía soslayar sin ser tomado en poco, y ver vituperado su nombre. Eso fue, amados hermanos, lo que llevó a la tumba a Safira también.
*** La naturaleza profana pretende pasar por graciosa, pícara o simpática; pero lo que subyace bajo todo ello es la afrenta a Dios y a sus siervos; y me permito acotar que nuestro Dios es muy serio, claro y circunspecto en su modo de ser y en su manera de actuar; descartemos pues ciertas licencias que son propias en un ambiente teatral o cómico; mas nunca en nuestra relación con el Señor, pecando contra él y contra la fraternidad en general. Que nuestro lenguaje, nuestros gestos y nuestras actitudes, demuestren nuestro plano reverente ante la Deidad, y de completo respeto y deferencia para con nuestros hermanos.
*** Los dos ofrendadores embusteros y profanos fueron sepultados juntos. No se nos habla de servicios fúnebres de cuerpos presentes, porque a nivel judaico no hay velatorios ni velorios, y en el mismo día de la muerte, la persona es sepultada. ¿Alguno recuerda que el cuerpo del Señor Jesús fuera llorado, celebrado u homenajeado? ¡No! Pasó directo a la tumba porque la fiesta pascual no debía "ser contaminada" por un cuerpo muerto. Esa costumbre judaica es norma para toda persona muerta.
*** El gran temor que vino sobre toda la iglesia, puso en antecedentes a todos los hermanos sobre la naturaleza sagrada de sus tratos con el Señor. Los rituales arqueotestamentarios, con ciertas falencias para las cuales se mostraba cierta condescendencia; no eran dables entre aquellos que tenían libertad para entrar en el lugar santísimo. Nuestro recogimiento no es algo negociable, ni es optativo; es algo que ha de mantenerse en todo trance, dentro de cada fase de nuestra veneración y adoración al Dios verdadero. Los hijos mayores de Aarón, algo bebidos, se atrevieron a ofrecer a Dios, siguiendo el ritual, fuego extraño que Yahweh nunca requiriera de ellos, y perecieron en el ejercicio ceremonial del mismo, quemados por la ira divina frente a su infame irreverencia. Que un saludable temor de Dios nos mantenga al margen de involucrarnos torpe y negativamente en los asuntos divinos. Lo secular es lo secular; lo divinal, es lo divinal.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 26/08/2015
*** La naturaleza profana pretende pasar por graciosa, pícara o simpática; pero lo que subyace bajo todo ello es la afrenta a Dios y a sus siervos; y me permito acotar que nuestro Dios es muy serio, claro y circunspecto en su modo de ser y en su manera de actuar; descartemos pues ciertas licencias que son propias en un ambiente teatral o cómico; mas nunca en nuestra relación con el Señor, pecando contra él y contra la fraternidad en general. Que nuestro lenguaje, nuestros gestos y nuestras actitudes, demuestren nuestro plano reverente ante la Deidad, y de completo respeto y deferencia para con nuestros hermanos.
*** Los dos ofrendadores embusteros y profanos fueron sepultados juntos. No se nos habla de servicios fúnebres de cuerpos presentes, porque a nivel judaico no hay velatorios ni velorios, y en el mismo día de la muerte, la persona es sepultada. ¿Alguno recuerda que el cuerpo del Señor Jesús fuera llorado, celebrado u homenajeado? ¡No! Pasó directo a la tumba porque la fiesta pascual no debía "ser contaminada" por un cuerpo muerto. Esa costumbre judaica es norma para toda persona muerta.
*** El gran temor que vino sobre toda la iglesia, puso en antecedentes a todos los hermanos sobre la naturaleza sagrada de sus tratos con el Señor. Los rituales arqueotestamentarios, con ciertas falencias para las cuales se mostraba cierta condescendencia; no eran dables entre aquellos que tenían libertad para entrar en el lugar santísimo. Nuestro recogimiento no es algo negociable, ni es optativo; es algo que ha de mantenerse en todo trance, dentro de cada fase de nuestra veneración y adoración al Dios verdadero. Los hijos mayores de Aarón, algo bebidos, se atrevieron a ofrecer a Dios, siguiendo el ritual, fuego extraño que Yahweh nunca requiriera de ellos, y perecieron en el ejercicio ceremonial del mismo, quemados por la ira divina frente a su infame irreverencia. Que un saludable temor de Dios nos mantenga al margen de involucrarnos torpe y negativamente en los asuntos divinos. Lo secular es lo secular; lo divinal, es lo divinal.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 26/08/2015
LOS CONTUBERNIOS, O ACUERDOS HUMANOS PERVERSOS, SIEMPRE SERÁN TRATADOS POR EL PADRE CON LA MISMA ACRITUD, CUANDO PRETENDAMOS QUE DIOS O LA IGLESIA SEAN LAS VÍCTIMAS DE TAL MALDAD. UN CREYENTE TIENE QUE ENTENDER QUE LA PROFANIDAD MERECE CASTIGO, QUE NO ES ALGO TRIVIAL, Y QUE DIOS PUEDE TRATARLO DEL MODO MÁS DURO.
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