LIMA - PERÚ SÁBADO 02 DE FEBRERO DEL 2019 MENSAJE # 3015
NEHEMÍAS 13:1-3. 6b-12.
"Aquel día se leyó en el libro de Moisés, oyéndolo el pueblo, y fue hallado escrito en él que los amonitas y los moabitas no debían entrar jamás en la congregación de Dios, por cuanto no salieron a recibir a los hijos de Israel con pan y agua, sino que dieron dinero a Balaam para que los maldijera; mas nuestro Dios cambió la maldición en bendición. Cuando oyeron, pues, la ley, separaron de Israel a todos los mezclados con extranjeros ... Pedí permiso al rey para volver a Jerusalén, y entonces supe del mal que había hecho Eliasib por consideración a Tobías, haciendo para él una cámara en los atrios de la casa de Dios. Y me dolió en gran manera, y arrojé todos los muebles de la casa de Tobías fuera de la cámara, y dije que limpiasen las cámaras, e hice volver allí los utensilios de la casa de Dios, las ofrendas y el incienso. Encontré asimismo que las porciones para los levitas no les habían sido dadas, y que los levitas y cantores que hacían el servicio habían huido cada uno a su heredad. Entonces reprendí a los oficiales, y dije: ¿Por qué está la casa de Dios abandonada? Y los reuní y los puse en sus puestos. Y todo Judá trajo el diezmo del grano, del vino y del aceite, a los almacenes".
=== Este capítulo de Nehemías está pletórico de un celo por la casa de Dios pocas veces visto. La prioridad de este gobernante, ni bien llegó otra vez a Jerusalén, fue el restaurar el orden divino en lo concerniente a los asuntos que eran considerados prioritarios para que la relación célico-pedestre se mantuviera incólume, y el divino favor se manifestara sobre todo el pueblo de Dios sin pausa alguna. Nótese cómo al leer en la Palabra de Dios (La Ley) lo concerniente al panorama relacional con la gente extranjera, y el mandato divino sobre LA SEPARACIÓN que los mantuviera como pueblo santo, debía ser respetada en toda su extensión, manteniendo una comunión ideal con la Deidad en los términos por él instituidos. Si estamos atentos a lo concerniente a nuestra elección, no dejaremos que nuestro nivel de tolerancia nos lleve a tener una mixtura que lesione la orden señalada por el Padre, haciéndonos cohabitar con la impiedad en una lesiva koinonía que promueva el celeste rechazo. Si el pueblo de Dios temblara al conocer la divina ordenanza, y se sometiera a ella sin más, continuaremos caminando en línea con la Deidad, y el ritmo de siembras y cosechas, nada sabrá de sequías o de plagas; sólo de abundancias continuas y de bendiciones sin fin. El Señor revela que la razón de su repudio o rechazo a los moabitas y amonitas era que, siendo parientes, no honraron su filiación, y procuraron evitar que Israel alcanzara su herencia, alquilando los servicios de Balaam, quien tenia fama de ser muy acertado en asuntos de bendiciones y maldiciones, cancelando estas últimas, y cambiándolas en bendiciones.
=== Un celo muy peculiar llevó a la exclusión de muchas personas que antes vivieran cómodas entre los judíos, porque estos carecían de información al respecto (lo básico del conocimiento del orden divinal), y podemos llegar a ser cautivados por nuestra propia ignorancia, acerca de lo cual dice Dios: "Desviarán tu corazón de en pos de mí" (Dt.7:1-5, 4e); algo que Pablo refrendará en 2 Corintios.6:14-18. Pero el asunto de la elección y separación no quedaba allí. A nivel sscerdotal, el propio Eliasib había emparentado con Tobías amonita; y tomándose una atribución que estaba lejos de poseer, permitió que éste tuviera sus bienes muebles en una de las cámaras que fueran hechas para guardar allí la provisión para los levitas, algo que fuera a todas luces incorrecto, tanto en lo civil como en lo religioso, profanando los atrios de la casa del Señor. Algunos creyentes (independientemente de su posición a nivel eclesial) consideran la locación congregacional como su feudo, y se mueven en la grey con un señorío que Dios no les ha concedido a sus mayordomos o sirvientes del templo. Debo confesar que me encantó la reacción de Nehemías, y me hubiera gustado estar presente para ver cómo los muebles del amonita salían volando de los almacenes de las tres cosechas anuales que forjaran la provisión de los levitas y de los sacerdotes. Aquellos que disfrutamos el orden constitucional nos sentimos cómodos cuando todo se hace a la sazón divina; sintiéndonos indignados cuando esto no es así.
=== El miope Eliasib, no consideraba el servicio de los levitas como algo necesario, y su forma de pensar trajo la deserción de los encargados de los cultos regulares, el olvido del pacto, una larga interrupción de los cultos al Señor; un desprecio total por el divino fluir en su diaria reverencia al Señor. Al parecer, el panorama seudo espiritual de algunos religiosos, sólo son el producto de la supervisión de los encargados, y el celo de los siervos fieles; algo que a ellos no los adorna. La vuelta de Nehemías, implicó el que todo volviera a ser conforme a las asignaciones, y que todo funcionara a la sazón divina. Hay quienes odian las figuras de autoridad, indicando con esa actitud la rebeldía que gobierna sus corazones, palabras y determinaciones, las cuales operarán en desmedro del panorama espiritual que sustenta nuestra relación célico-pedestre. Nehemías trajo la restauración del plano concreto de adoración que correspondiera a nivel nacional, haciendo que todo volviera a la normalidad, y funcionara con la precisión de un reloj suizo. La adoración no es un rito aburrido y agotador, es la recarga que nuestro espíritu necesita para mantenerse vivo y activo, honrando a Dios todo el tiempo.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 02/02/2019 MENSAJE # 3015.
"Aquel día se leyó en el libro de Moisés, oyéndolo el pueblo, y fue hallado escrito en él que los amonitas y los moabitas no debían entrar jamás en la congregación de Dios, por cuanto no salieron a recibir a los hijos de Israel con pan y agua, sino que dieron dinero a Balaam para que los maldijera; mas nuestro Dios cambió la maldición en bendición. Cuando oyeron, pues, la ley, separaron de Israel a todos los mezclados con extranjeros ... Pedí permiso al rey para volver a Jerusalén, y entonces supe del mal que había hecho Eliasib por consideración a Tobías, haciendo para él una cámara en los atrios de la casa de Dios. Y me dolió en gran manera, y arrojé todos los muebles de la casa de Tobías fuera de la cámara, y dije que limpiasen las cámaras, e hice volver allí los utensilios de la casa de Dios, las ofrendas y el incienso. Encontré asimismo que las porciones para los levitas no les habían sido dadas, y que los levitas y cantores que hacían el servicio habían huido cada uno a su heredad. Entonces reprendí a los oficiales, y dije: ¿Por qué está la casa de Dios abandonada? Y los reuní y los puse en sus puestos. Y todo Judá trajo el diezmo del grano, del vino y del aceite, a los almacenes".
=== Este capítulo de Nehemías está pletórico de un celo por la casa de Dios pocas veces visto. La prioridad de este gobernante, ni bien llegó otra vez a Jerusalén, fue el restaurar el orden divino en lo concerniente a los asuntos que eran considerados prioritarios para que la relación célico-pedestre se mantuviera incólume, y el divino favor se manifestara sobre todo el pueblo de Dios sin pausa alguna. Nótese cómo al leer en la Palabra de Dios (La Ley) lo concerniente al panorama relacional con la gente extranjera, y el mandato divino sobre LA SEPARACIÓN que los mantuviera como pueblo santo, debía ser respetada en toda su extensión, manteniendo una comunión ideal con la Deidad en los términos por él instituidos. Si estamos atentos a lo concerniente a nuestra elección, no dejaremos que nuestro nivel de tolerancia nos lleve a tener una mixtura que lesione la orden señalada por el Padre, haciéndonos cohabitar con la impiedad en una lesiva koinonía que promueva el celeste rechazo. Si el pueblo de Dios temblara al conocer la divina ordenanza, y se sometiera a ella sin más, continuaremos caminando en línea con la Deidad, y el ritmo de siembras y cosechas, nada sabrá de sequías o de plagas; sólo de abundancias continuas y de bendiciones sin fin. El Señor revela que la razón de su repudio o rechazo a los moabitas y amonitas era que, siendo parientes, no honraron su filiación, y procuraron evitar que Israel alcanzara su herencia, alquilando los servicios de Balaam, quien tenia fama de ser muy acertado en asuntos de bendiciones y maldiciones, cancelando estas últimas, y cambiándolas en bendiciones.
=== Un celo muy peculiar llevó a la exclusión de muchas personas que antes vivieran cómodas entre los judíos, porque estos carecían de información al respecto (lo básico del conocimiento del orden divinal), y podemos llegar a ser cautivados por nuestra propia ignorancia, acerca de lo cual dice Dios: "Desviarán tu corazón de en pos de mí" (Dt.7:1-5, 4e); algo que Pablo refrendará en 2 Corintios.6:14-18. Pero el asunto de la elección y separación no quedaba allí. A nivel sscerdotal, el propio Eliasib había emparentado con Tobías amonita; y tomándose una atribución que estaba lejos de poseer, permitió que éste tuviera sus bienes muebles en una de las cámaras que fueran hechas para guardar allí la provisión para los levitas, algo que fuera a todas luces incorrecto, tanto en lo civil como en lo religioso, profanando los atrios de la casa del Señor. Algunos creyentes (independientemente de su posición a nivel eclesial) consideran la locación congregacional como su feudo, y se mueven en la grey con un señorío que Dios no les ha concedido a sus mayordomos o sirvientes del templo. Debo confesar que me encantó la reacción de Nehemías, y me hubiera gustado estar presente para ver cómo los muebles del amonita salían volando de los almacenes de las tres cosechas anuales que forjaran la provisión de los levitas y de los sacerdotes. Aquellos que disfrutamos el orden constitucional nos sentimos cómodos cuando todo se hace a la sazón divina; sintiéndonos indignados cuando esto no es así.
=== El miope Eliasib, no consideraba el servicio de los levitas como algo necesario, y su forma de pensar trajo la deserción de los encargados de los cultos regulares, el olvido del pacto, una larga interrupción de los cultos al Señor; un desprecio total por el divino fluir en su diaria reverencia al Señor. Al parecer, el panorama seudo espiritual de algunos religiosos, sólo son el producto de la supervisión de los encargados, y el celo de los siervos fieles; algo que a ellos no los adorna. La vuelta de Nehemías, implicó el que todo volviera a ser conforme a las asignaciones, y que todo funcionara a la sazón divina. Hay quienes odian las figuras de autoridad, indicando con esa actitud la rebeldía que gobierna sus corazones, palabras y determinaciones, las cuales operarán en desmedro del panorama espiritual que sustenta nuestra relación célico-pedestre. Nehemías trajo la restauración del plano concreto de adoración que correspondiera a nivel nacional, haciendo que todo volviera a la normalidad, y funcionara con la precisión de un reloj suizo. La adoración no es un rito aburrido y agotador, es la recarga que nuestro espíritu necesita para mantenerse vivo y activo, honrando a Dios todo el tiempo.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 02/02/2019 MENSAJE # 3015.
LA DISPOSICIÓN DE LOS CORAZONES DEL PUEBLO DE DIOS HARÁ QUE OPERE UN BUEN ESPÍRITU, Y QUE SUS CORAZONES SE APEGUEN A LOS TESTIMONIOS DIVINOS.
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