LIMA - PERÚ VIERNES 08 DE FEBRERO DEL 2019 MENSAJE # 3027
SALMO 7:9-16.
"Fenezca ahora la maldad de los inicuos, mas establece tú al justo; porque el Dios justo prueba la mente y el corazón. Mi escudo está en Dios, que salva a los rectos de corazón. Dios es juez justo, y Dios está airado contra el impío todos los días, Si no se arrepiente, él afilará su espada; armado tiene ya su arco, y lo ha preparado. Asimismo ha preparado armas de muerte, y ha labrado saetas ardientes. He aquí, el impío concibió maldad, se preñó de iniquidad, y dio a luz engaño. Pozo ha cavado, y lo ha ahondado; y en el hoyo que hizo caerá. Su iniquidad volverá sobre su cabeza, y su agravio caerá sobre su propia coronilla".
=== Los salmos están pletóricos de rogativas, alabanzas, tristezas, gozos, dolores y alivios o consuelos; que nos permiten ver el panorama interior de los siervos de Dios, y de todas las cosas que componían sus experiencias, y su intimidad con el Señor, sin guardarse nada; revelando así que su panorama celestial y terrenal, tenía la vida misma como su escenario real y tangible. Y es ello lo que nos convence de una relación genuina que junta el cielo con la tierra, y que, al conectarlos, testifica de su realidad como la clase de vida a la que Dios nos ha invitado. La Deidad, no es un esfuerzo de la imaginación, una alucinación, o un desmesurado acopio de concentración para que la comunicación se observe como un hecho. Los que viven en la presencia de Dios, NO SE ESFUERZAN POR HACER PARECER ALGO FANTÁSTICO COMO SI FUERA REAL. La norma de su realidad existencial, tripartita y cierta como es, les permite confesar lo mismo que Elías tisbita: "VIVE YAHWEH, EN CUYA PRESENCIA ESTOY". Y ello no requiere de un trance hipnótico, o de poner la mente en blanco para ser poseído, pues el andar por el Espíritu implica una actitud individual de alguien que está consciente de que es un espíritu, tiene un alma, y habita dentro de un cuerpo, y que no esta unido por segmentos o guiones; sino que es una integridad tripartita espiritual, anímica y física que se subdivide en griego, mas es una unidad indivisible en hebreo.
=== El salmista está ubicándose en el contexto y el ámbito correcto. Él ubica la maldad como un pensamiento y accionar inicuos que tendrán un efecto aplastante si no son cancelados por la autoridad y potencia que le caben a los santos en su diaria batalla contra 'el mal de cada día'. La mente y el corazón del justo son probados por doquier, y es preciso estar despiertos al divino fluir, para que triunfe la justicia. Luego, al estar consciente de nuestro amparo: "Mi escudo está en Dios", y de que es la voluntad divina "salvar a los rectos de corazón", se va dibujando la cota de justicia, y el resto de la armadura de Dios que desluce al enemigo, y hace brillar la misericordia divinal, y me lleva a afirmar como una bendita arenga o eslogan, que Dios es justo; y que mientras yo dispongo de su bondad y su protección como instrumentos de mi paz, la ira divina está siempre en contra del impío todos los días. ¿Nos vamos dando cuenta de lo diario de nuestra lucha?
=== El siempre misericordioso Dios de Israel, hace la invitación al arrepentimiento, y la intimación al juicio, refiriéndose a su Espada (Su palabra actuando contra toda oposición). y al arco de su poder, que está listo para acabar con sus opositores. El Señor no dice que se aparejará en algún momento para todo esto, sino que ya todo está preparado para la eliminación de los enemigos quienes ya se han saturado de maldad, la misma que es descrita como las etapas de concepción, preñez y alumbramiento, indicando con ello que no hay la voluntad de arrepentirse, y sí la de retar a Dios, quien los enfrentará con su ira y los sepultará en los pozos que ellos mismos cavaron para otros. Nuestro Señor devuelve la maldad de sus corazones sobre ellos, y donde pensaron que caeríamos nosotros, ellos caerán, viéndose vencidos y destruidos por el poder de Dios que ellos tan neciamente provocaran. ¡Hay victoria en Jesús!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 08/02/2019 MENSAJE # 3027.
"Fenezca ahora la maldad de los inicuos, mas establece tú al justo; porque el Dios justo prueba la mente y el corazón. Mi escudo está en Dios, que salva a los rectos de corazón. Dios es juez justo, y Dios está airado contra el impío todos los días, Si no se arrepiente, él afilará su espada; armado tiene ya su arco, y lo ha preparado. Asimismo ha preparado armas de muerte, y ha labrado saetas ardientes. He aquí, el impío concibió maldad, se preñó de iniquidad, y dio a luz engaño. Pozo ha cavado, y lo ha ahondado; y en el hoyo que hizo caerá. Su iniquidad volverá sobre su cabeza, y su agravio caerá sobre su propia coronilla".
=== Los salmos están pletóricos de rogativas, alabanzas, tristezas, gozos, dolores y alivios o consuelos; que nos permiten ver el panorama interior de los siervos de Dios, y de todas las cosas que componían sus experiencias, y su intimidad con el Señor, sin guardarse nada; revelando así que su panorama celestial y terrenal, tenía la vida misma como su escenario real y tangible. Y es ello lo que nos convence de una relación genuina que junta el cielo con la tierra, y que, al conectarlos, testifica de su realidad como la clase de vida a la que Dios nos ha invitado. La Deidad, no es un esfuerzo de la imaginación, una alucinación, o un desmesurado acopio de concentración para que la comunicación se observe como un hecho. Los que viven en la presencia de Dios, NO SE ESFUERZAN POR HACER PARECER ALGO FANTÁSTICO COMO SI FUERA REAL. La norma de su realidad existencial, tripartita y cierta como es, les permite confesar lo mismo que Elías tisbita: "VIVE YAHWEH, EN CUYA PRESENCIA ESTOY". Y ello no requiere de un trance hipnótico, o de poner la mente en blanco para ser poseído, pues el andar por el Espíritu implica una actitud individual de alguien que está consciente de que es un espíritu, tiene un alma, y habita dentro de un cuerpo, y que no esta unido por segmentos o guiones; sino que es una integridad tripartita espiritual, anímica y física que se subdivide en griego, mas es una unidad indivisible en hebreo.
=== El salmista está ubicándose en el contexto y el ámbito correcto. Él ubica la maldad como un pensamiento y accionar inicuos que tendrán un efecto aplastante si no son cancelados por la autoridad y potencia que le caben a los santos en su diaria batalla contra 'el mal de cada día'. La mente y el corazón del justo son probados por doquier, y es preciso estar despiertos al divino fluir, para que triunfe la justicia. Luego, al estar consciente de nuestro amparo: "Mi escudo está en Dios", y de que es la voluntad divina "salvar a los rectos de corazón", se va dibujando la cota de justicia, y el resto de la armadura de Dios que desluce al enemigo, y hace brillar la misericordia divinal, y me lleva a afirmar como una bendita arenga o eslogan, que Dios es justo; y que mientras yo dispongo de su bondad y su protección como instrumentos de mi paz, la ira divina está siempre en contra del impío todos los días. ¿Nos vamos dando cuenta de lo diario de nuestra lucha?
=== El siempre misericordioso Dios de Israel, hace la invitación al arrepentimiento, y la intimación al juicio, refiriéndose a su Espada (Su palabra actuando contra toda oposición). y al arco de su poder, que está listo para acabar con sus opositores. El Señor no dice que se aparejará en algún momento para todo esto, sino que ya todo está preparado para la eliminación de los enemigos quienes ya se han saturado de maldad, la misma que es descrita como las etapas de concepción, preñez y alumbramiento, indicando con ello que no hay la voluntad de arrepentirse, y sí la de retar a Dios, quien los enfrentará con su ira y los sepultará en los pozos que ellos mismos cavaron para otros. Nuestro Señor devuelve la maldad de sus corazones sobre ellos, y donde pensaron que caeríamos nosotros, ellos caerán, viéndose vencidos y destruidos por el poder de Dios que ellos tan neciamente provocaran. ¡Hay victoria en Jesús!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 08/02/2019 MENSAJE # 3027.
LOS CORAZONES APERCIBIDOS DE LOS GENUINOS SIERVOS DE DIOS, SABEN CUÁNDO ORAR, GEMIR, ROGAR, CLAMAR, PROCLAMAR, PROFETIZAR, CONECTÁNDOSE CON LA SITUACIÓN Y CON AQUELLO QUE REPRESENTA LA RESPUESTA DIVINA PARA CADA OCASIÓN.
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