jueves, 7 de febrero de 2019

LAS REALIDADES NEOCREACIONALES, APLICADAS A NIVEL PERSONAL, HAN DE FRUCTIFICAR A SU SAZÓN. MANTENGAMOS NUESTROS CORAZONES DISPUESTOS Y ABIERTOS PARA DIOS Y SU PALABRA.

LIMA - PERÚ   JUEVES 07 DE FEBRERO DEL 2019   MENSAJE # 3025

MATEO 13:18-23    (VERSIÓN REINA VALERA CONTEMPORÁNEA).

"Escuchen ahora lo que significa la parábola del sembrador: Cuando alguien oye la palabra del reino, y no la entiende, viene el maligno y le arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Ésta es la semilla sembrada junto al camino. El que oye la palabra es la semilla sembrada entre las piedras, que en ese momento la recibe con gozo, pero su gozo dura poco por tener poca raíz; al venir la aflicción o la persecución por causa de la palabra se malogra. La semilla sembrada entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de este mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, por lo que ésta no llega a dar fruto. Pero la semilla sembrada en buena tierra es el que oye la palabra y la entiende, y da fruto, y produce cien, sesenta, y treinta semillas por cada semilla sembrada".


=== El Señor comenzó a ministrar sobre los misterios del reino, haciendo uso de las parábolas (lenguaje y figuras alegóricas que pudieran hacer más accesible el significado de lo que el reino era y ofrecía para la nación israelita). La primera de ellas: La parábola del sembrador, era la que más se acomodaba a quienes destacaban como un pueblo de agrícola economía, haciendo que el simbolismo de las cosas referidas fueran lo que más se acercara a su nivel de comprensión, y que les diera un panorama general y específico sobre su relación célico-pedestre. Cuando Jesús se refiere a la palabra del reino, pinta un panorama relacional que asume valores absolutos e inalterables. El entendimiento que la nación hebrea tenía de su relación con la Deidad, compaginaba un plano completamente real entre el cielo y la tierra, el cual era gobernado por la ley divina, la misma que. cuando es obedecida, trae bendición, provisión y paz para quienes se han comprometido con ella. La siembra del sembrador, postula el cómo Dios hace provisión para su pueblo, y la necesidad de que el tal esté muy atento a cada referencia seminal para que produzca en ellos una abundante provisión, trayendo su bendición por causa de la sumisión al orden divinal.


=== La capacidad de la semilla no está en juicio, porque ella es perfecta; las falencias se dan en la calidad de la tierra; esto es en la disposición de los corazones para recibir, asumir y producir conforme a la generosidad de las dádivas divinas, las cuales son recepcionadas en estado óptimo; y es conforme a la calidad y cualidades de la tierra (el sentir de los corazones, y su rango de apertura al divino obrar); que la fructificación se hará factible a su sazón. El OÍR la palabra del reino y NO ENTENDERLA,  le da al maligno el derecho legal de arrebatar todo lo que haya sido sembrado en nuestros corazones. Esta es la semilla sembrada junto al camino, y que fuera comida por las aves. La FALTA DE ENTENDIMIENTO infiere un desinterés por lo real, y el estar allí por simple curiosidad, buscando enterarse de lo que se dice; pero no en comprometerse con las realidades que se postulan, siendo una calabaza de cara bonita y de buena intención, pero permaneciendo en la intrascendencia. Los terrenos pedregosos, son aquellos que ya han formado un criterio apriorístico, que ya tienen una perspectiva particular, y muy poco espacio disponible para dejar que otras ideas o pensamientos ocupen su idealidad. Aquella gozosa recepción por lo bello del mensaje, durará tan poco como las modas seculares, que impactan de inmediato, pero que no encuentran un espacio o algo de que adherirse en el corto trámite de sus conductas pasionales que duran tanto como la vigencia de sus emociones. Así, frente al más ligero revés o decepción los ánimos claudican, temiendo que la cosa se ponga peor más adelante, sintiendo que ha llegado el tiempo de decir adiós a lo que fue bonito mientras duró.


=== Los ESPINOSOS, tienen la capacidad de oír, pero sus mentalidades y sus ocupaciones de orden secular y prioritario para ellos, los llevan a desdeñar las ofertas del cielo, por tener en la tierra sus preferencias, buscando en la inmediatez de sus placeres su sentido existencial, y en su aparente seguridad, atacada persistentemente por sus preocupaciones, y por el disfrute de las riquezas materiales que no llegan a saciar su desmedida ambición, su afán y su lujuria, van perdiendo su verticalidad, y se sumergen en aquella alberca que ahogará el valor real de la palabra de Dios, haciendo infructuosa la divina operación. Por otro lado, la semilla sembrada en BUENA TIERRA, es descrita como aquel que OYE LA PALABRA Y LA ENTIENDE, reconociendo su aplicabilidad, y hace uso de todo lo que ella ofrece, y obtiene un fruto que multiplica por treinta, sesenta y cien respectivamente cada unidad seminal, disfrutando de un modo tangible y glorioso del amor divino derramado en sus corazones, gozándose en extremo de las bondades celestiales.




EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   07/02/2019   MENSAJE # 3025.

1 comentario:

  1. A VECES ESTAMOS TAN PREOCUPADOS EN VER LA CALIDAD DE TIERRA EN LOS DEMÁS, QUE PREJUZGAMOS Y CONDENAMOS SIN ATENUANTES, CON EL AFÁN DE AHORRAR SEMILLAS. DIOS NO NOS PIDE QUE SEAMOS JUECES DE OTROS, SINO QUE SEMBREMOS SU SEMILLA. DEJA QUE ÉL HAGA EL RESTO.

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