EL APÓSTOL EXTIENDE LA PANTALLA DELANTE DE NUESTROS OJOS, Y NOS INVITA A CONSIDERAR EL DIVINO OBRAR BAJO LA DIVINA PERSPECTIVA. EL ENDURECIMIENTO JUDAICO NO SERÁ PARA SIEMPRE, Y SERÁ PARCIAL. EN LA AGENDA DIVINA NO ESTABA EL DESECHAMIENTO DE LA NACIÓN ESCOGIDA, SINO LA COMPLETA RESTAURACIÓN DE LA MISMA CELEBRANDO GOZOSA Y GLORIOSAMENTE LA VERDADERA FIESTA DEL YOM KIPPUR.

LIMA - PERÚ  VIERNES 26 DE AGOSTO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE PABLO A LOS ROMANOS

Romanos 11:22-27.

"Mira, pues, la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente para los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado. Y aun ellos, si no permaneciesen en incredulidad, serán injertados, pues poderoso es Dios para volverlos a injertar. Porque si tú fuiste cortado del que por naturaleza es olivo silvestre, y contra naturaleza fuiste injertado en el buen olivo, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales, serán injertados en su propio olivo? Porque no quiero, hermanos,  que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, que apartará de Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos, cuando yo quite sus pecados".

*** Introducción.- El dilema del orgullo, en los corazones de los redimidos por gracia, hace ver la necesidad de recibir el entendimiento de lo que la gracia es en su esencia. Así, Pablo nos orienta para que tengamos una perspectiva precisa de los hechos en Dios, revelando que la hoy holgada posición de gloria adheridos al olivo bueno y verdadero no es un mérito obtenido por el neocreyente, sino una generosa dádiva divinal con la consigna de mantenernos por la fe en ésta. Todo menosprecio para con las ramas salientes del olivo, revertirá en contra de quien así lo siente o expresa. Tal lenguaje desaparecerá en la medida que perdamos nuestra identidad adámica, y asumamos nuestra ascendencia abrahámica de pacto, descartando toda actitud necia y menospreciativa.

*** (Ro.11:22-23) Un muy caritativo instructor nos invita a considerar dos aspectos diametralmente opuestos sobre aquella posición puntual: La severidad para con aquel que cayó por su absoluta obduración, la cual lo llevara a desechar la gracia divinal; y la bondad para con aquel que la recibe, mostrándose infinitamente agradecido, y siendo advertido para mantener la actitud correspondiente todo el tiempo de su peregrinación, a fin de confirmar su elección. La perseverancia es una divina solicitud para todos los que son afiliados al cuerpo de Cristo. Luego, el apóstol nos dice algo pasmoso: las ramas no se secarán para convertirse en leña; sino que van a permanecer allí, donde Dios seguiría cuidando de ellos por 2520 años, hasta que su gracia los restaure, como podemos ver hoy, queriendo construir su nuevo templo que los lleve al pasado, y ser como el Bautista, uniendo a su pueblo generacionalmente para el cubrimiento del propósito divino, como si esas 25 centurias no hubieran pasado, y hacer que se cumplan las setenta semanas de Daniel. ¡Hay tanto aquí! El gozo de mi corazón es el poder contemplar cómo se van cumpliendo las palabras de nuestro Dios, y la certeza de la promesa sin que caiga a tierra ninguna de sus palabras (Jos.23:14). Y Pablo nos refiere: "Y aun ellos, si no permanecieren en incredulidad, serán injertados, pues poderoso es Dios para volverlos a injertar". ¡ÉSTE ES NUESTRO DIOS, AMADOS LECTORES!

*** (Ro.11:24) Pablo recuerda a los neocreyentes su origen o procedencia (el acebuche u olivo silvestre), y nuestra entrada contra natural en el buen olivo (nadie injerta para deteriorar, sino para mejorar o superar; con nosotros pasó al revés...¡tremendo reto para Yahweh!); revelando cómo el proceso de restauración podrá ser más simple, pues al conservar la rama del olivo bueno su savia natural, no hay que pasar por el proceso que sí aconteciera con quienes no eran los legítimos descendientes de Abraham, teniendo el acceso que estaba profetizado hasta el fin de los tiempos de los gentiles, como veremos a renglón seguido. El antes transido de dolor por el descalabro hebraico, avizora la esperanza judía allende los tiempos, y el llanto del ayer se combina con la dicha de hoy, ensanchando el rostro de quienes aman a Israel, conscientes que la promesa divina se cumplirá en el tiempo y la sazón dispuesta por Dios.

*** (Ro.11:25) El tópico aquí presentado es la restauración de la nación israelita, explicando cabalmente que Israel no ha sido desechado, y que no debemos portarnos arrogantemente con ellos, pues esa actitud acusa nuestra ignorancia sobre lo que Dios ha determinado, y Dios no simpatiza con la irreverencia, ni con el lenguaje profano. El endurecimiento israelita tiene una característica que Dios describe como parcial y temporal; ¿su motivo? La entrada de los gentiles en el pacto, hasta el último de ellos. El menorah o candelabro, nos revela con sus seis brazos su justicia. Los tres de la derecha representan el humano fluir a través de Adán, Abraham y David; la caña central representa al Mesías o Cristo; y nosotros hemos sido incluidos en los dos mil años de gracia, y en el reino milenial, representados por los tres brazos de la izquierda, completando los denominados tiempos postreros, para entrar luego con toda la nación israelita al plano de nuestra herencia en Cristo.

*** (Ro.11:26-27) Al concluir el reato judicial sobre la nación escogida, su restauración es un hecho, y es lo que el pueblo de Dios ha estado esperando desde tiempo inmemorial. Y Pablo remembrará lo que está escrito: "Vendrá de Sion el Libertador"; no dice que el Libertador vendrá a Sion; sino que él ya estaba allí; los que no estaban allí, y necesitaban ser restaurados son ellos, los judíos; y entonces LA SANGRE DE CRISTO MOSTRARÁ SU PODER PARA ELLOS, y el verdadero Yom Kippur con el genuino Cordero de Dios celebrará la sexta fiesta, y todo el mundo lo verá. El apartarlos de la impiedad, separándolos de la maldad que los condenara era el primer paso, y luego, sería QUITADO EL PECADO DE ELLOS, y entrarían en el NUEVO PACTO que hacía 2520 años aguardara por ellos (Is.59:20; Jer.31:33-34).

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  26/08/2016