jueves, 19 de mayo de 2016

LA LENGUA, CON EL PODER QUE LE HA SIDO ASIGNADO, NOS OTORGA VIDA, O MUERTE; SALUD, O ENFERMEDAD; GOZO, O PESAR. ES ESTRICTAMENTE NECESARIO QUE LOS CREYENTES CONOZCAN A CABALIDAD QUE ELLA ES LA FUENTE DE NUESTRA SALVACIÓN, O DE NUESTRA DESDICHA Y CONDENACIÓN (2TI.2:12-13). LLENEMOS NUESTROS CORAZONES DE LA PALABRA DE DIOS, PARA QUE LA ABERTURA O BOCA DE LA FUENTE PUEDA DAR EL AGUA QUE TRAE VIDA A QUIEN DE ELLA BEBE (JN.4:14).

LIMA - PERÚ  JUEVES 19 DE MAYO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE SANTIAGO

Santiago 3:7-12.

"Porque toda naturaleza de bestias, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana, pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal. Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres que están hechos a la semejanza de Dios. De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga? Hermanos míos ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce".


*** Santiago sigue disertando sobre la lengua, su naturaleza y su potencia; es decir, aquella capacidad que tiene para generar la vida o la muerte, según la inspiración del corazón de quien articula las palabras inherentes a su deseo y su sentir. El corazón y la lengua actúan como hermanos siameses, y así como el Padre usó el Verbo (la palabra) para crear las cosas según el deseo de su corazón, su visión y su propósito; así también el corazón usa la lengua para forjar lo que desea, plasmándolo en la esfera pedestre como bendición o como maldición; bien o mal; ayuda o daño. El conocimiento real de su poder nos vuelve lacónicos, desechando la verborrea clásica del imprudente, del hábil orador demagógico, o del burdo cantinfleo del hablador soez y vulgar que disfruta de ser oído, mostrando su ignorancia y su insensatez a todo el que le preste atención. No serán los diálogos de las cantinas los que se transformen en proverbios de sabios. Es la madura reflexión de la sabiduría obtenida por la revelación y la experiencia la que nos da una sentencia inteligente, un refrán, una moraleja, una sabia instrucción, que nos conducen por veredas de justicia y equidad.

*** La naturaleza humana descubrió su capacidad sobre otros seres creados: bestias, aves, serpientes y seres del mar, y el cómo pueden ser domados, hasta imponer la voluntad de quien los domestica sobre ellos (nótese que se exceptúa al hombre sobre otros hombres), costando un nivel de esfuerzo basados en la fiereza o capacidad de entendimiento de los animales, y en su afinidad para coexistir pacíficamente y en comunión con sus amos. Pero hay una excepción en cuanto a LA LENGUA, la misma que no puede ser domada, pues obedece a un corazón herido y contaminado por el mal de la naturaleza adámica, convirtiendo nuestra boca en una fuente de bien y de mal; pero no de vida (recordemos los dos árboles que se hallaban en el centro del huerto del Edén). La pobreza espiritual de los no renacidos les impide alcanzar victoria sobre su lenguaje, y su lengua siempre derrama malas cosas, viéndose y sintiéndose imposibilitados de quitar esa venenosa carga que tendría como única solución la amputación. Pero el diseño divino no puso en el hombre tal lenguaje; ¡eso lo elegimos nosotros! Así como nuestras manos pueden haber lesionado a otros, y servido sólo para el mal; pero trocadas en instrumentos divinos, traen sanidad (Mr.16:18); así la lengua puede ser utilizada para la gloria de Dios cuando cambian nuestros corazones.


*** Veamos lo que la esencia del árbol del bien y del mal impregnó en nosotros: "Con ella bendecimos al Dios y Padre (perspectiva espiritual religiosa), y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a su semejanza (no entendemos la gloria de Dios extendida a nivel de la humanidad en el aspecto creacional y redentivo)". Nuestro torpe proceder es porque aún no hemos asimilado correctamente el panorama neocreacional, el mismo que habrá de verse desarrollado hasta madurar, mirando a nuestros hermanos como hijos de Dios, y no como a seres inferiores. La presunción, hermana menor de la soberbia, debe ser arrojada de la línea familiar correcta, no aceptándola ni como pariente política, desarraigándola de nuestras mentes y de nuestros recuerdos.


*** Santiago declara lo antinatural de que una misma abertura (boca) eche agua dulce y amarga indistintamente, a menos que posea una naturaleza dual y contradictoria que lo aturda y desconcierte en lo tocante a la vida. La dualidad de pensamientos, claudicando entre uno y otro a su sazón (1R.18:21), paraliza a quien experimenta esa paradoja mental, y el deseo del Padre no se cubre porque la incertidumbre paraliza el nervio del esfuerzo, inutilizándonos. Esto no debe ser así. Santiago refiere el que ninguna higuera, dulce y deliciosa como es en su forma natural, puede traer la acidez de una aceituna, y viceversa. La fuente, entonces, no puede dar agua salada y dulce a la vez, a no ser que no tenga clara su identidad. ¿Sabemos quiénes somos?





EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA

1 comentario:

  1. NUESTRO AMADO HERMANO SANTIAGO NOS ORIENTA SOBRE LA RELACIÓN QUE HAY ENTRE EL CORAZÓN Y LA LENGUA, Y NOS REVELA LA NECESIDAD DE RENOVAR LO UNO PARA CAMBIAR LO OTRO, DE MODO QUE AGRADE A DIOS, Y MATERIALICE EL FAVOR DIVINAL PARA NUESTRO CRECIMIENTO Y MADURACIÓN EFECTIVOS.

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