domingo, 9 de diciembre de 2018

LOS VALORES ETERNALES, TIENEN L;A PECULIARIDAD DE AFECTAR NUESTRAS VIDAS MÁS ALLÁ DE LO CONVENCIONAL, ENTENDIÉNDONOS COMO SERES TRIPARTITOS QUE NO SE SATISFACEN CON COSAS PUERILES, Y QUE PARA LLENAR SUS CORAZONES Y SUS EXPECTATIVAS REQUIEREN DE LA COMUNIÓN CON SUS SEMEJANTES EN ESPÍRITU Y VERDAD.

LIMA - PERÚ   DOMINGO 09 DE DICIEMBRE DEL 2018   MENSAJE # 2905

SEGUNDA DE JUAN 1-3.

"El anciano a la señora elegida y a sus hijos, a quienes yo amo en la verdad; y no sólo yo, sino también todos los que han conocido la verdad, a causa de la verdad que permanece en nosotros, y estará para siempre con nosotros. Sea con vosotros gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre en verdad y en amor".


=== Cuando los apóstoles sintetizan las verdades escriturales, y el panorama doctrinal, saben elegir los términos más apropiados para que sean recordados temáticamente los asuntos inherentes a la vida y la piedad. Lo simbólico y lo retórico podían embellecer, encubrir, simplificar o complicar aquello que se trataba. Así, pues, aunque ignoramos el porqué se llegó a encriptar la comunicación epistolar; fuera por prudencia, por algún riesgo, o por entenderse mejor, o por cualquier otro motivo; la figura familiar resultaba la más propicia y la más evidente. Así, el panorama de la autoridad era descrito por la expresión "El anciano", refiriéndose a Juan el apóstol como la autoridad espiritual más legitimada por su fluir, y por ser -al parecer- el último de los apóstoles del Cordero que quedara por aquel tiempo; constituyéndose en supremo garante de la verdad doctrinal que Jesús les impartiera, grabando en su corazón los puntos más gloriosos y específicos para mantener la familia de Dios unida en principios y prácticas; de allí la constante insistencia del hijo de Zebedeo para mencionar y rubricar aquellos signos vitales que confirmaran el fluir y desarrollo del panorama corporativo, y su mantenimiento en el concierto del tiempo, ligando los corazones de los creyentes en la verdad y el amor que son los principios permanentes y trascendentes que nos hacen la familia de Dios, guardando así nuestra identificación como hijos amados de un Padre que propuso el amor fraternal como el sello de nuestra bendita asociación con él, y que Juan repetirá continuamente, de modo que se perennice esa forma de pensar y esa permanente actitud que nos haga reconocernos mutuamente como redimidos e hijos de Dios.

=== La Señora elegida, es una directa referencia a la comunidad cristiana como una de las localidades o congregaciones que estuvieran ligadas a la autoridad espiritual pertinente, y que se condujeran correctamente para buscar y hallar el agrado divino. Al entender los principios y prácticas que rigen el divino fluir a nivel eclesial, lo que era algo que se mantenía como el fluir relacional corporativo, los ponía en evidencia. Y el amor fraternal, en lenguaje, en sentido y en intento, revelaba que todos pertenecían a la familia de Dios; y era sencillo confiar, dialogar, compartir y disfrutar, entre aquellos que no juzgaban por razas, colores, idiomas  formas de vestir, pronunciación, particularidades idiomáticas, etc.; compartiendo el pan y el vino, las oraciones intercesoras, las mutuas consolaciones, la solidaridad en momentos críticos, y la disposición para apoyar a los demás en cualquier circunstancia. La Iglesia local semejaba un  hogar en el que todos hallaban rápidamente una ubicación basada en su dotación y función, edificando, exhortando, consolando, y compartiendo la vida de Dios de una manera natural en un ambiente sobrenatural.


=== Los Hijos, eran el fruto del bendito obrar de las buenas nuevas de salvación, y en la medida en que cada uno fijara su posición en Dios, y a nivel corporativo, se podía compartir el espacio y el tiempo, la adoración y la alabanza, el gozo y la satisfacción, la bondad y el amor fraternal que todo lo tornara íntimo y lleno de unción. Y así como en las antiguas escuelas de profetas, donde todos estaban al día sobre lo que Dios haría, porque fluían en el mismo Espíritu; así también en cada localidad el pueblo era edificado, consolado y exhortado; alineándose con la Deidad en cuanto a ejecutar su voluntad y cubrir su propósito. Aquella armonía no era violentada, y siempre la visita apostólica suponía  un tiempo de gozo singular y de disfrute espiritual, pareciéndose el gozo al que experimentaba Israel en sus fiestas jubilares; y una semana continua de bendiciones, alabanzas, danzas y banquetes físicos y espirituales, ponía el gozo en los corazones de los asistentes, retornando a sus ubicaciones geográficas con un gozo que anhelaba la siguiente fiesta. El conocer la verdad (el haber penetrado en el correcto entendimiento respecto a lo que somos, tenemos y podemos como la familia de Dios) elevaba el nivel espiritual al máximo. Así, al permanecer en la verdad, el error, las contiendas, o la insanía de los renuentes y rebeldes, se desdibujaban en el horizonte espiritual, en el que el gozo del Señor prevalecía.


EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA    09/12/2018   MENSAJE # 2905.

1 comentario:

  1. LA UNIDAD CORPORATIVA TIENE UN SECRETO, Y ESO ES EL ANDAR EN LA VERDAD Y EL AMOR, HACIENDO LA VOLUNTAD DE DIOS, DEJANDO QUE ÉL NOS LLENE CON SU UNCIÓN, Y NOS HAGA SUS INSTRUMENTOS PARA BENDECIR AL GÉNERO HUMANO.

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