miércoles, 29 de junio de 2016

AQUELLOS QUE NO ESTÁN PLENAMENTE CONVENCIDOS DEL VALOR REAL Y TRASCENDENTE DEL EVANGELIO DEL REINO, SE SIENTEN CORTOS Y SE INHIBEN DE MANIFESTAR LA VIDA DE DIOS QUE LES FUERA IMPARTIDA, TEMIENDO LA BURLA, EL MENOSPRECIO Y EL RECHAZO DE LOS QUE MORIRÁN SIN ESPERANZA SI NO LES HABLAMOS DEL EVANGELIO. SI LA VERGÜENZA ES UN GIGANTE PARA TI, ES EL TIEMPO DE SACAR TU HONDA Y ABATIRLO POR LA FE EN QUE DIOS ESTÁ CONTIGO.

LIMA - PERÚ  MIÉRCOLES 29 DE JUNIO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA EPÍSTOLA DE PABLO A LOS ROMANOS

Romanos 1:16-17.

"Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá".

*** (Ro.1:16a) Mientras que para muchos su condición de creyentes es asumida como algo poco creíble, y hasta vergonzoso (que es la razón por la que callamos nuestra condición y posición como hijos de Dios); para Pablo era un motivo de gloria por su consciencia regia y su relación pactual, algo que progresa con pasmosa lentitud en muchos creyentes, y a veces, no llega nunca a calar en sus corazones, entrando en una pasividad que los deja mudos en lo concerniente a su fe testimonial. Por ello el apóstol arremete contra aquel vergonzoso sentimiento que nos anonada frente a los planos filosóficos, hipotéticos y ridículos, que los que no saben interpretan como sólida base de su ignorancia y estulticia... ¿vergüenza? La de ellos, por ser tan irreflexivos y apriorísticos.

*** (Ro.1:16b) El apóstol propone el evangelio como la fuente de poder que ejecuta la voluntad divina y nos salva de la condenación eterna, impartiéndonos su gracia como dádiva de amor que nos une a él en espíritu y verdad; que nos saca del oscurantismo y la intrascendencia, que es la esfera común de los que no lo conocen, o lo han desechado de su entorno, cual modernos gadarenos que le ruegan que se marche temiendo que todo cambie a la sazón divina ¡Ligaduras de impiedad! El poder de Dios, mediante el evangelio, es una solución total y final para los que son judíos, y para los que no lo son. La prioridad que señala a la necesidad del retorno de los judíos a la sazón divina, tiene que ver con la elección, y con el plano testimonial que expresara su llamamiento y singularidad, yendo al mundo gentil no exceptuándolos; sino usándolos como sus testigos, teniendo en ellos un ejemplo de gloria y honor, y no un motivo de vergüenza, como lo observará en los capítulos 2 y 3.

*** (Ro.1:17a) La observación paulina, en este verso en especial, nos comparte que en el evangelio se revela la justicia de Dios ¿Por qué tenía que ser revelada la JUSTICIA DE DIOS? Porque el entendimiento natural no basta para captarla, habiendo desdibujado de tal modo el sentido de la justicia, que se llama malo a lo bueno; y a lo bueno, malo (Is.5:20-24). Aquel que recibe la buena nueva de salvación en completa sencillez, no cuestiona a Dios; pero si quiere anteponer su propia justicia, rechazará la bondad divina, considerándola indigna de crédito o írrita. Esta revelación es por fe (la constante comunicación divina que penetra la dureza del corazón, llama a la reflexión, ilumina nuestro fuero interno renovando nuestra intención, y nos dispone para la tácita aceptación de la irrefutable verdad divinal); al penetrar en el mundo de la fe, ésta no concluye ni se extingue, sino que se extiende, y va forjando lo que vendrá con las sucesivas revelaciones que nos vendrán. 

*** Lo esencial del mundo nuevo, de la nueva naturaleza, sólo se sustenta con "aquel material" que Dios el Padre nos comparte a cada paso. Del modo en que un buzo ingresa al mar, premunido de su traje impermeable, y siéndole insuflado el oxígeno desde el exterior a través de su escafandra, y va ejecutando en las profundidades sus labores de búsqueda o recolección, y cosas así; emerge luego a la nave que lo trajo, y al despojarse de su traje de buzo, vemos que él se mantiene seco, porque el agua nunca lo tocó a él, sino al "traje de fe", que lo contactara y lo aislara al mismo tiempo. El mundo o esfera de la fe es similar,  pues nos une a Dios, y nos separa de lo meramente secular, andando en el Espíritu. Tal efecto de la gloria que el Padre nos impartió no cambia jamás, pues es POR FE (así se inicia), y PARA FE (así persiste manteniéndonos en la celeste esfera aunque habitemos la pedestre). Ni nuestro lenguaje ni nuestra actitud deben sufrir variantes, manteniéndonos firmes y sin fluctuar en la profesión o confesión de nuestra esperanza (He.6:7,9-11).


***(Ro.1:17b) Y Pablo refrenda el hecho de que está escrito, y no puede ser modificado ni cambiado, que: "MAS EL JUSTO POR LA FE VIVIRÁ". No es, pues, un concepto prevalente en la mente; sino un estilo de vida, una forma de obrar que honra a Dios en principios y prácticas, en sentido y perspectiva. Una continuidad sin pausa en el hablar divino y el oír humano, implementa aquello que cobrará forma en este mundo tridimensional, trayendo de la esfera invisible lo que se hará tangible para cubrir el propósito eternal (He.11:1-3). Esta bendita constante ha de operar en el lenguaje y el accionar de los elegidos de Dios durante todo el trámite de nuestra peregrinación, hasta que lleguemos a la tierra de promisión. Nada es más real que lo que Dios va diciendo y los cristianos haciendo por la fe. Si no estás en la fila, únete a ella de una buena vez.


EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   29/06/2016

2 comentarios:

  1. LA IMPORTANCIA Y RELEVANCIA DE LA FE EN LO CONCERNIENTE AL TESTIMONIO CRISTIANO. LA IMPERATIVA NECESIDAD DE NO AVERGONZARNOS DE AQUELLO QUE ES NUESTRA GLORIA, Y QUE MARCA LA DIFERENCIA ENTRE NOSOTROS Y LOS QUE NO CONOCEN A DIOS. LA IMPORTANCIA DE VIVIR POR LA FE, Y DE AFERRARNOS A ELLA.

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  2. La vida de fe es nuestro nuevo estilo de vida, al vivir por fe entramos al mundo sobrenatural divino, traemos los poderes del siglo venidero al mundo natural por medio de la fe, aunque estamos en el mundo no somos de este mundo. Gracias hermano Efraín por tan puntual ministración.

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