viernes, 10 de junio de 2016

EL CONSEJO APOSTÓLICO ABARCA DIVERSAS ÁREAS, DESDE LA ESPIRITUAL COMPLETA, ENTRE NUESTRA SALVACIÓN Y NUESTRA HERENCIA; COMO TAMBIÉN LA DEL PANORAMA ECLESIAL A NIVEL DOTACIONAL, Y A LO QUE ES CONFORME AL PANORAMA FRATERNO, AUN EN MEDIO DE LA AFLICCIÓN Y EL SUFRIMIENTO COMO "GAJES DEL OFICIO".

LIMA - PERÚ  VIERNES 10 DE JUNIO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PEDRO

Primera de Pedro 4:7-13.

"Mas el fin de todas las cosas se acerca, sed, pues, sobrios, y velad en oración. Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados. Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones. Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da; para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenece la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los sufrimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría".

*** En los corazones de los apóstoles estaban siempre presentes la muerte, sepultación y resurrección del Señor Jesús; la presencia del Espíritu Santo, y el hecho de la venida del Señor como una realidad existencial y vivencial; y siempre que escribían a los santos, estas premisas gobernaban sus mentes, e inspiraban su pluma hagiográfica. Pedro no estaba exento de ello, y sus misivas a los santos estaban provistas de este cuadro histórico-profético que les hacía vivir al día con el divino palpitar de las rhemas que brotaran del Logos de la Palabra. ¿Y cuál era el consejo para los santos de todo tiempo? La sobriedad (el equilibrio en su forma de ser y su estilo de vida como hijos de Dios), y el velar en oración (asumiendo la necesidad de un continuo contacto con la Deidad para una total disposición que los hiciera aptos para participar en todo lo inherente a los asuntos regios).

*** Al pasar a la voz media (el interín entre la promesa y el cumplimiento que demanda el estar listos siempre), estaba la preservación del fervor o ardiente celo a nivel fraterno primero, y el de ser un testigo útil para Dios ante los que no le conocen. Esta premisa que también menciona Santiago, nos hace conscientes de cómo el amor es capaz de cubrir las faltas de otros para tornar a éstos a la comunión corporativa con una mejor actitud. Hemos de procurar que nuestro amor propio deseche el reclamo, la queja o el rencor de acción retardada. También el apóstol anima a recibir a otros en su hogar, y en sus corazones, sin ser suspicaces, ni verlos como si fueran el enemigo.

*** Nuestras dotaciones deben estar al servicio de los demás de acuerdo con la naturaleza de las mismas. Nuestra ministración debe ceñirse y limitarse a lo que posee como su divina esencia, para que nuestras intervenciones sean de valor debido a su celeste revestimiento. Así, habremos de comunicar lo que Dios nos inspira; y si ministramos, al estar dirigidos por el Espíritu, no seremos intrusos, impartiendo lo que Dios nos da, permitiendo que la gloria divina se exprese en todo lo que hacemos, dejando el resultado al Señor. También, Pedro nos aconseja respecto a los tiempos de aflicción, pidiendo que no nos turbemos por ninguna experiencia negativa, ni nos acobardemos frente a ello, pues todo ello estaba incluido en el plan divinal, y el diablo no se iba a dejar despojar tan fácilmente de lo que fuera su haber a nivel humano, y aquellos que han sido participantes dentro de un panorama de comodidades y dichas; no esperan un revés o un chasco, pensando que nuestra peregrinación a la gloria la hacemos en palanquines cargados por los más aptos, o los más desadaptados ¡Por Dios!


*** Aquellos que asisten al teatro de la guerra, y esperan ganarla sin ensuciarse la ropa, sin estar en la trinchera, sin eventuales rozones, o alguna granada que te deja un recuerdo, o sin despeinarse; no entendieron para qué fueron llamados. Las persecuciones, las heridas, y las tragedias, componen parte de nuestra historia como cristiana militancia, y las cicatrices no son algo que nos incomode, sino los galones ganados uno a uno,y que certifican que estuvimos allí, en lo más bravo de la guerra. Que los camarógrafos no lo hayan captado no te debe herir, ¡Dios lo ha visto, y te compensará!


EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   10/06/2016

1 comentario:

  1. EL PANORAMA INTEGRACIONAL DE LA IGLESIA CRISTIANA NOS LLAMA A ESTAR ATENTO AL CONSEJO APOSTÓLICO DADO POR PEDRO APÓSTOL; SI REALMENTE QUEREMOS SER EDIFICADOS, EXHORTADOS Y CONSOLADOS, HEMOS DE OBEDECER A LAS DIVINAS INSTANCIAS, Y DESHACERNOS DE TODO LO QUE NOS ESTORBA PARA SER UNA BENDICIÓN CORPORATIVA. ¡HAGÁMOSLO ASÍ!

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