lunes, 13 de junio de 2016

LA NATURALEZA PATERNAL APOSTÓLICA, SE HACE PRESENTE PARA IMPARTIR LAS SANAS RECOMENDACIONES PEDRINAS PARA MANTENER LA FIDELIDAD CRISTIANA DENTRO DEL PLANO DE LA OBEDIENCIA. HACE TAMBIÉN SOLEMNES ADVERTENCIAS SOBRE LO QUE ES LA LUCHA CONTRA EL ENEMIGO DE NUESTRAS ALMAS, Y LA IMPORTANCIA DE NUESTRA DEDICACIÓN A LAS COSAS DIVINAS. ÉL TAMBIÉN AUTENTICA LA VERDAD DE LA GRACIA COMO UN FUNDAMENTO INVARIABLE E INAMOVIBLE EN EL QUE VALE LA PENA PERSISTIR HASTA LA VENIDA DEL SEÑOR.

LIMA - PERÚ  LUNES 13 DE JUNIO DEL 2016

COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PEDRO

Primera de Pedro 5:8-14.

"Sed sobrios, y velad, porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfecciones, afirme, fortalezca y establezca. A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. Por conducto de Silvano, a quien tengo por hermano fiel, os he escrito brevemente, amonestándoos, y testificando que ésta es la verdadera gracia de Dios, en la cual estáis. La iglesia que está en Babilonia, elegida juntamente con vosotros, y Marcos mi hijo, os saludan. Saludaos unos a otros con ósculo de amor. Paz sea con todos vosotros los que estáis en Jesucristo. Amén".

*** (1P.5:8) Después de animar y exhortar a los santos a que se mantengan dentro del orden divinal para su propia seguridad, reposando en la fidelidad del Señor para guardarnos de todo mal, nos recomienda que seamos muy serenos y equilibrados, y que también nos mantengamos atentos a las artimañas y subterfugios del enemigo, al cual describe como un león furioso, rugiente y rondante, que busca a su presa, a su próxima víctima, buscando intimidarla para que salga de su seguridad, y salga a darse una vuelta por el mundo, a saborear su oropel, y a convertirse en parte de su menú al salir de su cobertura divinal, y exponerse al no andar dentro de su escudo sobrenatural de la comunión corporativa. Si nos preguntamos dónde está el límite o frontera demarcatoria que supone nuestra seguridad; está en la obediencia continua a lo que Dios ya especificara como zona de seguridad y preservación. Tú desobedeces, y el enemigo sale de su escondite, y te devora; tú obedeces, y el enemigo desaparece de tu horizonte, pues él está vedado de andar por donde tú circulas para la gloria de Dios (Job 28:6-8).

*** (1P.5:9) Aquellos que se asumen como víctimas del enemigo, son los que se negaron a resistir firmes en la fe al engañador y embaucador, e inventor de disculpas, y amigo de la autojustificación con excusas pueriles: ¡No me di cuenta! ¡Fue sin querer! ¿Qué tiene de malo?, etc. Hemos de acotar también que no eres el único sufriente, porque los mismos padecimientos se cumplen también en nuestros hermanos en todo el mundo. No es que el diablo sea falto de originalidad, sino que tiene claro el plano de nuestra vulnerabilidad en su triple faceta: Deseos de la carne, deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida (1Jn.2:15-17, 16e); ¡No lo culpemos por ser nosotros tan predecibles!

*** (1P.5:10) Pedro, al igual que Juan, nos revela la gracia divina en múltiples manifestaciones, refiriéndose al Padre como el Dios de toda gracia, la que componía un llamamiento a la gloria eternal en Jesucristo (Ef.1:6), y no como entidades independientes con glorias individuales; nos advierte que habrán aflicciones temporales de distintos niveles dentro de sus cuatro objetivos, a saber: 
(I) Nuestra perfección (lo que implica un trabajo continuo, dedicado y selectivo con miras a hacer de nosotros las piedras labradas que componen el templo del Señor, según 1R.6:7);
(II) El afirmado (el darnos una ubicación específica segúnn nuestro diseño, dotación o virtud, de modo que podamos acoplarnos el uno al otro, sin rozamientos innecesarios, ni arreglos de última hora);
(III) El fortalecimiento ( al ubicarnos en línea con su propósito, impartiéndonos la medida y el grosor necesarios para soportar la fase del acoplamiento, y soportar el peso que será puesto encima de nosotros, lo cual supone nuestra gloria);
(IV) El establecimiento (hablando de la fijación posicional y proporcional, manteniendo un todo simétrico y coherente con lo que Dios previera establecer y perennizar).

*** (1P.5:11) Cuando Pedro menciona la gloria, habla del esplendor de lo que se forjara; y cuando refiere el imperio, indica la exhalación de su soberanía y poder en todas las latitudes y longitudes, abarcándolo todo por la suma de las partes bajo su dominio y control eternal. La expresión: "Por los siglos de los siglos" es la forma hebraica de describir la eternidad.

*** (1P.5:12) La despedida apostólica, con sus finales salutaciones, menciona a Silvano (referido en 1 y 2 de Tesalonicenses); y señala que Pedro que hizo una apretada síntesis, amonestando a los santos, y testificando de la autenticidad de la gracia en la que ellos fluían, asegurando la certeza de su fe, y el que hacían bien al mantenerse dentro de la misma. Luego, vendrían los saludos de la iglesia que estaba en Babilonia, y los de Marcos, a quien Pedro trata como su hijo. A continuación, Pedro sugiere el saludo que Pablo sancionara tiempo atrás, solicitando que los santos se saluden con un ósculo de amor. El apóstol solicita al Padre que inunde a los destinatarios con su inefable paz, despidiéndose con un rotundo amén.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA  13/06/2016.

1 comentario:

  1. LA NATURALEZA PREVENTIVA DE LOS CONSEJOS DEL APÓSTOL PEDRO, PONÍAN EN ANTECEDENTES A LOS SANTOS DE AQUELLA Y DE TODAS LAS ÉPOCAS SOBRE LOS ATAQUES Y LAS ACECHANZAS DEL ENEMIGO; DE NUESTRA SEGURIDAD, Y LA NECESIDAD DE MANTENERNOS A BUEN RECAUDO OBEDECIENDO LA VOLUNTAD DIVINA. SIGAMOS EL CONSEJO APOSTÓLICO PARA LA PRESERVACIÓN DE NUESTRAS VIDAS Y POR NUESTRA SEGURIDAD CRONOLÓGICA.

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