LIMA - PERÚ MARTES 26 DE ENERO DEL 2016
COMENTARIO EXEGÉTICO DE LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL PABLO A LOS TESALONICENSES.
Primera de Tesalonicenses 4:1-5.
"Por lo demás, hermanos, os rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que aprendisteis de nosotros cómo os conviene conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más. Porque ya sabéis qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús; pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor; no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios".
*** Pasando del plano romántico, y siendo consolados por las buenas noticias traídas desde Tesalónica, el apóstol Pablo pasa al plano personal de la vida cristiana en lo concerniente al área de la santificación, que nos pondrá en antecedentes sobre la esfera relacional con el Señor en cuanto a los asuntos eternos. Cuando el amor madura, se pasa al ámbito de las tratativas con la pareja, y la dulzura del ayer, con sus ilusiones y su deseo de estar juntos, abordan la vida de consortes como una unidad binaria, donde lo más poderoso que tiene el binomio romántico es saber moverse en armonía, como una unidad binaria que busca mutuamente la satisfacción del otro.
*** El apóstol hace ver la conveniencia de estar unidos en los principios que adornan a la familia de Dios, comprendiendo que el espíritu fraterno debe presidir cada acción e intento, por el hecho de ser una unidad en Cristo, un cuerpo de muchos miembros que, comprendiendo cada aspecto de su llamamiento, prodiga su dotación en favor de los demás, inhibiendo cualquier intento de figurar o creerse el eje alrededor del cual todo gira. La conducta paulina, obedecía a una ética, y ésta tenía como premisa el agrado divino, el apego lineal a lo ordenado por la Deidad para el mantenimiento de la comunión en el más alto nivel, haciendo de esta ética un ESTILO DE VIDA, UNA IDENTIDAD QUE RESPONDA A LA NATURALEZA INJERIDA.
*** Cuando escuchamos decir a nuestros hermanos sobre qué deben hacer para conocer la voluntad de Dios, nos sentimos cortos para responderles y hacerlos entender sobre el particular, y el apóstol nos da una respuesta: "He aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios, Y CONOCES SU VOLUNTAD, E INSTRUIDO POR LA LEY APRUEBAS LO MEJOR" (Ro.2:17-19). No hay secreto en cuanto a esto. Si queremos saber la voluntad de Dios, hemos de ser instruidos por la Palabra, y esto es algo a lo que debemos dedicarnos, buscando que a través de la sana enseñanza obtengamos una sana doctrina, y un sano proceder que demuestre lo atentos que estamos a la guianza divina, y que nuestros corazones están dispuestos a obedecerla en todo trance.
*** No hay nada mágico ni instantáneo, y lo que más odia el inmediatista es tener que progresar lentamente, hasta que la realidad de lo enseñado se haya constituido en nuestro principio, nuestra forma de pensar, hablar y obrar. Una conducta arreglada a la voluntad divina destacará nuestro celo por la obra divinal, cuya objetividad es el reino, y Pablo arguye la necesidad de abundar en ello más y más; refiriendo que recordaran lo que se les había impartido, así en palabras como en el ejemplo, y comienzan las instrucciones:
*** La VOLUNTAD DE DIOS ES VUESTRA SANTIFICACIÓN.- No nos sintamos en manera alguna desorientados. Pablo apunta a la pureza moral y estructural (porque la gente helenista era muy dada a una vida liberal en lo concerniente a lo sexual, siendo promiscuos, degenerados, incestuosos y licenciosos; mancillando así sus relaciones conyugales sin ceremonias de por medio). Yo sé que mis lectores no son así, pero en otros lugares sí son así. Y es aquella liviandad tan típica en tantos lugares, la que hace colapsar el panorama espiritual de la familia de Dios, la misma que no puede existir sin una perspectiva clara de lo que el sagrado matrimonio es. Las fornicaciones deben ser apartadas. rechazadas, aborrecidas y arrojadas del pueblo de Dios. Toda pareja conyugal debe arreglar su condición y situación para santificarse ellos, y a su prole ya que Dios nos dice: "Porque como pecado de adivinación es la rebelíon, y como ídolos e idolatría la obstinación" (1S.15:23), y: "Fornicación, vino y mosto quitan el juicio" (Os.4:11).
*** El apóstol refiere que cada uno de nosotros debe tener a su propia esposa en santidad y honor; no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios (1Ts.4:4). Una perspectiva que animaliza la relación de una pareja conyugal los hace verse como aquellos que se dan gusto con el otro, que disfrutan una "vida sin ataduras", y sólo de placer sensual, hasta que éste se gaste o se acabe. Allí, ni la santidad (en lo referente a su relación espiritual con el Señor) ni el honor (respeto, afecto y reconocimiento ante los demás como gente unida en el Señor), tienen existencia o vigencia, pensando que tal hecho es irrelevante...¡Grave, grave error!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 26/01/2016
*** Pasando del plano romántico, y siendo consolados por las buenas noticias traídas desde Tesalónica, el apóstol Pablo pasa al plano personal de la vida cristiana en lo concerniente al área de la santificación, que nos pondrá en antecedentes sobre la esfera relacional con el Señor en cuanto a los asuntos eternos. Cuando el amor madura, se pasa al ámbito de las tratativas con la pareja, y la dulzura del ayer, con sus ilusiones y su deseo de estar juntos, abordan la vida de consortes como una unidad binaria, donde lo más poderoso que tiene el binomio romántico es saber moverse en armonía, como una unidad binaria que busca mutuamente la satisfacción del otro.
*** El apóstol hace ver la conveniencia de estar unidos en los principios que adornan a la familia de Dios, comprendiendo que el espíritu fraterno debe presidir cada acción e intento, por el hecho de ser una unidad en Cristo, un cuerpo de muchos miembros que, comprendiendo cada aspecto de su llamamiento, prodiga su dotación en favor de los demás, inhibiendo cualquier intento de figurar o creerse el eje alrededor del cual todo gira. La conducta paulina, obedecía a una ética, y ésta tenía como premisa el agrado divino, el apego lineal a lo ordenado por la Deidad para el mantenimiento de la comunión en el más alto nivel, haciendo de esta ética un ESTILO DE VIDA, UNA IDENTIDAD QUE RESPONDA A LA NATURALEZA INJERIDA.
*** Cuando escuchamos decir a nuestros hermanos sobre qué deben hacer para conocer la voluntad de Dios, nos sentimos cortos para responderles y hacerlos entender sobre el particular, y el apóstol nos da una respuesta: "He aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios, Y CONOCES SU VOLUNTAD, E INSTRUIDO POR LA LEY APRUEBAS LO MEJOR" (Ro.2:17-19). No hay secreto en cuanto a esto. Si queremos saber la voluntad de Dios, hemos de ser instruidos por la Palabra, y esto es algo a lo que debemos dedicarnos, buscando que a través de la sana enseñanza obtengamos una sana doctrina, y un sano proceder que demuestre lo atentos que estamos a la guianza divina, y que nuestros corazones están dispuestos a obedecerla en todo trance.
*** No hay nada mágico ni instantáneo, y lo que más odia el inmediatista es tener que progresar lentamente, hasta que la realidad de lo enseñado se haya constituido en nuestro principio, nuestra forma de pensar, hablar y obrar. Una conducta arreglada a la voluntad divina destacará nuestro celo por la obra divinal, cuya objetividad es el reino, y Pablo arguye la necesidad de abundar en ello más y más; refiriendo que recordaran lo que se les había impartido, así en palabras como en el ejemplo, y comienzan las instrucciones:
*** La VOLUNTAD DE DIOS ES VUESTRA SANTIFICACIÓN.- No nos sintamos en manera alguna desorientados. Pablo apunta a la pureza moral y estructural (porque la gente helenista era muy dada a una vida liberal en lo concerniente a lo sexual, siendo promiscuos, degenerados, incestuosos y licenciosos; mancillando así sus relaciones conyugales sin ceremonias de por medio). Yo sé que mis lectores no son así, pero en otros lugares sí son así. Y es aquella liviandad tan típica en tantos lugares, la que hace colapsar el panorama espiritual de la familia de Dios, la misma que no puede existir sin una perspectiva clara de lo que el sagrado matrimonio es. Las fornicaciones deben ser apartadas. rechazadas, aborrecidas y arrojadas del pueblo de Dios. Toda pareja conyugal debe arreglar su condición y situación para santificarse ellos, y a su prole ya que Dios nos dice: "Porque como pecado de adivinación es la rebelíon, y como ídolos e idolatría la obstinación" (1S.15:23), y: "Fornicación, vino y mosto quitan el juicio" (Os.4:11).
*** El apóstol refiere que cada uno de nosotros debe tener a su propia esposa en santidad y honor; no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios (1Ts.4:4). Una perspectiva que animaliza la relación de una pareja conyugal los hace verse como aquellos que se dan gusto con el otro, que disfrutan una "vida sin ataduras", y sólo de placer sensual, hasta que éste se gaste o se acabe. Allí, ni la santidad (en lo referente a su relación espiritual con el Señor) ni el honor (respeto, afecto y reconocimiento ante los demás como gente unida en el Señor), tienen existencia o vigencia, pensando que tal hecho es irrelevante...¡Grave, grave error!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 26/01/2016
LA GLORIOSA VENTURA DE LAS BUENAS NUEVAS DE TESALÓNICA, NO DEBEN TENER NINGÚN CORTINADO QUE LA OCULTE; SINO MÁS BIEN UN PLANO DE SANTIFICACIÓN QUE LA BENDIGA Y LA HONRE COMO UNA REALIDAD QUE CORONA A LA IGLESIA DE DIOS, PURIFICÁNDOSE INTEGRALMENTE.
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