LIMA - PERÚ DOMINGO 20 DE MARZO DEL 2016
COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO A LOS HEBREOS.
Hebreos 2:1-4.
"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Porque si la palabra dicha por los ángeles fue firme, y toda trasngresión y desobediencia recibió justa retribución, ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad".
*** El salto hacia la valoración de la vida impartida por el Señor, es impresionante; ¿por qué el autor hace esto? Para que entendamos que como ciudadanos de dos campamentos; debemos analizar concienzudamente nuestra participación en la obra regia como coprotagonistas; y no como meros observadores. El campo histórico tiene que ver con fechas, tiempos y circunstancias; pero el panorama profético nos transmite un género de vida que tiene que alimentarse y evidenciarse, con la mira de perennizarse. La espiritualidad, no es religiosidad de orden eventual; sino estilo de vida, aplicando los principios divinos en todo lo que pensamos, decimos y hacemos.
*** Estar enterado no es lo mismo que saber; el mirar excitados, no es lo mismo que experimentar, pasando de la hipótesis a la tesis; de lo teórico, a lo práctico. Si sólo aprendemos para recordar eventualmente, o para que se nos dé un certificado de asistencia, precarios creyentes seremos; nuestra mira, al entrenarnos como soldados, es el aprender a hacer la guerra, pudiendo adquirir una veteranía por nuestra suficiencia, y determinadas preseas por el valor mostrado durante el trámite de la misma. El prestar atención a la enseñanza, y el conocer a cabalidad lo que ha de hacerse, y el cómo enfrentar al enemigo, es el fruto de haber focalizado nuestros esfuerzos, entendiendo y reteniendo cada detalle que le añada vida a nuestra existencia; ello hará que no nos deslicemos en nuestro andar, y que lleguemos a la meta con los méritos del caso.
*** Tornando al punto del mundo y del panorama angelical, el autor nos recuerda que cada palabra que brotara de los asignados ángeles en épocas pasadas, tuvo su exacto cumplimiento, porque ellos eran conscientes que laboraban para la Deidad, y que Dios no es mentiroso, el diablo sí. De modo análogo, al traer el mensaje ungido en las bocas de sus escogidos, se nos adelantaba el panorama célico-pedestre pertinente, haciéndonos responsables por nuestra actitud hacia ello. La firmeza de las promesas en las bocas de los ángeles, llevaba el sello de lo divino, siendo ellos sus más cercanos referentes, y sus comunicadores para la creación primigenia, y para el género humano. La certeza de lo dicho, y del Inspirador de lo dicho, ponia todo en claro, y nada en duda, estando al tanto de lo predeterminado por el Padre, y ejecutándolo cumplidamente. Así fue que toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución.
*** Otra vez el autor lo aplica a nuestra experiencia, haciéndonos ver el valor intrínseco de los valores que se nos otorgaran, los cuales debían ser estimados en su exacta validez por cada hijo de Dios. La salvación se asume como una realidad que el mismo Jesús nos compartiera mediante su gracia, corroborando la misma aquellos que fueran elegidos como los apóstoles del Cordero. Trabajando sobre la base de ese amor declarado por la Deidad, y por las señales hechas por los coadjutores divinos en sus ministraciones, debemos vernos seguros y persuadidos en el obrar del Padre, observando que todo lo revelado por la Deidad debe ser refrendado por los que laboran para él, con las señales, prodigios y milagros que les eran propios, así como los repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad tal como Pablo lo refiriera al escribirle a los corintios.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 20/03/2016
*** Estar enterado no es lo mismo que saber; el mirar excitados, no es lo mismo que experimentar, pasando de la hipótesis a la tesis; de lo teórico, a lo práctico. Si sólo aprendemos para recordar eventualmente, o para que se nos dé un certificado de asistencia, precarios creyentes seremos; nuestra mira, al entrenarnos como soldados, es el aprender a hacer la guerra, pudiendo adquirir una veteranía por nuestra suficiencia, y determinadas preseas por el valor mostrado durante el trámite de la misma. El prestar atención a la enseñanza, y el conocer a cabalidad lo que ha de hacerse, y el cómo enfrentar al enemigo, es el fruto de haber focalizado nuestros esfuerzos, entendiendo y reteniendo cada detalle que le añada vida a nuestra existencia; ello hará que no nos deslicemos en nuestro andar, y que lleguemos a la meta con los méritos del caso.
*** Tornando al punto del mundo y del panorama angelical, el autor nos recuerda que cada palabra que brotara de los asignados ángeles en épocas pasadas, tuvo su exacto cumplimiento, porque ellos eran conscientes que laboraban para la Deidad, y que Dios no es mentiroso, el diablo sí. De modo análogo, al traer el mensaje ungido en las bocas de sus escogidos, se nos adelantaba el panorama célico-pedestre pertinente, haciéndonos responsables por nuestra actitud hacia ello. La firmeza de las promesas en las bocas de los ángeles, llevaba el sello de lo divino, siendo ellos sus más cercanos referentes, y sus comunicadores para la creación primigenia, y para el género humano. La certeza de lo dicho, y del Inspirador de lo dicho, ponia todo en claro, y nada en duda, estando al tanto de lo predeterminado por el Padre, y ejecutándolo cumplidamente. Así fue que toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución.
*** Otra vez el autor lo aplica a nuestra experiencia, haciéndonos ver el valor intrínseco de los valores que se nos otorgaran, los cuales debían ser estimados en su exacta validez por cada hijo de Dios. La salvación se asume como una realidad que el mismo Jesús nos compartiera mediante su gracia, corroborando la misma aquellos que fueran elegidos como los apóstoles del Cordero. Trabajando sobre la base de ese amor declarado por la Deidad, y por las señales hechas por los coadjutores divinos en sus ministraciones, debemos vernos seguros y persuadidos en el obrar del Padre, observando que todo lo revelado por la Deidad debe ser refrendado por los que laboran para él, con las señales, prodigios y milagros que les eran propios, así como los repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad tal como Pablo lo refiriera al escribirle a los corintios.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 20/03/2016
CADA ASPECTO RELACIONADO CON EL FLUIR DE LOS ÁNGELES, ES COTEJADO AL LADO DEL ACCIONAR DE LOS SANTOS EN EL PLANO DE LAS EDADES. SIEMPRE EL ORDEN DIVINO LLEVÓ A LOS EJÉRCITOS DEL SEÑOR A PROCEDER DE ACUERDO A LO ORDENADO POR ÉL, EJECUTANDO SU VOLUNTAD CON AUTORIDAD Y PODER, Y OBTENIENDO LOS RESULTADOS APETECIDOS EN EL TRÁMITE DE LAS EDADES.
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