LIMA - PERÚ MARTES 19 DE JUNIO DEL 2018 MENSAJE # 2557
SALMO 36:1-4.
"La iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos. Se lisonjea, por tanto, en sus propios ojos, de que su iniquidad no será hallada y aborrecida. Las palabras de su boca son iniquidad y fraude. Ha dejado de ser cuerdo y de hacer el bien. Medita maldad sobre su cama. Está en camino no bueno, el mal no aborrece".
=== La descripción de la naturaleza del hombre inicuo que hace aquí el rey David, debe hablarnos al corazón, y ponernos en antecedentes sobre la forma de pensar y actuar de los hombres perversos. En la mentalidad de los malvados, son las capacidades o habilidades que hayan desarrollado los más aptos, lo que les da derecho a explotar a los desadaptados o menos afortunados, forjando la perspectiva platónica de que el mundo se divide en genios y esclavos, y los pensantes usarán a estos últimos del modo que más les convenga, dejándolos subsistir para disfrutar de todas las cosas mientras le arrojen unos mendrugos que sacien su hambre y cubran sus ojos con su política de pan y circo, clásicos de la antigua Grecia y de Roma. Si tocamos el aspecto de la maldad repetitiva o iniquidad que solemos ver cada día en los aspectos políticos, sociales, económicos y religiosos, no hay forma de descalificar esta observación davídica, trayendo a su mente esta convicción: NO HAY TEMOR DELANTE DE SUS OJOS. Y es así que el perverso de corazón maquina siempre sus pensamientos inicuos, fortaleciendo sus intentos con el absurdo de que sus maldades no serán halladas, juzgadas ni condenadas, y que el triunfo del mal es el principio que rige el universo de papel que ellos crearan para sí. Todas las dictaduras aparejan las cosas para que todo salga a su sazón, tomando las prescripciones del caso por si algo saliera mal. Es por eso que en el plano o panorama político de las naciones se asumen los pros y contras, los éxitos y los déficits; el auge y la escasez, que lleguen a converger en un solo punto: La conveniencia. Cualquier estropicio ha de ser considerado como daño colateral, o pérdidas minoritarias previsibles que serán asumidas como un mal necesario en aras del progreso y el éxito.
=== Si observamos a los gobiernos y a sus representantes, legítimamente elegidos democráticamente, con aquellos que fueran puestos como opciones por los medios informáticos, o por el exagerado populismo ponderado siempre por la gente no pensante sujeta a ilusiones y quimeras que fueran ofrecidas por los candidatos; eso es político, terrenal y temporal. Pero cuando arribamos al plano espiritual que ha de perpetuarse, no hay mucha diferencia. Y es el mismo pensamiento el que emerge en los corazones malvados, quienes velados por el dios de este siglo asumen seguir su línea de acción, pretendiendo mantenerse en el dominio para siempre; aunque sepan que hay un final predeterminado por la Deidad que no puede ignorarse, que es un tema que nunca tratan con sus esbirros y tontos útiles, desapareciendo cuando llegue el momento de dar la cara y afrontar la crisis, y todos loa gobernantes salientes ya emigraran al extranjero, donde no haya extradición; sintiéndose a salvo porque tienen todo colocado en los paraísos fiscales, o a nombres de testaferros que le devolverán el íntegro de sus robos y estafas al mayor nivel.
=== Las bocas llenas de iniquidades y fraudes, no analizan con cordura el juicio que se les vendrá. Y aquel Dios en quien no creen hará justicia y juicio en cuanto lo considere oportuno, y cuando la maldad haya subido de punto, la muy pesada mano de Dios se hará notoria sobre toda la maldad que ejecutaran los malvados, haciéndoles ver lo inmenso de su locura, y que el Dios Soberano sigue siendo él. Dios hará pasar sus siete tiempos sobre los Nabucodonosores seculares de todas las generaciones hasta que reconozcan que él es quien pone y quita reyes, y quien ubica a quien él quiere en el poder, y que es aquel que humilla a todos los que proceden con soberbia (Dn.4:34-37).
"La iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos. Se lisonjea, por tanto, en sus propios ojos, de que su iniquidad no será hallada y aborrecida. Las palabras de su boca son iniquidad y fraude. Ha dejado de ser cuerdo y de hacer el bien. Medita maldad sobre su cama. Está en camino no bueno, el mal no aborrece".
=== La descripción de la naturaleza del hombre inicuo que hace aquí el rey David, debe hablarnos al corazón, y ponernos en antecedentes sobre la forma de pensar y actuar de los hombres perversos. En la mentalidad de los malvados, son las capacidades o habilidades que hayan desarrollado los más aptos, lo que les da derecho a explotar a los desadaptados o menos afortunados, forjando la perspectiva platónica de que el mundo se divide en genios y esclavos, y los pensantes usarán a estos últimos del modo que más les convenga, dejándolos subsistir para disfrutar de todas las cosas mientras le arrojen unos mendrugos que sacien su hambre y cubran sus ojos con su política de pan y circo, clásicos de la antigua Grecia y de Roma. Si tocamos el aspecto de la maldad repetitiva o iniquidad que solemos ver cada día en los aspectos políticos, sociales, económicos y religiosos, no hay forma de descalificar esta observación davídica, trayendo a su mente esta convicción: NO HAY TEMOR DELANTE DE SUS OJOS. Y es así que el perverso de corazón maquina siempre sus pensamientos inicuos, fortaleciendo sus intentos con el absurdo de que sus maldades no serán halladas, juzgadas ni condenadas, y que el triunfo del mal es el principio que rige el universo de papel que ellos crearan para sí. Todas las dictaduras aparejan las cosas para que todo salga a su sazón, tomando las prescripciones del caso por si algo saliera mal. Es por eso que en el plano o panorama político de las naciones se asumen los pros y contras, los éxitos y los déficits; el auge y la escasez, que lleguen a converger en un solo punto: La conveniencia. Cualquier estropicio ha de ser considerado como daño colateral, o pérdidas minoritarias previsibles que serán asumidas como un mal necesario en aras del progreso y el éxito.
=== Si observamos a los gobiernos y a sus representantes, legítimamente elegidos democráticamente, con aquellos que fueran puestos como opciones por los medios informáticos, o por el exagerado populismo ponderado siempre por la gente no pensante sujeta a ilusiones y quimeras que fueran ofrecidas por los candidatos; eso es político, terrenal y temporal. Pero cuando arribamos al plano espiritual que ha de perpetuarse, no hay mucha diferencia. Y es el mismo pensamiento el que emerge en los corazones malvados, quienes velados por el dios de este siglo asumen seguir su línea de acción, pretendiendo mantenerse en el dominio para siempre; aunque sepan que hay un final predeterminado por la Deidad que no puede ignorarse, que es un tema que nunca tratan con sus esbirros y tontos útiles, desapareciendo cuando llegue el momento de dar la cara y afrontar la crisis, y todos loa gobernantes salientes ya emigraran al extranjero, donde no haya extradición; sintiéndose a salvo porque tienen todo colocado en los paraísos fiscales, o a nombres de testaferros que le devolverán el íntegro de sus robos y estafas al mayor nivel.
=== Las bocas llenas de iniquidades y fraudes, no analizan con cordura el juicio que se les vendrá. Y aquel Dios en quien no creen hará justicia y juicio en cuanto lo considere oportuno, y cuando la maldad haya subido de punto, la muy pesada mano de Dios se hará notoria sobre toda la maldad que ejecutaran los malvados, haciéndoles ver lo inmenso de su locura, y que el Dios Soberano sigue siendo él. Dios hará pasar sus siete tiempos sobre los Nabucodonosores seculares de todas las generaciones hasta que reconozcan que él es quien pone y quita reyes, y quien ubica a quien él quiere en el poder, y que es aquel que humilla a todos los que proceden con soberbia (Dn.4:34-37).
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 19/06/2018 MENSAJE # 2557
AUNQUE LA MALDAD SUEÑE Y DELIRE EN LO TOCANTE A SU DESTINO, ADUCIENDO QUE DIOS NO HARÁ NADA, O QUE ES INEXISTENTE; SE ENGAÑA A SÍ MISMA, HABIENDO DE RECIBIR LA RETRIBUCIÓN DEL CASO, PORQUE DIOS ES JUSTO, Y ÉL ABOMINA LA MALDAD.
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