LIMA - PERÚ VIERNES 18 DE DICIEMBRE DEL 2015
COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS
Hechos 25:23-27.
"Al otro día, viniendo Agripa y Berenice con mucha pompa, y entrando en la audiencia con los tribunos y los principales hombres de la ciudad, por mandato de Festo fue traído Pablo. Entonces Festo dijo: Rey Agripa, y todos los varones que estáis aquí juntos con nosotros, aquí tenéis a este hombre, respecto del cual toda la multitud de los judíos me ha demandado en Jerusalén y aquí, dando voces que no debe vivir más. Pero yo, hallando que ninguna cosa digna de muerte ha hecho, y como él mismo apeló a Augusto, he determinado enviarle a él. Como no tengo cosa cierta qué escribir a mi señor, le he traído ante vosotros; y mayormente ante ti, oh rey Agripa, para que después de examinarle tenga yo qué escribir. Porque me parece fuera de razón enviar un preso, y no informar de los cargos que haya en su contra".
*** Al día siguiente Festo, fiel a su promesa, aparejó las cosas en la sala del juicio para darle al rey Agripa la opción de escuchar al apóstol Pablo en su descargo referencial. Vino a la sala de la audiencia junto con su hermana y mujer, Berenice, siendo precedido de una cortesana pompa muy exagerada (¡Cosas de los reyes!). La crema y nata de los gobernantes, y del poder judicial y político estaban presentes, y Dios les concedió el honor de poder oír del evangelio del reino por boca de su más insigne representante a nivel terrenal: Pablo. Las fuerzas vivas de la ciudad de Cesarea se dispusieron para ver la aplicación de la justicia por el rey mismo.
*** Porcio Festo, el anfitrión del evento, hizo la salutación correspondiente a los asistentes, dando honra a Agripa como rey, y a los asistentes de los diversos sectores del poder local, los que señalaban su anuencia para que todo se lleve a cabo. Llegado Pablo al recinto, Festo refirió la solicitud de los judíos para que Pablo fuera eliminado, y cómo, al sustentar los hechos según ellos; la justicia romana no hallaba ninguna razón, ni para que Pablo estuviese preso, ni para recibir condenación alguna; mucho menos para que se aplicara la pena de muerte.
*** Y aunque la libertad de Pablo debió ser otorgada sin más trámite, el gobernador sugirió a Pablo ser juzgado en Jerusalén, ¿de qué? El apóstol, consciente de los acontecimientos, solicitó el ser enviado a César para que él tomara la final decisión sobre su caso. Las dilaciones del poder judicial ya habían retenido a Pablo por más de dos años, ¡SIN CAUSA, SIN DELITO! Y la voluntad divina, aunque parecía estar inoperativa, silente y ausente; promovía la presencia de un mayor número de personas que estuvieran presentes en la esfera del poder romano, las que debían oír el evangelio del reino, conforme a lo planificado por Dios desde que eligiera a Pablo como apóstol a los gentiles. El apóstol fue acomodándose paulatinamente al ritmo divino, hasta entender las pausas de la Deidad sin quejas por su parte, quien se conduce en su fluir con calma y exactitud cronométrica. Cuando eres guiado por el reloj de arriba, tienes que adaptarte a sus instantes, momentos, esperas y definiciones.
*** Porcio Festo revela que él no tiene cómo referir estos hechos a Augusto en una forma lógica y coherente, temiendo ser juzgado como un tonto incompetente en materia de judicatura por el emperador, solicitando humildemente al rey Agripa le oriente sobre el particular, para adecuar su misiva a la realidad romano judaica. Nada es más difícil de definir en un juicio que aquello que no tiene pies ni cabeza jurídicamente, causando gran curiosidad, opiniones diversas y decisiones abstractas, que pueden ser muy trágicas en aquelos que fungen como dioses, dando y quitando vidas (Dn.5:18-19). El aturdido Festo, esperaba que Agripa y los presentes le ayudaran en la redacción de su carta al César.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 18/12/2015
*** Y aunque la libertad de Pablo debió ser otorgada sin más trámite, el gobernador sugirió a Pablo ser juzgado en Jerusalén, ¿de qué? El apóstol, consciente de los acontecimientos, solicitó el ser enviado a César para que él tomara la final decisión sobre su caso. Las dilaciones del poder judicial ya habían retenido a Pablo por más de dos años, ¡SIN CAUSA, SIN DELITO! Y la voluntad divina, aunque parecía estar inoperativa, silente y ausente; promovía la presencia de un mayor número de personas que estuvieran presentes en la esfera del poder romano, las que debían oír el evangelio del reino, conforme a lo planificado por Dios desde que eligiera a Pablo como apóstol a los gentiles. El apóstol fue acomodándose paulatinamente al ritmo divino, hasta entender las pausas de la Deidad sin quejas por su parte, quien se conduce en su fluir con calma y exactitud cronométrica. Cuando eres guiado por el reloj de arriba, tienes que adaptarte a sus instantes, momentos, esperas y definiciones.
*** Porcio Festo revela que él no tiene cómo referir estos hechos a Augusto en una forma lógica y coherente, temiendo ser juzgado como un tonto incompetente en materia de judicatura por el emperador, solicitando humildemente al rey Agripa le oriente sobre el particular, para adecuar su misiva a la realidad romano judaica. Nada es más difícil de definir en un juicio que aquello que no tiene pies ni cabeza jurídicamente, causando gran curiosidad, opiniones diversas y decisiones abstractas, que pueden ser muy trágicas en aquelos que fungen como dioses, dando y quitando vidas (Dn.5:18-19). El aturdido Festo, esperaba que Agripa y los presentes le ayudaran en la redacción de su carta al César.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 18/12/2015
TODO LO QUE RODEA EL JUICIO CONTRA PABLO DE TARSO, SUS CONSTANTES PARTICIPACIONES ANTE LOS GOBERNANTES, Y LA FORMA DE PENSAR ROMANA; NOS SON EXPUESTOS EN ESTOS PASAJES, DONDE PODEMOS TENER UN PANORAMA DE ORDEN ESPIRITUAL, POLÍTICO, RELIGIOSO Y JURÍDICO, QUE LE PERMITIERON A PABLO CUMPLIR SU COMETIDO COMO APÓSTOL DEL SEÑOR A LOS GENTILES, Y A LA GENTE EMINENTE ENTRE ELLOS.
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