sábado, 12 de diciembre de 2015

LOS PROTAGONISTAS APARENTES: EL TRIBUNO CLAUDIO LISIAS, EL GOBERNADOR FÉLIX, LOS CUATROCIENTOS SETENTA HOMBRES DE LA ESCOLTA; NO SON SINO LA PARAFERNALIA QUE RODEA AL APÓSTOL, PARA CONSERVAR SU INTEGRIDAD HASTA QUE HAYA CUMPLIDO SU COMETIDO, TESTIFICANDO DELANTE DE CÉSAR; Y TAMBIÉN ESCRIBIENDO LO QUE COMPONDRÍA NUESTRO NUEVO TESTAMENTO. AUNQUE ESTOS PASAJES NOS MUESTREN UNA RELATIVA PASIVIDAD PAULINA, ¡NO ES ASÍ! DIOS IBA ADEREZANDO EN SU MENTE Y EN SU CORAZÓN LO QUE NOS COMUNICARÍA COMO NUESTRO ORDEN VITAL ESPIRITUAL.

LIMA - PERÚ  SÁBADO 12 DE DICIEMBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

Hechos 23:25-35.

"Y escribió una carta en estos términos: Claudio Lisias al excelentísimo gobernador Félix: Salud, A este hombre, aprehendido por los judíos, y que iban ellos a matar, lo libré yo acudiendo con la tropa, habiendo sabido que era ciudadano romano. Y queriendo saber la causa por qué lo acusaban, le llevé al concilio de ellos, y hallé que lo acusaban por cuestiones de la ley de ellos, pero que ningún delito tenía digno de muerte o de prisión. Pero al ser avisado de asechanzas que los judíos habían tendido contra este hombre, al punto le he enviado a ti, intimando también a los acusadores que traten delante de ti lo que tienen contra él. Pásalo bien. Y los soldados, tomando a Pablo como se les ordenó, le llevaron de noche a Antípatris. Y al día siguiente, dejando a los jinetes que fueran con él, volvieron a la fortaleza. Cuando aquellos llegaron a Cesarea, y dieron la carta al gobernador, presentaron también a Pablo delante de él. Y el gobernante, leída la carta, preguntó de qué provincia era, y habiendo entendido que era de Cilicia, le dijo: Te oiré cuando vengan tus acusadores. Y mandó que le custodiasen en el pretorio de Herodes".

*** Las referencias que Claudio Lisias hace, sintetizando las cosas que pasaran contra Pablo, nos da a entender que él había comprendido el absurdo jurídico que interpusieron los judíos contra el apóstol; desde la perspectiva del fuero juzgo romano, interpretaba esto como una forma extremista de su fanatismo religioso (los romanos también tenían el suyo en su perspectiva idolátrica, y los religiosos de hoy, también). El tribuno juzgaba estas cosas como algo ridículo, pero el fanatismo religioso de los judíos podía fabricar fácilmente una revuelta de gran magnitud, y era necesario actuar con el tino político correspondiente, sofocando todo lo que amenace un levantamiento o una sedición, manteniendo la pax romana.

*** Aplicando el tribuno la cortesía clásica que correspondiera a la jerarquía romana, procede a comunicar en una forma muy breve los hechos. Aunque las declaraciones no son lo más exactas, favoreciendo su posición y su protagonismo: "...lo libré yo...con la tropa, habiendo sabido que era ciudadano romano" (toleremos esta edición de la realidad hecha por Claudio). Es preciso acotar que lo hecho por los recalcitrantes judíos, en su intento por eliminar a Pablo, no es presentado aquí como delito punible, focalizándose todo en la persona de Pablo, y en la ridícula acusación que contra él se hacía, jurídicamente nula a nivel romano; implicando el tino político que soslaya la maldad de los más para mantener el statu quo, colocando una pared intermedia de conveniencia política, no de realidad concreta, manteniendo a salvo a Pablo, y la paz con los judíos aunque fuera a regañadientes.

*** Lo del concilio, y las referencias que se dieran a ese nivel, demostraban que Pablo no era un delincuente, y que el dilema surgido emanaba de las leyes y costumbres hebraicas, y de su fanatismo a ultranza: y siendo que Félix era gobernador de aquella región, y más conocedor de la cultura hebrea, Claudio consideró prudente derivar a Cesarea este asunto, sosegando a los sacerdotes y miembros del concilio en Jerusalén, a quienes invitó a tratar este asunto en la residencia del gobernador. Así, la escolta asignada a Pablo se devolvió de Antípatris, dejando con él solamente a los jinetes para que llegaran con seguridad hasta Cesarea, haciéndolo así, entregando la carta al gobernador, que se ponía a pensar por qué el tribuno le había enviado una escolta de setenta jinetes, doscientos lanceros y doscientos soldados ¿Quién sería este hombre que así preocupara al tribuno?





*** Después de recibir a Pablo, y de leer la carta de Claudio Lisias, y saber que Pablo era de Cilicia; Félix le refirió al apóstol que le oiría a él y a sus acusadores en un juicio justo, pidiéndole que esperase hasta que los hipotéticos agraviados vinieran, y se diera lugar a un careo. Entretanto, fue enviado al pretorio de Herodes para esperar a sus acusadores. Estos momentos de aparente descanso fueron aprovechados por Pablo para ministrar el evangelio entre la gente que le custodiara, confiando en el Señor, y rumiando y dándole forma a lo que él escribiría para nosotros en el siglo XXI.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA   12/12/2015

1 comentario:

  1. PABLO SE HALLABA EN MEDIO DE TODA LA GENTE QUE GIRABA ALREDEDOR DE ÉL, PORQUE EL PROTAGONISTA REAL DE TODOS ESTOS EVENTOS, ERA ESTE SIERVO DE DIOS ALREDEDOR DEL CUAL TODO GIRARA OBJETIVAMENTE. AUNQUE A VECES NOS PAREZCA QUE NOSOTROS SOMOS LA ÚLTIMA RUEDA DEL COCHE, DIOS ESTÁ PREPARANDO LAS COSAS QUE PERDURARÁN EN EL INDIVIDUO NUCLEAR ALREDEDOR DEL CUAL GIRAN LOS ACONTECIMIENTOS, SUSTENTANDO LA REALIDAD QUE PERDURARÁ POR LAS EDADES.

    ResponderEliminar