LIMA - PERÚ MIÉRCOLES 14 DE NOVIEMBRE DEL 2018 MENSAJE # 2853
ESDRAS 9: 1-4.
"Acabadas estas cosas, los príncipes vinieron a mí, diciendo: El pueblo de Israel y los sacerdotes y levitas no se han separado de los pueblos de las tierras, de s cananeos, heteos, ferezeos, jebuseos, amonitas, moabitas, egipcios y amorreos, y hacen conforme a sus abominaciones. Porque han tomado de las hijas de ellos para sí y para sus hijos, y el linaje santo ha sido mezclado con los pueblos de las tierras, y la mano de los príncipes y de los gobernadores ha sido la primera en cometer este pecado. Cuando oí esto, rasgué mis vestidos y mi marido, y arranqué pelo de mi cabeza y de mi barba, y me senté angustiado en extremo. Y se me juntaron todos los que temían las palabras del Dios de Israel, a causa de la prevaricación de los del cautiverio; mas yo estuve muy angustiado hasta la hora del sacrificio de la tarde".
=== Un viaje de cinco meses, y un descanso de tres días (hay que imaginarse cómo estarían esos cuerpos de doloridos y molidos por semejante peregrinación), para luego pesar contar y entregar cada uno de los utensilios que se trasladaran desde Babilonia, certificando que todo había llegado conforme a lo que constara en los documentos enviados desde la capital del imperio, evidenciándose el cuidado y la fidelidad de quienes lo transportaron hasta Jerusalén durante ciento cincuenta días; Esdras se dispuso a atender las tareas que le competían, y cuando se le diera el informe de la inconducta de los habitantes de la tierra de promisión, sufrió un colapso total, derrumbándose interior y exteriormente, experimentando una vergüenza ajena totalmente inesperada, sintiéndose profundamente decepcionado. Aquellos que no sienten las cosas como lo hace un sacerdote, un hombre de Dios; no se sienten decepcionados para nada porque su relación espiritual es inexistente, y solamente hay vínculos rituales o tradicionales que no afectan ni los corazones ni las mentes de los no regenerados, que no entienden acerca de su compromiso con la Deidad, y vestidos de hipocresía y cinismo, pasean su insensibilidad en las reuniones que eventualmente significan algún gasto cuando se trata de sacrificios por el pecado, no habiendo ningún holocausto en aquella política de caídas, perdones y levantamientos, siguiendo la ruta del ritualismo; no la del arrepentimiento.
=== La prevaricación de los del cautiverio no fue resentida por los habitantes jerosolimitanos, porque para ellos la religión era asunto de rituales, costumbres, ceremonias, y derramamiento de sangre ajena; para que Dios no moleste ni se ofenda; y ellos siguieran con "su vida", la misma que no tenía en cuenta la santidad de ser y de hacer, no llegando jamás al plano de la rectitud de carácter y conducta en la que los creyentes deben fluir por estar afectados por la vida sobrenatural que la presencia divina comunica a los que tienen su comunión y celebran el vivir con Dios en principios y prácticas, como su estilo de vida. El sensible corazón del sacerdote Esdras, entendía esta situación en conformidad con su nivel relacional, una altura a la que no llega el mero profesante, quien ve las cosas de Dios de un modo irrelevante, De allí que les fuera algo fácil el contaminarse, y el promover la contaminación en los demás como sus subordinados, quienes al ver su mal ejemplo, lo consideraron como algo viable y valedero; y, al parecer, del agrado divino, emulando a sus mayores, a quienes consideraran maduros en asuntos religiosos y sociales. ¿Te ha pasado?
=== El dolor, la vergüenza y el sufrimiento del hombre representativo del Señor como su nexo directo con el pueblo de Dios; como aquel que debía mediar a favor de ellos ante Dios, y referir con sus palabras y su conducta la clase de vida que agrada a la Deidad; se sintió destrozado internamente al compartir el fracaso y la naturaleza profana de los del cautiverio, turbándose en extremo ante semejante crisis, y sin saber qué hacer frente a semejante situación, sintiendo que su cabeza estallaba y su corazón se derretía dentro de él; y no encontrando más remedio, el del traje desgarrado derramo su alma en un desesperado gemir, sintiéndose desolado y sin argumento alguno para justificar o disculpar semejante afrenta a la Deidad. Todos hemos pasado por crisis semejantes, sorprendiéndonos de nuestras propias bajezas, y quedándonos tan asombrados y sin recursos que puedan recoger alguna promesa por allí, una torpe disculpa, una excusa barata ... ¡Lo que fuera! Para no sentirse así. Cuánto necesitamos y precisamos la voz de un Secanías, el hijo de Jehiel para que nos diga qué podemos hacer ante semejante crisis nacional (Ver. Esd.10:1-4). Ayúdanos, Padre, a salir de este abismo, y poder emerger ante tu presencia con una opción de restauración.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 14/11/2018 MENSAJE # 2853
"Acabadas estas cosas, los príncipes vinieron a mí, diciendo: El pueblo de Israel y los sacerdotes y levitas no se han separado de los pueblos de las tierras, de s cananeos, heteos, ferezeos, jebuseos, amonitas, moabitas, egipcios y amorreos, y hacen conforme a sus abominaciones. Porque han tomado de las hijas de ellos para sí y para sus hijos, y el linaje santo ha sido mezclado con los pueblos de las tierras, y la mano de los príncipes y de los gobernadores ha sido la primera en cometer este pecado. Cuando oí esto, rasgué mis vestidos y mi marido, y arranqué pelo de mi cabeza y de mi barba, y me senté angustiado en extremo. Y se me juntaron todos los que temían las palabras del Dios de Israel, a causa de la prevaricación de los del cautiverio; mas yo estuve muy angustiado hasta la hora del sacrificio de la tarde".
=== Un viaje de cinco meses, y un descanso de tres días (hay que imaginarse cómo estarían esos cuerpos de doloridos y molidos por semejante peregrinación), para luego pesar contar y entregar cada uno de los utensilios que se trasladaran desde Babilonia, certificando que todo había llegado conforme a lo que constara en los documentos enviados desde la capital del imperio, evidenciándose el cuidado y la fidelidad de quienes lo transportaron hasta Jerusalén durante ciento cincuenta días; Esdras se dispuso a atender las tareas que le competían, y cuando se le diera el informe de la inconducta de los habitantes de la tierra de promisión, sufrió un colapso total, derrumbándose interior y exteriormente, experimentando una vergüenza ajena totalmente inesperada, sintiéndose profundamente decepcionado. Aquellos que no sienten las cosas como lo hace un sacerdote, un hombre de Dios; no se sienten decepcionados para nada porque su relación espiritual es inexistente, y solamente hay vínculos rituales o tradicionales que no afectan ni los corazones ni las mentes de los no regenerados, que no entienden acerca de su compromiso con la Deidad, y vestidos de hipocresía y cinismo, pasean su insensibilidad en las reuniones que eventualmente significan algún gasto cuando se trata de sacrificios por el pecado, no habiendo ningún holocausto en aquella política de caídas, perdones y levantamientos, siguiendo la ruta del ritualismo; no la del arrepentimiento.
=== La prevaricación de los del cautiverio no fue resentida por los habitantes jerosolimitanos, porque para ellos la religión era asunto de rituales, costumbres, ceremonias, y derramamiento de sangre ajena; para que Dios no moleste ni se ofenda; y ellos siguieran con "su vida", la misma que no tenía en cuenta la santidad de ser y de hacer, no llegando jamás al plano de la rectitud de carácter y conducta en la que los creyentes deben fluir por estar afectados por la vida sobrenatural que la presencia divina comunica a los que tienen su comunión y celebran el vivir con Dios en principios y prácticas, como su estilo de vida. El sensible corazón del sacerdote Esdras, entendía esta situación en conformidad con su nivel relacional, una altura a la que no llega el mero profesante, quien ve las cosas de Dios de un modo irrelevante, De allí que les fuera algo fácil el contaminarse, y el promover la contaminación en los demás como sus subordinados, quienes al ver su mal ejemplo, lo consideraron como algo viable y valedero; y, al parecer, del agrado divino, emulando a sus mayores, a quienes consideraran maduros en asuntos religiosos y sociales. ¿Te ha pasado?
=== El dolor, la vergüenza y el sufrimiento del hombre representativo del Señor como su nexo directo con el pueblo de Dios; como aquel que debía mediar a favor de ellos ante Dios, y referir con sus palabras y su conducta la clase de vida que agrada a la Deidad; se sintió destrozado internamente al compartir el fracaso y la naturaleza profana de los del cautiverio, turbándose en extremo ante semejante crisis, y sin saber qué hacer frente a semejante situación, sintiendo que su cabeza estallaba y su corazón se derretía dentro de él; y no encontrando más remedio, el del traje desgarrado derramo su alma en un desesperado gemir, sintiéndose desolado y sin argumento alguno para justificar o disculpar semejante afrenta a la Deidad. Todos hemos pasado por crisis semejantes, sorprendiéndonos de nuestras propias bajezas, y quedándonos tan asombrados y sin recursos que puedan recoger alguna promesa por allí, una torpe disculpa, una excusa barata ... ¡Lo que fuera! Para no sentirse así. Cuánto necesitamos y precisamos la voz de un Secanías, el hijo de Jehiel para que nos diga qué podemos hacer ante semejante crisis nacional (Ver. Esd.10:1-4). Ayúdanos, Padre, a salir de este abismo, y poder emerger ante tu presencia con una opción de restauración.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 14/11/2018 MENSAJE # 2853
EL PANORAMA DE LA INTERCESIÓN ES REFERIDO AQUÍ EN SU FORMA MAS DRAMÁTICA, PASANDO EL SIERVO DE DIOS POR UNA CRISIS SIN SOLUCIÓN APARENTE, HABIENDO DIOS DE INSPIRAR A ALGUIEN MÁS PARA HALLAR UNA RESPUESTA A SU PLEGARIA.
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