LIMA - PERÚ MIÉRCOLES 31 DE OCTUBRE DEL 2018 MENSAJE # 2825
RUT 1:14-19.
"Y ellas alzaron otra vez su voz y lloraron, y Orfa besó a su suegra, mas Rut se quedó con ella. Y Noemí dijo: He aquí tu cuñada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses; vuélvete tú tras ella. Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti, porque a dondequiera que tu fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada; así me haga Yahweh, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos. Y viendo Noemí que estaba tan resuelta a ir con ella, no dijo más. Anduvieron, pues, ellas dos hasta que llegaron a Belén. y aconteció que habiendo entrado en Belén, toda la ciudad se conmovió por causa de ellas, y decían: ¿No es ésta Noemí?".
=== La familia de Elimelec, que saliera con cuatro personas, y encontrara en Moab un lugar para morir, con una década de distancia entre el padre y sus hijos; se componía de tres viudas desconsoladas al salir de los campos de Moab, donde hubo que tomar decisiones inherentes en cuanto al futuro de las tres. Y fue en ese cruce de caminos que la voz de Noemí sugirió que sus dos nueras retornaran a su lugar de origen, ya que ella haría lo propio, tratando de sobrevivir en la tierra de su nacimiento. Para ella, el futuro se tornaba muy oscuro, porque el dolor y el duelo triple (como esposa y madre), gobernaba su corazón, y nublaba su horizonte, anulando toda esperanza bajo esa montaña de tristeza y desolación que cargara sobre sí. Cuando nuestra mentalidad se focaliza sobre un hecho trágico, difícil o doloroso; las demás cosas parecen desaparecer, penetrando en un plano convergente que te enajena de la realidad polivalente, y subordina todo a tu momentánea desazón, universalizándola para tu mal, convirtiendo tu voz en un réquiem, por lo que consideras un hado fatal, al no ver las cosas como Dios las ve. Si tu corazón no decide salir de esa esfera quebrantadora, lastimosa y lamentadora, tu ánimo se consumirá en la intrascendencia, hasta que la mano de Dios disipe la oscuridad de tu horizonte grisáceo; y lo inesperado: "Esta moabita pertinaz que me hace ver a Dios con una esperanza de gloria que yo creía disipada, y que me hace vivir resentida; mas viendo una luz al fondo del túnel ... Vamos, pues"'.
=== La suegra quebrantada, lógica y aplastante en su razonamiento, buscó desalentar a sus dos nueras, mencionando su viudez (algo que afligía a las tres), su origen o procedencia, y su compromiso pactual con los dioses de ellas; como prioridades que debían ser consideradas para su futura felicidad, bajo amenaza de perpetuar su viudez a extremos insoportables. Las dos eran jóvenes, y debían rehacer sus vidas, no vistiendo de luto el resto de sus existencias. Pero Noemí no tuvo en cuenta el trabajo de amor de Mahlón, y su influencia beneficiosa sobre la que fuera su mujer (Rut), quien ya había decidido en su corazón que el Dios de los hebreos era el único que merecía ser adorado. Quelión, no había influido en su esposa (Orfa), siendo ella idólatra hasta el final, por eso en su postrer comunión con su suegra le dio un beso de despedida y se marchó a su tierra y a sus dioses. Y cuando Noemí le hizo a Rut "una oferta que no podría rehusar" (misma madrina), encontró en su nuera la confesión de fe más bella que se halle en la Palabra de Dios: "No me ruegues que te deje, y me aparte de ti..." Rut entendía la prolongada edad de su suegra, su soledad y su tristeza con una carga opresiva que la atormentaba, y no teniendo quién la consolara, procediendo para con ella sin ningún egoísmo personal, fungiendo como una hija amada a partir de entonces. Un corazón apesadumbrado y sin valores eternos en los cuales reposar, suele retraerse, y hasta ser mordaz, elusiva y renuente, habiendo de ser muy tolerante con quien todavía respira por las heridas, y culpa a Dios de sus desgracias.
=== "Porque a dondequiera que tú fueres, iré yo ...". Esto compone una guianza y un destino. "Y dondequiera que vivieres, viviré ... " Tu decisión nos afectará a las dos, y compartiremos nuestras experiencias. "Tu pueblo será mi pueblo ... ". Esto supone una identidad que hacía de Rut una creyente fiel a su resolución. "Y tu Dios, mi Dios". Esto es la final corroboración de la decisión de fe de esta nueva creyente. ¡Me encanta esta mujer! "Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada ...". Rut esta decidida y definida a compartir con Noemí su futuro según Dios. "Así me haga Yahweh, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos". Aquí Rut le pone punto final a su confesión de fe y su alocución; dejando a Noemí sin más recursos. Y ambas se fueron a enfrentar lo que viniera como una familia de dos componentes que eran un corazón y un alma en el terreno práctico. La llegada a Belén desnudó el corazón de Noemí, quien percibiera que todo lo había hecho anteriormente era una torpeza que Dios no dudara en castigar. Muchos pensamos así al hacer un balance existencial que no tiene en cuenta la voluntad divina, y que se deja llevar por las premuras al huir de las aflicciones locales. Dios tenía un tesoro allá en Moab, y era aquella joven que acompañaba a la señora Mara (nombre con el que Noemí se rebautizara). Mientras que no tengamos plena consciencia de lo que Dios viene haciendo y hará, nuestra boca y corazón seguirán siendo profanos. Invito a mis lectores a considerar estos hechos, para que nuestro lenguaje no haga más amarga nuestra peregrinación, y comencemos a rimar nuestros diálogos con los del Señor, en ritmo, rima y métrica española.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 31.10/2018 MENSAJE # 2825.
"Y ellas alzaron otra vez su voz y lloraron, y Orfa besó a su suegra, mas Rut se quedó con ella. Y Noemí dijo: He aquí tu cuñada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses; vuélvete tú tras ella. Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti, porque a dondequiera que tu fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada; así me haga Yahweh, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos. Y viendo Noemí que estaba tan resuelta a ir con ella, no dijo más. Anduvieron, pues, ellas dos hasta que llegaron a Belén. y aconteció que habiendo entrado en Belén, toda la ciudad se conmovió por causa de ellas, y decían: ¿No es ésta Noemí?".
=== La familia de Elimelec, que saliera con cuatro personas, y encontrara en Moab un lugar para morir, con una década de distancia entre el padre y sus hijos; se componía de tres viudas desconsoladas al salir de los campos de Moab, donde hubo que tomar decisiones inherentes en cuanto al futuro de las tres. Y fue en ese cruce de caminos que la voz de Noemí sugirió que sus dos nueras retornaran a su lugar de origen, ya que ella haría lo propio, tratando de sobrevivir en la tierra de su nacimiento. Para ella, el futuro se tornaba muy oscuro, porque el dolor y el duelo triple (como esposa y madre), gobernaba su corazón, y nublaba su horizonte, anulando toda esperanza bajo esa montaña de tristeza y desolación que cargara sobre sí. Cuando nuestra mentalidad se focaliza sobre un hecho trágico, difícil o doloroso; las demás cosas parecen desaparecer, penetrando en un plano convergente que te enajena de la realidad polivalente, y subordina todo a tu momentánea desazón, universalizándola para tu mal, convirtiendo tu voz en un réquiem, por lo que consideras un hado fatal, al no ver las cosas como Dios las ve. Si tu corazón no decide salir de esa esfera quebrantadora, lastimosa y lamentadora, tu ánimo se consumirá en la intrascendencia, hasta que la mano de Dios disipe la oscuridad de tu horizonte grisáceo; y lo inesperado: "Esta moabita pertinaz que me hace ver a Dios con una esperanza de gloria que yo creía disipada, y que me hace vivir resentida; mas viendo una luz al fondo del túnel ... Vamos, pues"'.
=== La suegra quebrantada, lógica y aplastante en su razonamiento, buscó desalentar a sus dos nueras, mencionando su viudez (algo que afligía a las tres), su origen o procedencia, y su compromiso pactual con los dioses de ellas; como prioridades que debían ser consideradas para su futura felicidad, bajo amenaza de perpetuar su viudez a extremos insoportables. Las dos eran jóvenes, y debían rehacer sus vidas, no vistiendo de luto el resto de sus existencias. Pero Noemí no tuvo en cuenta el trabajo de amor de Mahlón, y su influencia beneficiosa sobre la que fuera su mujer (Rut), quien ya había decidido en su corazón que el Dios de los hebreos era el único que merecía ser adorado. Quelión, no había influido en su esposa (Orfa), siendo ella idólatra hasta el final, por eso en su postrer comunión con su suegra le dio un beso de despedida y se marchó a su tierra y a sus dioses. Y cuando Noemí le hizo a Rut "una oferta que no podría rehusar" (misma madrina), encontró en su nuera la confesión de fe más bella que se halle en la Palabra de Dios: "No me ruegues que te deje, y me aparte de ti..." Rut entendía la prolongada edad de su suegra, su soledad y su tristeza con una carga opresiva que la atormentaba, y no teniendo quién la consolara, procediendo para con ella sin ningún egoísmo personal, fungiendo como una hija amada a partir de entonces. Un corazón apesadumbrado y sin valores eternos en los cuales reposar, suele retraerse, y hasta ser mordaz, elusiva y renuente, habiendo de ser muy tolerante con quien todavía respira por las heridas, y culpa a Dios de sus desgracias.
=== "Porque a dondequiera que tú fueres, iré yo ...". Esto compone una guianza y un destino. "Y dondequiera que vivieres, viviré ... " Tu decisión nos afectará a las dos, y compartiremos nuestras experiencias. "Tu pueblo será mi pueblo ... ". Esto supone una identidad que hacía de Rut una creyente fiel a su resolución. "Y tu Dios, mi Dios". Esto es la final corroboración de la decisión de fe de esta nueva creyente. ¡Me encanta esta mujer! "Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada ...". Rut esta decidida y definida a compartir con Noemí su futuro según Dios. "Así me haga Yahweh, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos". Aquí Rut le pone punto final a su confesión de fe y su alocución; dejando a Noemí sin más recursos. Y ambas se fueron a enfrentar lo que viniera como una familia de dos componentes que eran un corazón y un alma en el terreno práctico. La llegada a Belén desnudó el corazón de Noemí, quien percibiera que todo lo había hecho anteriormente era una torpeza que Dios no dudara en castigar. Muchos pensamos así al hacer un balance existencial que no tiene en cuenta la voluntad divina, y que se deja llevar por las premuras al huir de las aflicciones locales. Dios tenía un tesoro allá en Moab, y era aquella joven que acompañaba a la señora Mara (nombre con el que Noemí se rebautizara). Mientras que no tengamos plena consciencia de lo que Dios viene haciendo y hará, nuestra boca y corazón seguirán siendo profanos. Invito a mis lectores a considerar estos hechos, para que nuestro lenguaje no haga más amarga nuestra peregrinación, y comencemos a rimar nuestros diálogos con los del Señor, en ritmo, rima y métrica española.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 31.10/2018 MENSAJE # 2825.
DIOS SUELE TRABAJAR CON CALMA, SIN ABANDONAR SUS EXPECTATIVAS. LOS QUE HEMOS SIDO ELEGIDOS POR ÉL IREMOS DESCUBRIENDO POCO A POCO SU MANERA DE OPERAR EN NUESTRAS VIDAS, Y NUESTRO GESTO CONTRARIADO, SE CONVERTIRÁ EN UNA AMPLIA SONRISA AL VER LOS RESULTADOS PARA LA GLORIA DE DIOS.
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