LIMA - PERÚ LUNES 08 DE OCTUBRE DEL 2018 MENSAJE # 2779
HEBREOS 2:1-4.
"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad".
=== Las realidades neocreacionales, apuntando al Señor Jesús en un completo testimonio de su origen, autoridad, esencia, herencia y poder, como la divina expresión manifestada en carne; algo que siempre enfermó a los gnósticos por considerar a la carne un artículo neutro y sin valor; y una imposibilidad teológica para el pueblo judío, nos es revelada su preexistencia, su vigencia y regencia, haciendo notorio que Jesús era mucho mayor que los ángeles, y que el Padre lo proclamara como corregente estelar, reclamando su regia posición, y los valores inherentes al plano creacional, nos permite ver cómo los ángeles fueron diseñados como servidores de quienes serían herederos de la salvación que él operaría mediante la redención, se nos insta a estar atentos a la GRAN SALVACIÓN QUE OBTUVIMOS, la cual nos fue concedida por gracia, y que debe verse sustentada por la fe en el plano de su verificación hasta que lleguemos a la perfección que el Padre nos reclama para obtener dicha herencia. Veamos, pues, al referirnos que es necesario que atendamos a las cosas que hemos oído, nos muestra cómo es que la fe llegó hasta nosotros: "Así es que la FE es por el OÍR, y el OÍR, por la Palabra de Dios" (Ro.10:17); y cómo ésta nos ubicó en el alto nivel donde hemos de permanecer, evitando así el deslizarse del plano posicional al que fuimos elevados por su gran misericordia y por su gracia.
=== Acto seguido, el autor se remite al punto sobre el cual disertara, donde los ángeles fueran utilizados como comunicadores de las verdades celestiales, las cuales fueran reveladas a los siervos de Dios en el pasado, y cuya firmeza o realidad se vio corroborada por la experiencia, ya que, obedecida, fue motivo de aprobación y cumplimiento; y desobedecida, fue retribuida en una proporcionalidad que desatara la admiración y el santo temor que luego adornara a los que fueran llamados a participar de la gloria a su sazón. Así, al usar el plano comparativo, se nos advierte solemnemente para que no consideremos la salvación como algo que se puede, tener, retener, descuidar, abusar o perder; pues ella compone nuestro tesoro más valioso, y es el testimonio del cielo en la tierra, como en su momento lo fuera la ley divina escrita en dos piedras labradas, las cuales revelaban la santidad divina en lo vertical (Dios y nosotros), y en lo horizontal (interrelaciones humanas dentro de ese orden divinal). No eran cosas para olvidar, o tenerlas guardadas por allí; sino la vida misma cono una realidad que había de pasar de las duras piedras, a la sensibilidad de los corazones de los comprometidos pactualmente, para constituirse en su realidad vivencial y operacional. Cristo en nosotros, como la esperanza de gloria, sintetiza la realidad divinal como algo que ha de establecerse en nosotros (Col.1:27; Ro. 8:28-30, 29e).
=== Esto fue anunciado inicialmente por Cristo mismo, siendo confirmado por todos los que, después de haber oído, y haber entendido, lo asimilaron y se llenaron de la fe necesaria para obrar como su Señor: "De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre" (Jn.14:12). Y es por eso que Dios se complacía en este operar juntamente con sus siervos, y las señales, y los prodigios y los diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo. según su voluntad; no hacían si no el confirmar que toda aseveración inherente al evangelio del reino había de ser comprobada y consolidada, con un testimonio interior que podría ser exteriorizado para mostrar la buena voluntad divina para con el género humano.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 08/10/2018 MENSAJE # 2779
"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad".
=== Las realidades neocreacionales, apuntando al Señor Jesús en un completo testimonio de su origen, autoridad, esencia, herencia y poder, como la divina expresión manifestada en carne; algo que siempre enfermó a los gnósticos por considerar a la carne un artículo neutro y sin valor; y una imposibilidad teológica para el pueblo judío, nos es revelada su preexistencia, su vigencia y regencia, haciendo notorio que Jesús era mucho mayor que los ángeles, y que el Padre lo proclamara como corregente estelar, reclamando su regia posición, y los valores inherentes al plano creacional, nos permite ver cómo los ángeles fueron diseñados como servidores de quienes serían herederos de la salvación que él operaría mediante la redención, se nos insta a estar atentos a la GRAN SALVACIÓN QUE OBTUVIMOS, la cual nos fue concedida por gracia, y que debe verse sustentada por la fe en el plano de su verificación hasta que lleguemos a la perfección que el Padre nos reclama para obtener dicha herencia. Veamos, pues, al referirnos que es necesario que atendamos a las cosas que hemos oído, nos muestra cómo es que la fe llegó hasta nosotros: "Así es que la FE es por el OÍR, y el OÍR, por la Palabra de Dios" (Ro.10:17); y cómo ésta nos ubicó en el alto nivel donde hemos de permanecer, evitando así el deslizarse del plano posicional al que fuimos elevados por su gran misericordia y por su gracia.
=== Acto seguido, el autor se remite al punto sobre el cual disertara, donde los ángeles fueran utilizados como comunicadores de las verdades celestiales, las cuales fueran reveladas a los siervos de Dios en el pasado, y cuya firmeza o realidad se vio corroborada por la experiencia, ya que, obedecida, fue motivo de aprobación y cumplimiento; y desobedecida, fue retribuida en una proporcionalidad que desatara la admiración y el santo temor que luego adornara a los que fueran llamados a participar de la gloria a su sazón. Así, al usar el plano comparativo, se nos advierte solemnemente para que no consideremos la salvación como algo que se puede, tener, retener, descuidar, abusar o perder; pues ella compone nuestro tesoro más valioso, y es el testimonio del cielo en la tierra, como en su momento lo fuera la ley divina escrita en dos piedras labradas, las cuales revelaban la santidad divina en lo vertical (Dios y nosotros), y en lo horizontal (interrelaciones humanas dentro de ese orden divinal). No eran cosas para olvidar, o tenerlas guardadas por allí; sino la vida misma cono una realidad que había de pasar de las duras piedras, a la sensibilidad de los corazones de los comprometidos pactualmente, para constituirse en su realidad vivencial y operacional. Cristo en nosotros, como la esperanza de gloria, sintetiza la realidad divinal como algo que ha de establecerse en nosotros (Col.1:27; Ro. 8:28-30, 29e).
=== Esto fue anunciado inicialmente por Cristo mismo, siendo confirmado por todos los que, después de haber oído, y haber entendido, lo asimilaron y se llenaron de la fe necesaria para obrar como su Señor: "De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre" (Jn.14:12). Y es por eso que Dios se complacía en este operar juntamente con sus siervos, y las señales, y los prodigios y los diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo. según su voluntad; no hacían si no el confirmar que toda aseveración inherente al evangelio del reino había de ser comprobada y consolidada, con un testimonio interior que podría ser exteriorizado para mostrar la buena voluntad divina para con el género humano.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 08/10/2018 MENSAJE # 2779
CADA UNA DE LAS VIRTUDES QUE COMPONEN NUESTRO TESTIMONIO COMO SIERVOS DE DIOS, OPERANDO DE CONSUNO CON ÉL, SON CONSIDERADOS EN ESTE PASAJE. MANTENLAS COMO LOS PRINCIPIOS OPERATIVOS QUE TE HAGAN OPTIMIZARTGE EN EL SERVICIO AL PADRE.
ResponderEliminarAmén siervo.
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