LIMA - PERÚ DOMINGO 20 DE ENERO DEL 2019 MENSAJE # 2990
MEDITACIONES DIARIAS
Salmo 131:1
"Yahweh, no se ha envanecido mi corazón, ni mis ojos se entristecieron;
ni anduve en grandezas, ni en cosas demasiado sublimes para mí".
El autoanálisis Davídico nos ayuda para introducirnos en su intimidad
particular
resultando casi increíble que un hombre que ostentara una regia dignidad
secular
y divinal, se hubiera negado a ir en pos de su vanidad, teniendo esa
oportunidad
permitiéndonos ver cómo se negaba a sí mismo, sometiendo totalmente su
carnalidad.
El enaltecimiento que llega al corazón de un triunfador puede llenarlo de
fervor
por sí mismo, asumiendo una actitud de engreimiento con aires de un ser
superior
mirando a los demás con desprecio, sintiendo que ser humano no es opción
primera,
que nació para la celestial, que su destino será escalar hasta la celeste
esfera.
El bajo perfil de David le venía por el influjo de su vocación de servicio
total
al Dios que lo bendijera con su elección, y que le diera victorias en lo
general
y también en el orden particular, que le hiciera eludir los delirios de
grandeza
que derribaran a reyes e imperios sin importar todo lo que lograran en su
alteza.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 20/01/2019 MENSAJE # 2990.
ES IMPERATIVO QUE EL SIERVO DE DIOS, COMO TAL, MANTENGA UNA MUY HUMILDE POSICIÓN Y ACTITUD DELANTE DE SU REY Y SEÑOR.
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