viernes, 20 de abril de 2018

LAS INFIDELIDADES POSEEN EL PODER DE DESHACER UNA UNIÓN PACTUAL. SI EN EL CÓNYUGE AGRAVIADO NO HAY EL DESEO DE RESTAURAR LA RELACIÓN, TODO CONCLUIRÁ EN PÉRDIDA. SI LO HAY, ES NECESARIO CONSIDERAR EL PRECIO POR LA IGNOMINIA. EL QUE COMETE LA TRANSGRESIÓN NO CONSIDERA A NADIE, EL QUE LA RECIBE HA DE PENSAR EN EL PLANO FAMILIAR, SOCIAL Y ECLESIAL. QUE NUNCA TE VEAS EN ESTA SITUACIÓN ES MI ORACIÓN.

LIMA - PERÚ    VIERNES 20 DE ABRIL DEL 2018         MENSAJE # 2437

OSEAS 2:1-7.

"Decid a vuestros hermanos: Ammi; y a vuestras hermanas Ruhama. Contended con  vuestra madre, contended; porque ella no es mi mujer, ni yo su marido; aparte, pues, sus fornicaciones de su rostro, y sus adulterios de entre sus pechos; no sea que yo la despoje y desnude, la ponga como el día en que nació, la haga como un desierto, la deje como tierra seca, y la mate de sed. Ni tendré misericordia de sus hijos, porque son hijos de prostitución. Porque su madre se prostituyó; la que los dio a luz se deshonró, porque dijo: Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida. Por tanto yo rodearé de espinos su camino, y lo cercaré con seto, y no hallará sus caminos. Seguirá a sus amantes, y no los alcanzará; los buscará, y no los hallará. Entonces dirá: Iré y me volveré a mi primer marido, porque mejor me iba entonces que ahora".

=== Todo el capítulo primero está saturado de una dolorosa traición, de la nación escogida hacia Dios. Y el Padre tiene que habérselas con todo ello, exponiendo su dolor por lo vergonzoso de la situación. La infidelidad conyugal es un asunto muy delicado, y es para tratarlo con pinzas, y no comunicarlo a cualquiera, pues el escándalo puede alcanzar virales proporciones en muy corto lapso de tiempo. Los carnales hablan de "cuernos", y se sonríen sarcásticamente, y componen coplas al respecto, pensando sólo en el oprobio para quien lo sufriera; no considerando los valores centrales y vitales del pacto, que es lo que ocupa a Yahweh en toda esta situación. Nuestra escala de valores es advertida por nuestra actitud en ese sentido. La sorna, es propia del profano y vulgar; la preocupación, de aquel que teme que le pase lo mismo, independientemente de los motivos; pero será el pensamiento maduro del plano pactual el que nos llevará a pensar en cómo se podrá recuperar la dignidad, la honra y todo aquello que podría llevarnos al recobro de una crisis que afrenta a Dios, al cónyuge, a la familia, y a la sociedad dentro de su contexto. Digo esto último porque el adulterio era castigado con la lapidación, de la que todos participaran, tratando de borrar el deshonor y la afrenta para el agraviado, y de ver cómo quedaba la familia (hijos), después de ver la ejecución del culpable.

=== Los nombres de los hijos de Oseas pintan de cuerpo entero la situación del colapso que la unión célico-pedestre (entre Yahweh y la nación escogida) había sufrido; pero al inicio del capítulo segundo, el Señor le cambia el nombre a los tales, y la esperanza se hace visible ante los ojos llorosos y descarados de la nación culpable. Pero el Señor se detiene para analizar la situación, y aclarar con  los hijos el por qué de sus determinaciones, pidiéndoles que no se pongan 'de parte de mamá'; sino que le reclamen con dureza por sus traiciones flagrantes, refiriendo sus fornicaciones o relaciones sexuales indebidas; y sus adulterios o amoríos indebidos con otros alumbrando hijos de prostitución o bastardos. Y luego en el colmo de su descaro y desdoro, impregnada de su celo declaraba que buscaría nuevamente a sus amantes cabalgando en su lujuria con un ímpetu terrible. Ella se excusaba aduciendo que sus amantes le daban todo, a pesar que sabía que el Dador de todos las cosas era Yahweh... Y el grito clásico de las depravadas... "LO HAGO POR MIS HIJOS", no justificaba en lo más mínimo su depravación; y así, para que no se hiciera más daño a sí misma, y a su prole, el Señor tuvo que ponerle un cerco para que no desbocara más en pos de su delirio, llevándola por esa vía a reconocer que MEJOR LE IBA CON SU PRIMER MARIDO. El Señor sufrió una humillación sin precedentes, y sólo su fidelidad a la promesa hecha al patriarca Abraham lo mantuvo en su actitud perdonadora, rescatadora y restauradora.

=== Nuestra naturaleza particular muchas veces hace eco de esta actitud profana e infame, que no considera el corazón de Dios, su honor mancillado, la vergüenza a la que lo exponemos con nuestra inconducta; la misma que no merece comprensión o pena; sino un castigo punitivo. Pero Dios posee un corazón tan peculiar, que lo lleva a extremar su gracia, para recuperarnos y devolvernos a su comunión entrañable. Dejemos ya nuestras rebeldías y nuestras perversiones, y retornemos al Dios de paz y de gloria que sigue aguardando por nosotros mientras estorba nuestra estulticia, y nos sigue invitando a volver a él.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA      20/04/2018       MENSAJE # 2437.

1 comentario:

  1. LA GRACIA DE NUESTRO SEÑOR Y DIOS NOS ES MOSTRADA AQUÍ EN LA FORMA DE UNA PLENA RESTAURACIÓN. MÁS ALLÁ DE LO QUE CUALQUIERA HUBIERA HECHO, ASUMIDO O LOGRADO. EL AMOR PURO DE NUESTRO DIOS NO PUEDE SER SOSLAYADO SIN OFENDERLO EN EXTREMO. RINDÁMONOS A SU AMOR.

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