LIMA - PERÚ LUNES 19 DE MARZO DEL 2018 MENSAJE # 2374
MEDITACIONES DIARIAS
Salmo 9:1.
"Te alabaré, oh Yaweh, con todo mi corazón; contaré todas tus maravillas"
La alabanza es la perfumada voz de un corazón agradecido que reconoce a
Dios,
entendiendo que todo él le debe, no hiriendo esa comunión con un ingrato
adiós
que lo enajena de su fuente, mas reconociéndole perpetuamente como su
Progenitor,
hasta crear en su memoria un altar glorioso que proclame al Eterno como su
Señor.
Toda alma no cegada por el pecado, reconoce la grandeza y la majestuosidad de
Yahweh
quien nos creara para ser su alabanza, y la gloria terrena que en el cielo a él solo
alabe.
El excitado corazón del creyente verdadero estallará en sublime y pura
adoración,
sintiendo como una necesidad la alabanza, ofreciendo alma y cuerpo en su
canción.
Contar las maravillas de Dios tan solo el profeta inspirado puede por
revelación,
amalgamando su mente con la del Santo Espíritu divino, en pluma de célica
unción,
para no empalidecer la etérea belleza, u oscurecer al Padre la sabia
declaración
que rebasa el carnal pensamiento y aguza los sentimientos en diáfana
deleitación
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 19/03/2018 MENSAJE # 2374
EL GOZO DEL SEÑOR, EN EL SEÑOR, NO DEBE VERSE REPRIMIDO. DEBEMOS MAGNIFICAR SU NOMBRE, SER TOTALMENTE AGRADECIDOS, Y VERNOS ENVUELTOS EN LA ADORACIÓN Y LA ALABANZA COMO UNA NOTA ALEGRE EN UNA ESCALA MUSICAL, EN UN PENTAGRAMA, VIBRANDO JUNTO CON LA MELODÍA.
ResponderEliminar