miércoles, 16 de septiembre de 2015

LA HIPOTÉTICA DEFENSA DE ESTEBAN, QUE NO FUE SINO EL TESTIMONIO DE LA OBRA DIVINA EN EL CONTEXTO HISTÓRICO-PROFÉTICO DE LA NACIÓN HEBRAICA; DESCRIBIENDO LA INCREÍBLE TOZUDEZ DEL PUEBLO DE DIOS POR VARIAS CENTURIAS, LLEGANDO A SU COLAPSO EN ESTA ESPECIAL OCASIÓN; PRELUDIANDO LA PERSECUCIÓN DE LA IGLESIA, IMPULSÁNDOLA A SU ACCIÓN MISIONERA Y A SU EXPANSIÓN.

LIMA - PERÚ  MIÉRCOLES 16 DE SETIEMBRE DEL 2015

COMENTARIO EXEGÉTICO DEL LIBRO DE LOS HECHOS

hECHOS 7:51-55

"¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros. ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores; vosotros que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis. Oyendo estas cosas, se enfurecieron en sus corazones, y crujían los dientes contra él. Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios".

*** El celeste arrullo que compuso la alocución de Esteban en su testimonio de descargo ante el concilio, dio un salto colosal e inesperado; y los acusadores y los jueces fueron transportados a la sala del juicio celestial, donde con una destreza proverbial el diácono jerosolimitano ubicó al clero judaico, fiscalizando su fluir, y acusándolos de ser malversadores de los fondos divinales, e infames criminales que, apoyados en su posición religiosa y legal, habían dado muerte al Señor del modo más infame ... y mucho más, como veremos a continuación.

*** La insensatez, la reciedumbre y la obstinación se habían dado cita en las mentes, los oídos y los corazones de aquel grupo de plurales exponentes de la religión judía. Una gruesa capa de la carnalidad proverbial de los obtusos de pensamientos y actitudes, había aprisionado la cabal percepción de quienes, hasta ese momento, eran tenidos como los representantes de la Deidad a nivel judaico. Y fue esa sordera, ceguera y obstinación de corazones, lo que los hízo atacar a la Deidad manifestada en carne; irrespetar su regia persona, y repeler desde sus mismas entrañas la realidad divinal que había demostrado con dichos y hechos su origen y consigna provenientes de lo alto (Jn.7:31). La acusación fiscalizadora de Esteban no podía ser rebatida por aquellos que, como asesinos que eran, no sabían sino responder con saña y crueldad ciega ante todo lo que les significara una franca acusación... y ésta ¡lo era!

*** La tozudez ancestral que morara en ellos desde tiempo inmemorial, se manifestaba en una resistencia abierta y persistente contra todo lo que contraviniera sus planes, o los expusiera con la claridad que el joven diácono lo hiciera. La cerrada mentalidad del clero no tenía nada que ver con el celo religioso; sino con su persistencia en el poder y la autoridad que los hiciera inmunes a las reacciones de sus connacionales. Y la acusación continuaba sin pausa, mostrando que siempre la terca Israel tuvo la misma actitud contra todos los profetas, justificándose a sí misma (y acusando a Dios de injusticia, de paso), llevándolos a la agresión, las heridas, y el asesinato (Lc.20:9-18). El arrepentimiento no atravesaba sus mentes ni siquiera en forma fugaz, no constituyéndose el tal en una opción para el clero que siempre se expresaba ex-cátedra.

*** El ángel que hablara con Moisés desde la zarza, el que le diera la ley en el Sinaí; carecían de un sentido real y representativo para aquellos que se habían apoderado de las credenciales clericales, y que se habían convertido en la "deidad" representada por los setenta más uno. Los sacrificios no estuvieron dentro de los prospectos divinos de inicio; sino que fueron añadidos debido al déficit en la obediencia israelita; algo que se convirtió en una "divina permisividad" para las mentes de los judíos carnales, dando pie a una serie de trastornos en la interpretación de lo inherente a la santidad religiosa, llena de concesiones, entendidas como indulgencias de tipo venial que a la postre degeneraran en una religión "light", en la que se vivió desde entonces.

*** La conciencia (¿tenían?) del clero, acusada inmisericordemente por aquel inesperado fiscal de sus vidas; se convirtió en furia desbocada; haciendo crujir los dientes de los miembros del concilio contra la persona del acusado-acusador; y el Padre, lleno de gracia para con su siervo, le dio a entender que había expuesto su gloria en una forma pormenorizada y correcta, dándole la visión de la Deidad y del Cordero sentado a su diestra; indicándole que había llegado el día de su promoción a célicos lugares. Y eso fue el acabóse...Continuaremos mañana.

1 comentario:

  1. EN ESTE PASAJE, DESPUÉS DE SER ARRULLADOS POR LA CELESTE MINISTRACIÓN DEL JOVEN DIÁCONO JEROSOLIMITANO; TODO EL CLERO FUE TRANSPORTADO, DESDE SU UBICACIÓN DE ACUSADORES, Y MIEMBROS DEL JURADO, AL BANQUILLO DE LOS ACUSADOS... ¡Y NO LES GUSTÓ! ¿NOS GUSTARÍA UNA ÍNTIMA INVESTIGACIÓN QUE NOS EXPUSIERA TAN NÍTIDAMENTE ANTE OTROS?

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