LIMA - PERÚ JUEVES 13 DE JULIO DEL 2017 MENSAJE # 1872
DEUTERONOMIO 9:1-5.
"Oye, Israel, tú vas hoy a pasar el Jordán, para entrar a desposeer a naciones más numerosas y más podertosas que tú, ciudades grandes y amuralladas hasta el cielo; un pueblo grande y alto, hijos de los anaceos, de los cuales tienes tú conocimiento, y has oído decir: ¿Quién se sostendrá delante de los hijos de Anac? Entiende, pues, hoy, que es Yahweh tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor, que los destruirá y humillará delante de ti; y tú los heredarás y los destruirás en seguida, como Yahweh te ha dicho. No pienses en tu corazón cuando Yahweh tu Dios los haya echado de delante de ti, diciendo: Por mi justicia me ha traído Yahweh a poseer esta tierra; pues por la impiedad de estas naciones Yahweh las arroja de delante de ti. No por tu justicia, ni por la rectitud de tu corazón entras a poseer la tierra de ellos, sino por la impiedad de estas naciones Yahweh tu Dios las arroja de delante de ti, y para confirmar la palabra que juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob".
=== El Señor le hace a Israel la severa advertencia para que no se olviden de él cuando el éxito y la conquista haya llegado a su fin, y llenos de prosperidad, y con sus necesidades suplidas, le dieran la espalda a la Deidad que los hubiera favorecido de ese modo. Nadie mejor que Yahweh para conocer de ingratitudes, a pesar de todo lo que tuvo que hacer para llevarlos hasta la tierra prometida a sus padres. Cabe acotar que cuando Dios nos hace advertencias, el da por sentado que le seremos infieles. No nos hagamos los ofendidos en nuestro panorama relacional, y veamos a Yahweh como alguien muy duro y vengativo, porque la realidsd es otra. Así, pues, el Padre le dice a la nación israelita que pasará el Jordán y que desposeerá a las naciones cananeas, las cuales son descritas como mayores y más poderosas; (Dios no nos oculta la verdad sobre nuestras confrontaciones, mas lo hace para que sepamos que la victoria será nuestra por anticipación, porque él así lo ha predeterminado, allende las aparentes imposibilidades). Al poner todos los obstáculos delante de la nación escogida -y de nosotros por extensión- nos llama a no temer, y a considerar su gloriosa presencia como aquello que hará que las cosas se den en su contexto, es decir, conforme a sus promesas.
=== El mismísimo Dios estará delante de la nación en calidad de fuego consumidor (y esto es algo literal en su significado), y él ha de ser quien destruya la oposición cananea, y humillará a los gigantes (literales y espirituales), que no desean que heredemos el territorio que Dios ya había separado para nosotros como nuestra porción. Por eso es necesario echarlos de sus posesiones para que pasen a ser nuestras, y el único modo es eliminándolos, asgurándonos que los destruiremos en seguida, porque esa es la expresa voluntad divina. Frente a semejante promesa, el Señor nos advierte una vez más que no nos jactemos de nuestras victorias contra ellos. La fanfarronería de la vida es algo clásico en la persona natural o carnal, quien asumirá que "por su justicia" es que el Padre le adjudica esta herencia; y nada estámás lejos de la verdad que semejante aseveración; y es or eso que el Señor señala que es debido a la impiedad de aquellas naciones que so despojadas, y arrojadas de hermosa heredad judaica, el gozo de toda la tierra. Este accionar de la Deidad nos revela cómo la gracia divina está incursa en todo lo que hace para favorecer sus designios con la descendencia de Abraham (aquí en lo natural asumiendo como símbolo la arena del mar; y en lo espiritual, cuando le dice al patriarca que su descendencia será como las estrellaas del xielo en multitud), siendo siempre por su gracia que se ejecuta su propósito (Ro.3:28-30).
=== No será, pues, la justicia propia, ni la rectitud del corazón (aquí ya se incluye el panorama santificante que equivale a la perfección de los elegidos); la que los elevará a la condición de herederos; sino por la impiedad de los que serían arrojados de la tierra de promisión se establecería un cupo para los hijos amados. Una vez más el Señor reitera que la corrupción de los habitantes de Canaán es la que define o decide su expulsión y su eliminación de la faz de la tierra. La herencia para la progenie abrahámica tuvo que ver con la fidelidad de los hombres del Memorial: Abraham, Isaac y Jacob, haciendo notorio que la esperanza del pueblo israelita se debía al trabajo de amor de estos tres hombres, quienes le guardaran fidelidad al Padre para alcanzar su herencia en sus descendientes. Aquellos que hemos sido salvos por la fe, somos hijos de Abraham por ella, y nuestra herencia no es menor, conforme al pasaje que mencionáramos en el párrafo anterior. Que nuestra fidelidad tripartita sea la que dé testimonio por nosotros, en conformidad con Primera de Tesalonicenses 5:23.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 13/07/2017 MENSAJE # 1872.
"Oye, Israel, tú vas hoy a pasar el Jordán, para entrar a desposeer a naciones más numerosas y más podertosas que tú, ciudades grandes y amuralladas hasta el cielo; un pueblo grande y alto, hijos de los anaceos, de los cuales tienes tú conocimiento, y has oído decir: ¿Quién se sostendrá delante de los hijos de Anac? Entiende, pues, hoy, que es Yahweh tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor, que los destruirá y humillará delante de ti; y tú los heredarás y los destruirás en seguida, como Yahweh te ha dicho. No pienses en tu corazón cuando Yahweh tu Dios los haya echado de delante de ti, diciendo: Por mi justicia me ha traído Yahweh a poseer esta tierra; pues por la impiedad de estas naciones Yahweh las arroja de delante de ti. No por tu justicia, ni por la rectitud de tu corazón entras a poseer la tierra de ellos, sino por la impiedad de estas naciones Yahweh tu Dios las arroja de delante de ti, y para confirmar la palabra que juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob".
=== El Señor le hace a Israel la severa advertencia para que no se olviden de él cuando el éxito y la conquista haya llegado a su fin, y llenos de prosperidad, y con sus necesidades suplidas, le dieran la espalda a la Deidad que los hubiera favorecido de ese modo. Nadie mejor que Yahweh para conocer de ingratitudes, a pesar de todo lo que tuvo que hacer para llevarlos hasta la tierra prometida a sus padres. Cabe acotar que cuando Dios nos hace advertencias, el da por sentado que le seremos infieles. No nos hagamos los ofendidos en nuestro panorama relacional, y veamos a Yahweh como alguien muy duro y vengativo, porque la realidsd es otra. Así, pues, el Padre le dice a la nación israelita que pasará el Jordán y que desposeerá a las naciones cananeas, las cuales son descritas como mayores y más poderosas; (Dios no nos oculta la verdad sobre nuestras confrontaciones, mas lo hace para que sepamos que la victoria será nuestra por anticipación, porque él así lo ha predeterminado, allende las aparentes imposibilidades). Al poner todos los obstáculos delante de la nación escogida -y de nosotros por extensión- nos llama a no temer, y a considerar su gloriosa presencia como aquello que hará que las cosas se den en su contexto, es decir, conforme a sus promesas.
=== El mismísimo Dios estará delante de la nación en calidad de fuego consumidor (y esto es algo literal en su significado), y él ha de ser quien destruya la oposición cananea, y humillará a los gigantes (literales y espirituales), que no desean que heredemos el territorio que Dios ya había separado para nosotros como nuestra porción. Por eso es necesario echarlos de sus posesiones para que pasen a ser nuestras, y el único modo es eliminándolos, asgurándonos que los destruiremos en seguida, porque esa es la expresa voluntad divina. Frente a semejante promesa, el Señor nos advierte una vez más que no nos jactemos de nuestras victorias contra ellos. La fanfarronería de la vida es algo clásico en la persona natural o carnal, quien asumirá que "por su justicia" es que el Padre le adjudica esta herencia; y nada estámás lejos de la verdad que semejante aseveración; y es or eso que el Señor señala que es debido a la impiedad de aquellas naciones que so despojadas, y arrojadas de hermosa heredad judaica, el gozo de toda la tierra. Este accionar de la Deidad nos revela cómo la gracia divina está incursa en todo lo que hace para favorecer sus designios con la descendencia de Abraham (aquí en lo natural asumiendo como símbolo la arena del mar; y en lo espiritual, cuando le dice al patriarca que su descendencia será como las estrellaas del xielo en multitud), siendo siempre por su gracia que se ejecuta su propósito (Ro.3:28-30).
=== No será, pues, la justicia propia, ni la rectitud del corazón (aquí ya se incluye el panorama santificante que equivale a la perfección de los elegidos); la que los elevará a la condición de herederos; sino por la impiedad de los que serían arrojados de la tierra de promisión se establecería un cupo para los hijos amados. Una vez más el Señor reitera que la corrupción de los habitantes de Canaán es la que define o decide su expulsión y su eliminación de la faz de la tierra. La herencia para la progenie abrahámica tuvo que ver con la fidelidad de los hombres del Memorial: Abraham, Isaac y Jacob, haciendo notorio que la esperanza del pueblo israelita se debía al trabajo de amor de estos tres hombres, quienes le guardaran fidelidad al Padre para alcanzar su herencia en sus descendientes. Aquellos que hemos sido salvos por la fe, somos hijos de Abraham por ella, y nuestra herencia no es menor, conforme al pasaje que mencionáramos en el párrafo anterior. Que nuestra fidelidad tripartita sea la que dé testimonio por nosotros, en conformidad con Primera de Tesalonicenses 5:23.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 13/07/2017 MENSAJE # 1872.
CUANDO DIOS HACE SUCESIVAS REFERENCIAS A UN MISMO HECHO, NO ES QUE SEA UN "PADRE CARGOSO", SINO ALGUIEN QUE TIENE SUMO CUIDADO DE QUE LAS COSAS SE HAGAN DE TAL FORMA QUE LE AGRADEN A ÉL EN TODO, Y QUE SE TENGA PLENA CONSCIENCIA DE QUE LO QUE ÉL MANIFESTÓ, TENÍA SU RAZÓN DE SER, Y QUE NO FUE POR GUSTO.
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