LIMA - PERÚ JUEVES 24 DE AGOSTO DEL 2017 MENSAJE # 1957
EZEQUIEL 33:23-26.
"Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: Hijo de hombre, los que habitan aquellos lugares asolados en la tierra de Israel hablan diciendo: Abraham era uno, y poseyó la tierra; pues nosotros somos muchos; a nosotros es dada la tierra en posesión. Por tanto, diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¿Comeréis con sangre, y a vuestros ídolos alzaréis vuestros ojos, y derramaréis sangre, y poseeréis vosotros la tierra? Estuvisteis sobre vuestras espadas, hicisteis abominación, y contaminasteis cada cual la mujer de su prójimo, ¿y habréis de poseer la tierra?".
=== Después que la ciudad había sido conquistada, los fervorosos patriotas cautivos se daban aliento entre ellos aduciendo que si un solo hombre (Se referían al patriarca Abraham quien siempre obedeciera a Dios yendo en pos de su guianza) había llegado a poseer la tierra de promisión, siendo ellos muchos, seguramente la recuperarían. Semejante arenga podía impresionar a los faltos de juicio, a los ilusos y a los necios; pero ello era un asalto al sentido común de los patrioteros baratos, quienes no consideraran su posición como gente castigada por Dios debido a su iniquidad; sino victimizada por un momentáneo revés que no duraría gran cosa (¡los años de cautiverio serían setenta!); con un equivocado sentido de la justicia, siempre buscando equipararlo con su condición de elegidos hijos de Abraham, "preferidos y engreídos entre la humanidad", y que jamás prestaran atención a las peticiones del Padre para convertirse en un pueblo santo, entendiendo el plano de su genuina identificación con la Deidad, buscaban persistir tercamente en una elección que no tenía vuelta de hoja, y que Dios había de sostener a como dé lugar en su imaginación; no teniendo en cuenta las exigencias del pacto, al cual siempre ellos consideraran las obligaciones de Yahweh para con ellos, sin ninguna correspondencia por su parte, pretendiendo una santidad sin separación ni obediencia al Señorío divinal... ¡Un completo absurdo doctrinal!
=== Las promesas divinas están subordinadas al plano de la obediencia implícita al pacto o la alianza celebrada en su momento con la Deidad. Asumir que sólo la Deidad tiene obligaciones, y la contraparte sólo privilegios; es uno de los más burdos engaños, y un imposible pactual. Es por eso que el Padre se ve en la necesidad de hacer un análisis entre aquellos 'héroes anónimos', revelándoles su condición, la ruptura del pacto, y la necesidad de arrepentimiento y redención mediante un sacrificio ... ¡si es que Dios Padre la considera factible!; y ya no dentro de los límites de la ley mosaica, sino en la de su extendida gracia voluntaria, y a su sazón. Así, al hacerles una auscultación que calificaremos de preventiva, el Señor pone en el tapete estas premisas básicas:
(1) Ellos comían la carne con sangre, algo que Dios había prohibido expresamente en su momento, y que ellos considerasen un pecado venial sin mayor repercusión; ¡Cuidado con nuestro modo de pensar y de obrar acerca de los considerandos divinos! Para el Padre esto no era una trivialidad; sino una abierta irreverencia al sentido de nuestra redención (Lv.17:10-14; Hch.15:20, 25).
(2) Alzaban sus ojos a sus ídolos, implicando un acto de veneración y adoración a otros dioses, pecando contra el primer mandamiento en una forma abierta y grosera.
(3) Derramaban sangre, eran homicidas por naturaleza, no estimando la vida humana más allá de sus miramientos y su apariencia de piedad o de justicia.
(4) Estaba sobre sus espadas, lo cual demuestra su carácter belicoso, y sus instintos criminales.
(5) Hacían abominación, estos eran sus actos conductuales prevaricando contra Dios en el modo más infame, espiritual, anímica y socialmente, manifestando una conducta aberrante en todo ello.
(6) Eran adúlteros, contaminando a otros y otras con sus prácticas opuestas a lo proclamado y exigido por la Deidad. ¡Y eran éstas las personas que querían poseer la tierra!
=== Ellos eran la antítesis de lo que Dios había solicitado, y ellos necesitaban escuchar las palabras de Jesús: "...Si fueseis hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais" (Jn.8:39b). Los que habitamos hoy en la presencia de Dios estamos convencidos que sin santidad, nadie verá a Dios (He.12:14). Estos alucinados no hablaban con la divina inspiración; sino con su nula percepción de lo que la vida espiritual es... ¡No caigamos en una trampa tan infantil!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 24/08/2017 MENSAJE # 1957
"Y vino a mí palabra de Yahweh, diciendo: Hijo de hombre, los que habitan aquellos lugares asolados en la tierra de Israel hablan diciendo: Abraham era uno, y poseyó la tierra; pues nosotros somos muchos; a nosotros es dada la tierra en posesión. Por tanto, diles: Así ha dicho Yahweh el Señor: ¿Comeréis con sangre, y a vuestros ídolos alzaréis vuestros ojos, y derramaréis sangre, y poseeréis vosotros la tierra? Estuvisteis sobre vuestras espadas, hicisteis abominación, y contaminasteis cada cual la mujer de su prójimo, ¿y habréis de poseer la tierra?".
=== Después que la ciudad había sido conquistada, los fervorosos patriotas cautivos se daban aliento entre ellos aduciendo que si un solo hombre (Se referían al patriarca Abraham quien siempre obedeciera a Dios yendo en pos de su guianza) había llegado a poseer la tierra de promisión, siendo ellos muchos, seguramente la recuperarían. Semejante arenga podía impresionar a los faltos de juicio, a los ilusos y a los necios; pero ello era un asalto al sentido común de los patrioteros baratos, quienes no consideraran su posición como gente castigada por Dios debido a su iniquidad; sino victimizada por un momentáneo revés que no duraría gran cosa (¡los años de cautiverio serían setenta!); con un equivocado sentido de la justicia, siempre buscando equipararlo con su condición de elegidos hijos de Abraham, "preferidos y engreídos entre la humanidad", y que jamás prestaran atención a las peticiones del Padre para convertirse en un pueblo santo, entendiendo el plano de su genuina identificación con la Deidad, buscaban persistir tercamente en una elección que no tenía vuelta de hoja, y que Dios había de sostener a como dé lugar en su imaginación; no teniendo en cuenta las exigencias del pacto, al cual siempre ellos consideraran las obligaciones de Yahweh para con ellos, sin ninguna correspondencia por su parte, pretendiendo una santidad sin separación ni obediencia al Señorío divinal... ¡Un completo absurdo doctrinal!
=== Las promesas divinas están subordinadas al plano de la obediencia implícita al pacto o la alianza celebrada en su momento con la Deidad. Asumir que sólo la Deidad tiene obligaciones, y la contraparte sólo privilegios; es uno de los más burdos engaños, y un imposible pactual. Es por eso que el Padre se ve en la necesidad de hacer un análisis entre aquellos 'héroes anónimos', revelándoles su condición, la ruptura del pacto, y la necesidad de arrepentimiento y redención mediante un sacrificio ... ¡si es que Dios Padre la considera factible!; y ya no dentro de los límites de la ley mosaica, sino en la de su extendida gracia voluntaria, y a su sazón. Así, al hacerles una auscultación que calificaremos de preventiva, el Señor pone en el tapete estas premisas básicas:
(1) Ellos comían la carne con sangre, algo que Dios había prohibido expresamente en su momento, y que ellos considerasen un pecado venial sin mayor repercusión; ¡Cuidado con nuestro modo de pensar y de obrar acerca de los considerandos divinos! Para el Padre esto no era una trivialidad; sino una abierta irreverencia al sentido de nuestra redención (Lv.17:10-14; Hch.15:20, 25).
(2) Alzaban sus ojos a sus ídolos, implicando un acto de veneración y adoración a otros dioses, pecando contra el primer mandamiento en una forma abierta y grosera.
(3) Derramaban sangre, eran homicidas por naturaleza, no estimando la vida humana más allá de sus miramientos y su apariencia de piedad o de justicia.
(4) Estaba sobre sus espadas, lo cual demuestra su carácter belicoso, y sus instintos criminales.
(5) Hacían abominación, estos eran sus actos conductuales prevaricando contra Dios en el modo más infame, espiritual, anímica y socialmente, manifestando una conducta aberrante en todo ello.
(6) Eran adúlteros, contaminando a otros y otras con sus prácticas opuestas a lo proclamado y exigido por la Deidad. ¡Y eran éstas las personas que querían poseer la tierra!
=== Ellos eran la antítesis de lo que Dios había solicitado, y ellos necesitaban escuchar las palabras de Jesús: "...Si fueseis hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais" (Jn.8:39b). Los que habitamos hoy en la presencia de Dios estamos convencidos que sin santidad, nadie verá a Dios (He.12:14). Estos alucinados no hablaban con la divina inspiración; sino con su nula percepción de lo que la vida espiritual es... ¡No caigamos en una trampa tan infantil!
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 24/08/2017 MENSAJE # 1957
CADA VEZ QUE DESEEMOS HACER ALGO PARA LOGRAR UN OBJETIVO ESPECÍFICO, DÉMONOS LA MOLESTIA DE CONSULTAR CON DIOS SI ESTAMOS APAREJADOS PARA REALIZARLO, DE ACUERDO A SU VOLUNTAD. PODEMOS SORPRENDERNOS DE SUS RESPUESTAS.
ResponderEliminar