miércoles, 7 de febrero de 2018

HAY FASES MUY CRÍTICAS EN LA VIDA DE TODO CREYENTE, Y LO MÁS SABIO SERÁ LLEVAR ANTE EL PADRE NUESTRAS CUITAS Y NUESTRAS DESDICHAS. ÉL TIENE EL CONSUELO PRECISO PARA NUESTRA CONGOJA, Y LA RESPUESTA IDEAL PARA NUESTRO PROBLEMA. ¡VEN, Y DERRAMA TU ALMA ANTE ÉL!

LIMA - PERÚ    MIÉRCOLES 07 DE FEBRERO DEL 2018         MENSAJE # 2292

MEDITACIONES VARIAS.

Primera de Samuel 1:10.

"Ella con amargura de alma oró a Yahweh, y lloró abundantemente".

===Las naciones jóvenes, en su temprana formación requerían del máximo de habitantes varones en calidad de cerco defensivo contra la hostilidad de las tribus extranjeras, que también luchaban por su extensión territorial.

=== De allí que los hombres tuvieran más de una pareja en calidad de consortes.

=== Para una mujer, en aquellas condiciones, no existía mayor desdicha que ser estéril, privando a su esposo de alegría, y a su nación de la ansiada seguridad territorial.

=== El acoso constante en las festividades judaicas por parte de su rival sentimental, hizo a Ana una mujer desdichada que asociara las festividades con singulares sufrimientos, congojas y vituperios.

=== Mas, en aquella oportunidad, el asedio y las agresiones verbales de Penina sirvieron para empujar a Ana a una feliz decisión: ORAR A DIOS CON TODO EL DESEO DE SU ALMA, misma que se hallara en una profunda amargura.

=== Ana derramó su alma ante el Señor, entregándole toda su desolación y congoja, hasta que ya no estuvo más triste.

=== Aquella serenidad de su rostro no pudo ser nunca más APENADA POR PENINA, quien ya no encontrara reacción, ni verbal ni anímica en Ana.

===Esta paz que coronara el corazón de la esposa de Elcana, fue el preludio de su fecundidad, de la venida de aquel varón que sería distinguidísimo entre sus hermanos de raza, por ser el fruto del amor de Dios para con Ana, y para con su pueblo Israel: Samuel.

=== ¿Estás sumido en una mortal angustia, o al límite de tu congoja? ¡DERRÁMALA ANTE DIOS!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA         07/02/2018          MENSAJE # 2292.


1 comentario:

  1. SEA CUAL SEA NUESTRA CONGOJA O NUESTRA TRISTEZA, HA DE SER LLEVADA A LA PRESENCIA DE DIOS, DEJÁNDOLE A ÉL LA CARGA, Y CONFIANDO EN QUE ÉL PROVEERÁ LOS MEDIOS PARA QUE LA SOLUCIÓN VENGA EN LA FORMA Y EL TIEMPO ADECUADOS.

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