LIMA - PERÚ SÁBADO 16 DE DICIEMBRE DEL 2017 MENSAJE # 2185
NÚMEROS 10:1-10.
"Yahweh habló a Moisés, diciendo: Hazte dos trompetas de plata, de obra de martillo las harás, las cuales te servirán para convocar a la congregación, y para hacer mover los campamentos. Y cuando las tocaren, toda la congregación se reunirá ante ti a la puerta del tabernáculo de reunión. Mas cuando tocaren sólo una, entonces se congregarán ante ti los príncipes, los jefes de los millares de Israel. Y cuando tocareis alarma, entonces moverán los campamento de los que están acampados al oriente. Y cuando tocareis alarma la segunda vez, entonces moverán los campamentos de los que están acampados al sur, alarma tocarán para sus partidas. Pero para reunir la congregación tocaréis, mas no como sonido de alarma. Y los hijos de Aarón, los sacerdotes, tocarán las trompetas; y las tendréis por estatuto perpetuo por vuestras generaciones. Y cuando saliereis a la guerra en vuestra tierra contra el enemigo que os molestare, tocaréis alarma con las trompetas y seréis recordados por Yahweh vuestro Dios, y seréis salvos de vuestros enemigos. Y en el día de vuestra alegría, y en vuestras solemnidades, y en los principios de vuestros meses, tocarán las trompetas sobre vuestros holocaustos, y sobre los sacrificios de paz, y os serán por memoria delante de vuestro Dios. Yo Yahweh vuestro Dios".
=== La importancia y la vigencia de la comunión entre los campamentarios, y su relación particular y única con su Señor y Dios, y el orden constituido para que todas las cosas importantes se hagan al son de trompetas (las trompetas simbolizan la declaración abierta de un mensaje divino, siguiendo un orden preestablecido que haría que todo funcionara en una sincronía célico-pedestre que tendría el éxito como cabal resultado). Como sabemos, la plata hace referencia al panorama redentivo, implicando que el favor divino tiene a sus redimidos como los beneficiarios directos de su amor y particular consideración. Al haber sido hecha por sucesivos golpes de martillo, implicaba la forja del ánimo y del panorama de obediencia al que debían ceñirse todos los que fueran formados así. No son golpes destructivos; sino formativos, para que la imagen ideal divina fuera el producto de la experiencia redentora, indicando el cómo el Padre había establecido a cada comprometido con él en su rigor y drasticidad, dándole a ellos el sonido ideal (representando su voz en una forma exacta, precisa y armónica, definiendo sus movimientos y sus tiempos de unión para la gloria de Dios). Los que trabajan la madera y el metal tienen que darle a los instrumentos la forma precisa y el tono definido: "Ciertamente las cosas inanimadas que producen sonidos, como la flauta o la cítara (su voz, la mía), si no dieren distinción de voces, ¿cómo se sabrá lo que se toca con la flauta o con la citara? Y SI LA TROMPETA DIERE SONIDO INCIERTO, ¿quién se preparará para la batalla?" (1Co.14:7-8). Aquel precioso par de instrumentos debían ser hechos por una destreza que permitiera que muchas generaciones fueran conducidas con el definido sonido de la voz divina, optimizando su gloriosa función conforme a su propósito.
=== El principio divino siempre convoca a un orden preacordado, a las sabias instrucciones de quien está premunido de la directiva divinal, dándoles a todo un sentido común, una única perspectiva, y un mandato que había de ser obedecido tal como se les hubiera compartido. La puerta del tabernáculo de reunión era la sede central para los acuerdos, tanto en lo particular como en lo general; es decir para los príncipes, y para todo el pueblo, conforme al orden previamente acordado. Cada sonido había de estar claramente definido, como ocurre en la milicia donde todo está muy definido, y nadie confunde una diana con un rancho; algo semejante debe suceder con nosotros para que el pan de los hijos, no parezca un chicharrón de sebo para el carnal y el inconforme; y para que el legalismo a ultranza no se sienta ofendido por la falta de ají o rocoto (chiles para otros) en la prédica, la cual debe estar sazonada con la condenación como el más eficaz saborizante; o que fuera algo tan light (ligero) para los cristianos "sumamente sensibles"... ¡Válgame Dios! Dado que las trompetas habían de ser tocadas por los sacerdotes (nadie más tenía ese derecho divinamente asignado), indica que en nuestro tiempo hay que escuchar las ministraciones por la gente ungida para ello, y no por trompetistas callejeros que predican estulticias por el Internet, y de los "profetas acelerados" que aseguran el fin del mundo con demasiada asiduidad, no ciñéndose a la TROMPETA PRINCIPAL QUE ES EL VERBO DE DIOS, y los siervos que no se atreven a dar fechas, hasta que el Padre decida que las cosas han llegado a su completa madurez. Si tocamos las trompetas, estaremos a salvo de nuestros enemigos, y Yahweh será nuestra defensa. Mientras tanto, oigamos a las trompetas en las alegrías de nuestras solemnidades, trayéndole a Dios nuestros sacrificios de paz, los cuales cuentan en la presencia de nuestro Dios.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 16/12/2017 MENSAJE # 2185.
NÚMEROS 10:1-10.
"Yahweh habló a Moisés, diciendo: Hazte dos trompetas de plata, de obra de martillo las harás, las cuales te servirán para convocar a la congregación, y para hacer mover los campamentos. Y cuando las tocaren, toda la congregación se reunirá ante ti a la puerta del tabernáculo de reunión. Mas cuando tocaren sólo una, entonces se congregarán ante ti los príncipes, los jefes de los millares de Israel. Y cuando tocareis alarma, entonces moverán los campamento de los que están acampados al oriente. Y cuando tocareis alarma la segunda vez, entonces moverán los campamentos de los que están acampados al sur, alarma tocarán para sus partidas. Pero para reunir la congregación tocaréis, mas no como sonido de alarma. Y los hijos de Aarón, los sacerdotes, tocarán las trompetas; y las tendréis por estatuto perpetuo por vuestras generaciones. Y cuando saliereis a la guerra en vuestra tierra contra el enemigo que os molestare, tocaréis alarma con las trompetas y seréis recordados por Yahweh vuestro Dios, y seréis salvos de vuestros enemigos. Y en el día de vuestra alegría, y en vuestras solemnidades, y en los principios de vuestros meses, tocarán las trompetas sobre vuestros holocaustos, y sobre los sacrificios de paz, y os serán por memoria delante de vuestro Dios. Yo Yahweh vuestro Dios".
=== La importancia y la vigencia de la comunión entre los campamentarios, y su relación particular y única con su Señor y Dios, y el orden constituido para que todas las cosas importantes se hagan al son de trompetas (las trompetas simbolizan la declaración abierta de un mensaje divino, siguiendo un orden preestablecido que haría que todo funcionara en una sincronía célico-pedestre que tendría el éxito como cabal resultado). Como sabemos, la plata hace referencia al panorama redentivo, implicando que el favor divino tiene a sus redimidos como los beneficiarios directos de su amor y particular consideración. Al haber sido hecha por sucesivos golpes de martillo, implicaba la forja del ánimo y del panorama de obediencia al que debían ceñirse todos los que fueran formados así. No son golpes destructivos; sino formativos, para que la imagen ideal divina fuera el producto de la experiencia redentora, indicando el cómo el Padre había establecido a cada comprometido con él en su rigor y drasticidad, dándole a ellos el sonido ideal (representando su voz en una forma exacta, precisa y armónica, definiendo sus movimientos y sus tiempos de unión para la gloria de Dios). Los que trabajan la madera y el metal tienen que darle a los instrumentos la forma precisa y el tono definido: "Ciertamente las cosas inanimadas que producen sonidos, como la flauta o la cítara (su voz, la mía), si no dieren distinción de voces, ¿cómo se sabrá lo que se toca con la flauta o con la citara? Y SI LA TROMPETA DIERE SONIDO INCIERTO, ¿quién se preparará para la batalla?" (1Co.14:7-8). Aquel precioso par de instrumentos debían ser hechos por una destreza que permitiera que muchas generaciones fueran conducidas con el definido sonido de la voz divina, optimizando su gloriosa función conforme a su propósito.
=== El principio divino siempre convoca a un orden preacordado, a las sabias instrucciones de quien está premunido de la directiva divinal, dándoles a todo un sentido común, una única perspectiva, y un mandato que había de ser obedecido tal como se les hubiera compartido. La puerta del tabernáculo de reunión era la sede central para los acuerdos, tanto en lo particular como en lo general; es decir para los príncipes, y para todo el pueblo, conforme al orden previamente acordado. Cada sonido había de estar claramente definido, como ocurre en la milicia donde todo está muy definido, y nadie confunde una diana con un rancho; algo semejante debe suceder con nosotros para que el pan de los hijos, no parezca un chicharrón de sebo para el carnal y el inconforme; y para que el legalismo a ultranza no se sienta ofendido por la falta de ají o rocoto (chiles para otros) en la prédica, la cual debe estar sazonada con la condenación como el más eficaz saborizante; o que fuera algo tan light (ligero) para los cristianos "sumamente sensibles"... ¡Válgame Dios! Dado que las trompetas habían de ser tocadas por los sacerdotes (nadie más tenía ese derecho divinamente asignado), indica que en nuestro tiempo hay que escuchar las ministraciones por la gente ungida para ello, y no por trompetistas callejeros que predican estulticias por el Internet, y de los "profetas acelerados" que aseguran el fin del mundo con demasiada asiduidad, no ciñéndose a la TROMPETA PRINCIPAL QUE ES EL VERBO DE DIOS, y los siervos que no se atreven a dar fechas, hasta que el Padre decida que las cosas han llegado a su completa madurez. Si tocamos las trompetas, estaremos a salvo de nuestros enemigos, y Yahweh será nuestra defensa. Mientras tanto, oigamos a las trompetas en las alegrías de nuestras solemnidades, trayéndole a Dios nuestros sacrificios de paz, los cuales cuentan en la presencia de nuestro Dios.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 16/12/2017 MENSAJE # 2185.
CUANDO EL PADRE QUIERE FORJAR ALGO, ES TAN ESPECÍFICO, QUE DESCRIBE CADA DETALLE DE LO QUE CONFORMARÁ SU VOLUNTAD DIVINA EN EL EJERCICIO DE NUESTRAS FUNCIONES, HACIENDO QUE NO HAYA PREGUNTAS DESPUÉS DE LAS INDICACIONES RESPECTIVAS.
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